A la edad de 18 años, por orden de sus padres Jade se vio obligada a casarse, con el hermano de la persona que ella gustaba, no fue hasta más tarde que poco a poco comenzó a enamorarse de él hombre con quién se había unido en matrimonio, que este era muy amable y atento hacia ella, sin embargo los tiempos felices no duraron lo suficiente.
Pues su propia hermana gemela había tramado y causó la muerte de su amado esposo y sus dos pequeños mellizos, uno tras otro, finalmente todavía ha quedado perdido sentía un gran fuerte dolor y rabia hacia ella que deseo con todo su corazón... que si llegaba a tener una segunda oportunidad no permitiría tal injusticia y protegería a toda costa a las personas que más amaba.
Milagrosamente ella regresó en el tiempo a la edad de 18 años, entonces se prometiendo así misma, tomar venganza contra todos aquellos que le habían hecho daño.
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Capitulo 13: Encuentra al ladrón!.
"No... pero ahora que recuerdo, la única que vino el día de hoy a mi habitación, fue Janeth... me vino a pedir prestados unos aretes, de hecho fueron los aretes que papá me regaló la semana pasada... ¿Los recuerdas padre?" Mencionó Jade después de pensarlo un poco.
Tan pronto como Rosa y Benjamín escucharon eso, sus rostros oscurecieron.
Pensando en el comportamiento de Janeth, la noche anterior... era posible que hubiese tomado la tarjeta.
Sin embargo, Benjamín y Rosa, pensaron que Janeth no sería demasiado estúpida para tomar la tarjeta.
En el pasado Jade tampoco habría pensado jamás que Janeth sería tan atrevida... para robar la tarjeta de crédito, en ese momento tampoco quiso darle la tarjeta a Janeth y se molestó demasiado con sus padres, Lo que hizo que sus padres La tomaran como alguien demasiado vanidosa, pero al final. Benjamín no la obligó, porque después de todo se casaría pronto, indefenso solo pudo darle otra tarjeta de crédito muy diferente a Janeth.
Nunca había pensado que Janeth robaría su tarjeta incluso después de conseguir una diferente, por lo tanto, después de que su tarjeta bancaria desapareciera nunca sospechó de su hermana mayor Janeth.
Entonces Janeth gastó absolutamente todo el dinero dentro de la tarjeta y poco después la volvió a meter en la habitación de Jade, después de que Benjamín viera los mensajes del pago que le enviaba el banco pensó que Jade había sido la que derrochó tanto dinero comprando estupideces, Así que después de llegar a casa la regañó.
En ese entonces, no tenía idea de lo que estaba pasando... nunca salí de casa, pero tampoco sabía que alguien había robado la tarjeta.
Si Janeth nunca le hubiera contado este incidente más tarde, no habría sabido quién había inculpado en esta vida tampoco.
En retrospectiva en el pasado, Jade era tan estúpida que era fácil burlarse de ella, ¡no solo fue convertida en chivo expiatorio, si no que también fue reprendida, sin tener la mínima idea de lo que pasaba... Sin embargo, esta vez no sería tan tonta y Tampoco dejaría que Janeth la incriminara.
Desde que Janeth decidió robar la tarjeta, le haría probar la ira de su padre, hoy era sábado y cuando Janeth, fue a pedir prestado los aretes de Jade al mediodía, Jade se los dio, Entonces Janeth salió de casa, después de decirle a Rosa y a Benjamín que iría de compras con sus amigos.
Janeth sabía que sus padres saldrían a atender algunos asuntos hoy, Así que eligió deliberadamente este día para aprovechar al máximo la tarjeta de Jade, mientras sus padres estaban fuera.
Sin embargo, Esta vez, Jade no la dejó tener éxito.
¿Podría ser que Janeth lo robó? Preguntó Benjamín enojado.
En el momento en que Rosa, escuchó a Benjamín culpar a Janeth, inmediatamente se apresuró a defenderla. "¡No la culpes! Janet no es alguien que robe..." Rosa no estuvo de acuerdo mientras frunció el ceño mirando con desaprobación a su esposo.
"¡Ella es la única que ha estado en la habitación de Jade! ¿Entonces quién más podría ser?, una tarjeta no puede desaparecer en el aire, no es como si pudiera salir volando por la ventana o caminando por la puerta" Benjamín refutó con el señor fruncido.
Después de todo Janeth les había pedido una tarjeta la noche anterior y esta mañana era demasiado extraño que la tarjeta de Jade desapareciera, era obvio que no era una coincidencia.
Aunque Rosa también sospechaba que había sido Janet quien robó la tarjeta. ¡No quería creer que su hija mayor fuese una ladrona!
"!En cualquier caso, no creo que Janeth hiciera tal cosa! ¿Como padre cómo puedes sospechar de tu propia hija?" Rosa miro a Benjamín de forma insatisfecha.
"¿Entonces dime dónde fue esa tarjeta Jade?; Ella no ha salido en ningún momento ¿Cómo es que se perdió si nadie ha entrado a su habitación? ¿Cómo es que la tarjeta desapareció? La única que estuvo dentro de esta habitación además deja se fue Janeth" Benjamín respondió con severidad en sus palabras.
Benjamín odiaba más a la gente deshonesta, además su hija podría ser una persona deshonesta... si fuera verdad se sentiría totalmente humillado y deshonrado.
"No te enojes, papá... Si Janeth realmente lo quiere, dejaré que lo use... estoy bien, siempre que me lo devuelva después de que termine." Jade intentó convencer a Benjamín.
Al ver como Jade toleraba las estupideces que hacía Janeth, Benjamín se enfureció muchísimo más.
Rosa, también tenía miedo de que Benjamín regañara a Janeth con dureza. Así que rápidamente dijo... "Dado que Jade le parece bien, no te enfades... ¿De acuerdo? Son hermanas después de todo y no le haría daño compartir. Así que deberíamos irnos ya... ¡De lo contrario llegaremos tarde al banquete!"
Benjamín pensó que tal vez Janeth, solo tomó la tarjeta para asustar a Jade... por despecho. Así que aunque se encontraba enfadado tuvo que irse, ya que... El banquete era de suma importancia para extender sus negocios en el extranjero; sin embargo, antes de irse él dijo "¡le daré una lección cuando regrese!".
"Mientras no gasté de más, no me importa... padre" mencionó Jade con una gran sonrisa.
Al escucharla decir eso Benjamín dijo "¡Si se atreve a tocar un solo centavo de esa tarjeta, le haré pagar!" Grito Benjamín.
Minutos después, Benjamín y Rosa se fueron, y en cuanto ellos salieron de la casa Jade se burló en secreto.
"¡Janeth no solo se atrevió a usar la tarjeta, sino que incluso iba a llevarla al límite! Gastando absolutamente todo el dinero, Dentro de la tarjeta!" Jade recordó.
Jade, realmente no podía esperar a ver la reacción de su padre, cuando las notificaciones de pago comenzaran a llegar a su teléfono uno tras otro.
Sin embargo, benjamín aún no se había ido, sino que le había pedido a una de las criadas que vigilara a su hija Jade, y le informara si ella llegaba a salir.
En ese momento Rosa, quien se encontraba dentro del coche habló con su esposo, "¡Es suficiente! ¿está bien? ¡vámonos ya!" Rosa dijo apresuradamente y cuando vio a Benjamín enojarse aún más..
"¡Bien! nos vamos ahora". En ese momento Benjamín entró a casa miró a Jade y le dijo. "Sé bueno en casa, De acuerdo Jade?" mencionó Benjamín antes de salir e ir directamente al auto pues el conductor y Rosa ya lo esperaban.