Sin Compromiso

Salimos del lugar casi tan rápido como llegamos, ese idiota no nos dejó hacer el mercado. No entiendo qué es lo que quiere viniendo a pedir una segunda oportunidad, cuando me echó a la calle porque no quería que le hiciera un escándalo a su correcta esposa, que poco me conocía. Después de lo que me hizo caí en una fuerte depresión, gracias al Cielo las chicas jamás me abandonaron, ellas fueron mi tabla de salvación en aquel entonces. Ahora pretende que lo reciba en mi vida como si nada hubiera pasado, recuerdo que le supliqué de rodillas que no me dejara sin empleo, que me mandara a otra sucursal pero lo único que me dijo fue que no me quería dentro de su círculo de trabajo. Y así me echó sin ninguna contemplación, lo único bueno que hizo por mí fue el hecho de que siempre se cuidó de no embarazarme.

Vamos en silencio, desde que salimos del super no hemos dicho palabra alguna, no entiendo por qué tengo esta necesidad de aclararle a Sasha sobre toda esta situación.

- Sasha! - rompo el silencio.

- ¿Dime Gatita?

- Kevin no significa nada...

- Tranquila, no quiero que te des mala vida por ese cretino, no sé cuál fue tu historia con él, pero es obvio que no supo valorarte.

''Igual que tú'', no sé por qué me duele el hecho de que él me tome solo como un evento sin compromiso.

El silencio vuelve a reinar en el auto, solo quiero llegar a mi casa y dormir para olvidarme de todo.

No espero que baje a abrirme la puerta, salgo y me voy a la puerta del edificio para abrirla.

- Ey, ey nena ¿qué te ocurre? - me pregunta cuando me toma por el brazo.

- Nada, solo quiero entrar a mi casa y descansar, nos vemos el miércoles - ni siquiera lo dejo responder, me subo rápido a mi apartamento.

Me voy a mi habitación, entro a darme una ducha y sin poderlo evitar, las lágrimas que no sabía que tenía acumuladas salieron a mares. Debo confesarme a mi misma que Sasha me importa más de lo que quisiera, debo sacarlo de mi vida pues no pienso volver a ser rechazada y humillada por entregar más de lo que tenía.

Me acosté en mi cama mirando hacia el cielo que estaba nublado amenazando con llover dentro de poco.

Miércoles...

Y aquí estoy, sentada en un restaurante con Sasha sentado frente a mí, hoy su mirada es mucho más insistente el día de hoy. No sé cómo le diré que debemos parar con lo que sea que es esto.

Solo son 10 encuentros, ya solo faltan 8, puedo sobrevivir y quiero un poco más de él, antes de alejarme total y rotundamente.

- ¿Ya decidiste qué vas a ordenar? - me pregunta con sus ojos en el menú.

- Mmmm... no sé, escoge tú, no logro decidirme.

- Te noto pensativa el día de hoy Gatita, ¿estás preocupada por algo o alguien?

Elevo mi mirada y la poso en sus hermosos ojos azules.

- No, solo que necesito conseguir otro empleo, ya estoy aburrida de tener clientas tontas y presumidas - miento.

- Si quieres puedo hablar con Akim o te puedo recomendar con...

- No, agradezco tus ganas de ayudarme, pero prefiero hacerlo yo sola.

La cena pasó tranquila, nos fuimos a su departamento y una vez más nos entregamos a nuestra pasión. Realmente voy a extrañar nuestros encuentros, pero no puedo seguir permitiendo que mis sentimientos por Sasha sigan creciendo.