Seducido Por Mi Secretaria

Bruno

Ya entrada la tarde, empezé a sentir un fuerte dolor de cabeza por lo que le pedí a Inca que me trajera algo para el dolor. Al ver que se demoraba un poco, decidí salir de mi oficina para ver si no había encontrado nada, ya que si ese era el caso lo mejor sería que me fuera a casa.

Cuando salí de la oficina, lo hice sobándome la cabeza porque al levantarme de mi silla me dió un leve mareo.

_ Inca ¿Por qué aún no me has llevado la pastilla que te pedí? ¿No encontraste ninguna? Es que no aguanto el dolor de cabeza.

Pregunté esperando a que ella me contestara, pero en vez de eso solo obtuve silencio. Al levantar la cabeza para ver a mi alrededor, veo una escena que no me esperaba. Justo en frente de Inca está parada Olivia y la verdad cuando dijo que vendría, no pensé que lo dijera en serio.

Miro a Inca antes de poder hacer algo y veo como ella está bastante enojada, de seguro aquella loca le dijo algo que la puso así.

_ Brunito, te extrañé tanto bebé. Acabo de llegar para hablar contigo y tu inútil secretaria me dijo que no estabas. Que podría largarme porque ella era quien mandaba aquí.

Siento como Olivia se pega a mi cuello como un koala y se que ella lo está haciendo para molestar a Inca. Olivia empieza a hablar como si fuera una niña inocente cuando en realidad, yo sé perfectamente que no lo es.

_ Disculpe señorita, pero me parece muy patético de su parte el que diga semejante mentira cuando fue usted quien me ofendió a mí _ Dijo Inca con bastante molestia en su voz.

_ ¿Quién te crees que eres para hablarme en ese tono? _ Preguntó Olivia y para apaciguar la situación decido intervenir.

_ ¿Qué haces aquí Olivia? _ Pregunté calmado y en un tono cariñoso para no matar a esta loca.

_ ¿Qué no es obvio? Vine por tí.

Cuando ella dijo eso, me obligué a contar mentalmente para no perder la calma. Ya que cuando vi la reacción de Inca, enseguida me llegó la indirecta de que ella estaba por matar a Olivia.

No entiendo porque razón cuando dije que hablaría con Olivia en mi oficina, Inca adoptó una posición extraña. Solamente me entregó mi pastilla junto con el café y después dijo que se iría a casa.

Debido a lo molesta que estaba, le pedí que me esperara unos minutos mientras yo regresaba para hablar con ella. Así que sin perder más tiempo, entré en mi oficina seguido por Olivia y una vez adentro. Me senté en el borde de mi escritorio para tomarme la pastilla.

_ ¿Te vas a quedar callada? _ Pregunté sin más.

_ No se de que quieres que hable.

_ Que te parece si me dices que fue lo que le dijiste a Inca.

_ ¿Y qué te hace pensar que le dije algo a esa?

_ Me hace pensarlo el hecho de que se quien eres y hasta dónde eres capaz de llegar. Por eso te pregunto qué fue lo que le dijiste, porque desde ya te voy aclarando que Inca no es como las demás.

_ ¡Si, como no! Eso solías decir en aquella ocasión y esas mismas palabras las dice mi hermano a cada rato. Resultado de eso, es que siempre terminan estando con mujeres que solamente buscan su dinero.

_ Está bien, no te quito la razón en eso. Sín embargo, esta vez es completamente diferente porque Inca no es como las demás ya te lo dije.

_ Si no fuera como las demás, no se te hubiera metido por los ojos de tal manera que ya dijiste que era hasta tu novia.

_ Si no te conociera desde que eres una niña, diría que estás perdidamente enamorada de mi y que todas estas escenas que te montas es debido a eso _ Dije en un tono burlón.

_ ¡Hay no por dios! ¡Que asco! Eso sería como cometer incesto, es como si me enamorada del idiota de mi hermano.

_ Si, creo que por esa razón solamente te salvas. Aún así enana, Inca no es como esas mujeres, ella es diferente y si dije que era mi novia es por una buena razón.

_ ¿Por una buena razón? Mejor ahora cuéntame una de vaqueros haber si así te creo.

_ No tengo que contarte nada, pero para que veas que te digo la verdad lo haré. Haber si así dejas de ser una pesada.

....

Solamente, podía ver la cara de Olivia en estos momentos después de haberle contado la situación que me llevó a decir que mi secretaria era mi novia. Esta era de sorpresa y molestia a la vez. Olivia siempre fue muy apegada a mí y a su hermano Izan, lo que hacía que cuando alguien nos lastimaba ella salía a defendernos. Lo mismo hacía con mis hermanos y cuando ocurrió aquel incidente donde mi corazón salió lastimado.

Ella se propuso espantar a todas las mujeres que quisieran mi dinero y no mi amor. Olivia decía que hasta que no llegara la indicada, no dejaría que ninguna mujer de baja reputación se me acercara. Cabe mencionar que ella no lo dijo con esas palabras, con su carácter y su lengua afilada dijo otros adjetivos.

_ ¿Entonces, todo fue por el maldito viejo Ivanov?

_ Así es, ese imbécil la estaba ofendiendo y por eso reaccioné así. Luego vino lo de la noticia y todo lo demás ya lo sabes.

_ Me has dejado asombrada, no se que decir. Si las cosas son así, creo que le debo una disculpa a tu secretaria porque tú solamente la estás protegiendo.

_ ¡Exactamente!

_ Bueno, pero espera. Quien te dice que ella no se aprovechará de esta situación para acercarse a ti con dobles intenciones.

_ Olivia, tu sabes que mi padre tiene ojo para saber cuando las personas son buenas o malas y si mi padre confía en Inca es porque algo vio en ella.

_ El señor Vólkov nunca se equivoca con las personas, en eso tienes razón. Aún así quiero comprobar yo misma que esa mujer es de fiar, va a estar trabajando contigo y no queremos sorpresas.

_ Tu no harás nada loca, únicamente le pedirás disculpas por lo que sea que le hayas dicho antes de que yo interviniera.

_ !Ahaaa! ¿Por qué eres así? Mira, solamente dame un momento con ella. Cuando estábamos hablando por asi decirlo, pude ver que tiene su carácter y quiero medirme con ella.

_ No, no y no Olivia Novikova. Deja ya tus duelos de poder, ya no eres una niña para estar haciendo esas cosas. Inca no es igual a las personas con las que tú has tratado. La vida a ella le ha puesto pruebas difíciles y eso la hecho una mujer fuerte.

_ Bueno está bien, no le diré nada más y le pediré disculpas. Vamos a buscarla.

Afirmo conforme con el final de esta conversación y al salir de la oficina me llevo la sorpresa de que Inca no estaba. Al parecer si se marchó a casa sin hablar conmigo antes.

_ ¿Se marchó? _ Preguntó Olivia.

_ Eso parece ¿Que tanto le dijiste?

_ Bueno, básicamente le dije zorra, casa fortunas, sanguijuela y arribista.

_ ¿Qué? _ Pregunté sorprendido _ ¿Estás loca? Esta vez sí te superaste, de verdad.

_ No exageres Bruno, creo que con ella fui más amable que con las demás.

_ Sí claro más amable, mejor la llamo para ver en dónde está y así poder aclarar las cosas.

_ ¿Por qué mejor no esperamos a mañana? Sí ella se fue es porque no quiere hablar ni contigo, ni con nadie. Mañana te prometo que yo misma hablo con ella y soluciono todo, aparte cuando llegué escuché que tenías dolor de cabeza. Vamos a casa de mis padres para que descanses un rato y cenes con nosotros.

_ No, mejor me voy a mi casa. De igual manera iré el domingo a tu mansión porque tu mamá me invitó. Así que desde ahora te digo que llevaré a Inca, tu hermano no sabe que ella en realidad no es mi novia y nos dijo que fuéramos ambos.

_ Pues bien, no tengo ningún problema. Ahora mejor ya vámonos.

_ Si vamos.