Irina ha amado con locura, hasta el punto de negarse a sí misma en pos de buscar el amor de ese hombre que ni siquiera se preocupa por ella.
Luego de tres largos y dolorosos años decide dar vuelta la página y continuar con su vida sin él. Llegó el momento de dejar de amarlo para amarse a sí misma.
_ Por favor regresa_ le dijo Louis postrado a sus pies.
_¿Te conozco?_ preguntó ella con burla en los ojos para luego continuar su camino ignorando al hombre que seguía postrado en ese lugar.
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Rescate
Todos aplaudían con fingida emoción la declaración de amor de Louis. Sus parientes se sentían satisfechos de que el hombre hubiera elegido al fin una mujer de su clase. Parecía que todos habían olvidado de repente que esa mujer lo dejó plantado unos días antes de la boda.
Nena, ¿se han olvidado del abandono anterior? preguntó intrigada Natacha.
Parece que la memoria a corto plazo se les borró, ya se han olvidado de todo contestó risueña.
De todo no esta vez fue Emilio el que habló parece que no pueden olvidarse de odiarte agrega mira sus ojos llenos de desprecio
Esas personas son demasiado hipócritas para mi gusto Harry metió su bocado a la conversación.
Lo que es a mí me tiene sin cuidado lo que piensen, sientan o digan. Nada de todo eso cambiará quién soy y ellas…están muy por debajo de mí aseguró Irina para dar por finalizada esa conversación.
Las tres harpías observaban con sus ojos entornados en dirección a Irina. Parecía que estaban midiendo distancias y fuerzas, preparando su contraataque. Sylvie se acercaba a ellas con Louis a su lado. La sonrisa burlona de la rubia iba dirigida en pleno a la que creía su contrincante.
Louis, lamento mucho que tengas que seguir viendo a Irina en todos lados, creo que ella debería de comportarse después de todo recién firman el divorcio dijo con fingida melancolía la nueva novia.
Louis miró a Irina para darse cuenta de que esta ni lo determinaba, había una peligrosidad increíble en su mirar. Quería poder acercarse a ella y ahorcarla con sus propias manos por descarada. No entendía qué es lo que ella hacía en ese lugar acompañada de Emilio ¿Qué relación real tenían esos dos? ¿Era ella amante de Harry o de Emilio? ¿Tan rápido lo olvidó? ¿No había jurado amarlo? El hombre se sentía perdido, creía que él mismo ya no era dueño de su vida, sino que sus acciones estaban determinadas por alguien más.
Irina se sentía pesada, la mirada de Louis era molesta, pero no era lo que la inquietaba. Era esa extraña sensación de que alguien en algún lugar estaba siguiendo cada uno de sus movimientos. Con una cálida sonrisa en los labios comenzó a alejarse del bullicio para poder ir al tocador. Caminaba tranquila cuando observó que por el mismo rumbo iban las harpías menores y francamente no tenía intenciones de toparse con ellas por lo que decidió caminar hacia el hermoso jardín del hotel.
El lugar era majestuoso. Ella observaba detenidamente todo lo que había a su alrededor. Una gran piscina se encontraba en el lugar. Una enorme cascada le daba inicio. El agua caía majestuosamente por las brillantes piedras, las luces adornaban todo cambiando de color. Todos los detalles le daban el toque necesario para convertir esa imagen en un lugar paradisíaco, casi celestial. Las flores y los árboles daban el toque justo. El agua cristalina de la piscina la había invitado a acercarse más. Pudo observar que en el centro de la misma se encontraba una pequeña isla que contenía plantas de clase tropical. Se sentía en paz, le encantaba el paisaje. Hasta que, de un momento al otro, se vio sumergida en el agua comenzando a luchar por su vida.
Un hombre que se encontraba en las sombras siguiendo cada paso que ella daba pudo ver las malas intenciones de la persona que se le acercaba de manera sigilosa hasta por fin empujarla para que cayera a la pileta. El hombre, que era como un gigante, corrió como loco al notar que la mujer que él tanto miraba no sabía nadar. Ella manoteaba y trataba de gritar pidiendo auxilio, pero no había nadie alrededor, excepto él. Se hundía en el agua e intentaba salir una y otra vez, la desesperación y el terror se veían grabados en su mirada.
Tranquila…tranquila, te tengo dijo una voz gruesa y ronca que dejó helada a la mujer que de inmediato se tranquilizó.
Por alguna razón descabellada, Irina sentía seguridad absoluta en los brazos de este hombre que no sabía quien era. Él le hablaba al oído mientras que la guiaba a las escaleras de la majestuosa piscina.
Ya todo pasó preciosa…ahora estás conmigo y estás bien y segura volvió a decir mientras la abrazaba de manera cálida y tierna. Ella nunca se había sentido así, como si de repente estuviera en su lugar seguro.
Gra…gracias pudo decir por fin entre los temblores producidos por el frío.
Señor, aquí tiene una toalla para usted y para la dama dijo un hombre de traje que se encontraba junto a ellos. Había visto a su jefe correr y al percatarse de lo ocurrido consiguió de inmediato las toallas para secarla y abrigarla.
Irina había estado ajena a todo lo que pasaba a su alrededor, de tal manera que nunca se percató de la llegada de este hombre.
Vladimir sostenía firmemente a la mujer y la tomó entre sus brazos, como a una princesa, para luego caminar con ella dentro del hotel, evadiendo el sector donde se desarrollaba la gala. Ella lo miraba embobada con sus ojitos obnubilados por el hombre que la sostenía entre sus fuertes brazos. Nunca había visto a un hombre tan hermoso, era como un Dios, o un diablo porque se veía encantadoramente peligroso. Sus ojos negros eran penetrantes, mandíbula firme y cuadrada, nariz recta y labios terriblemente apetecibles. Ella se sentía seducida por cada movimiento que su salvador daba con ella encaramada sobre él.
Natacha que había salido en busca de su amiga pudo observar como una montaña andante la llevaba cargada y ella estaba sujeta como garrapata a ese fornido cuerpo. Grito tratando de llamar la atención de esa mole cuando alguien a quién no había visto le habló de repente.
La dama fue empujada a la piscina… comenzó a decir.
¿Qué? Ella no sabe nadar dijo asustada y comprendiendo un poco lo que había ocurrido.
El Amo se arrojó a rescatarla y ahora la lleva a su habitación para ayudarla con su ropa mojada. Si gusta la guio a la suite terminó por decir ese apuesto caballero que al parecer es un empleado de la mole, alias Vladimir.
Tengo que informar a nuestros amigos, ¿puedo ir a buscarlos y vamos todos? Necesito saber qué es lo que ocurrió ella estaba preocupada y sabía que su amiga debía estar muy asustada, o muy excitada. No estaba segura de cuál era la respuesta real, pero tenía que ir con Emilio y Harry.
En otro lugar dentro de la celebración una preocupada Sylvie miraba hacia todos lados. Estaba inquieta, no sabía que había pasado con Irina. Solo quería humillarla haciendo que se fuera toda mojada, pero no imaginó que ella no supiera nadar. Cuando la empujó salió corriendo para no ser vista, pero pudo escuchar durante su huida los gritos desesperados pidiendo auxilio.
¿Te ocurre algo? preguntó un preocupado Louis.
No…solo es que… comenzó a sollozar y aferrarse al hombre recuerdo a mis padres y quisiera que ellos estuvieran aquí en este momento dijo entre lágrimas con la cabeza apoyada en el pecho de su prometido.
Louis la abrazó con ternura y acarició su cabello. Sentía mucha pena por ella que estaba ahora sola en el mundo, solo lo tenía a él.
Tranquila Sylvie, yo estoy a tu lado y nunca te voy a dejar sola consolaba de manera cariñosa.
A lo lejos Louis observaba el ingreso de Natacha, quien se veía bastante preocupada. Decía algo a Emilio y Harry y luego los tres volvían a salir directo hacia el jardín.