Una Madre Abandonada

Ante él miedo de perder a mí hija he decidido ser lo que Jorge quiere que sea... estoy sola, no puedo arrastrar a otros a mí eterno sufrimiento, mi dulce Alexa descansa después de tan horroroso susto mientras a mí me ha encerrado Jorge sin comer y beber agua por 3 días... creo que la forma tortuosa en la que cree su mente que debe arreglar las cosas sólo son un fragmento de su oscura alma, pero no me importa lo único que necesito es tiempo para planear huir de mí destino, ese destino que me tiene atrapada en un mundo al que no pertenezco, Isabel no está enterada de lo ocurrido y Jorge prometió no decirlo pues no desea que otros pongan un dedo sobre mí, él quiere ser la única causa de mi infelicidad...

Después de esos terribles días de encierro pude salir, comí y alimenté a mí Alexa quién me extrañó mucho pues la escuchaba llorar cada día, entonces fue cuando se me ocurrió escapar el día de la cena de compromiso de Louis e Isabel, aprovecharé el momento pues estarán ocupados con todos los invitados que se les ocurrió traer, es ilógico que planeen una fiesta de compromiso cuando él ni siquiera sale con ella es más ni siquiera estoy segura de que se presente a la reunión.

_Señorita Elizabeth...su prometido la espera en la habitación.

_Ah sí, muchas gracias... cuida bien de Alexa mientras no estoy

Me alejé y supe que él escenario no estaría a mí favor, Jorge es un enfermo jamás dejará mi vida en paz

_¿Que ocurre Jorge?

_Quiero verte... sólo eso ( tomó mi rostro y alzó mi mirada para que me encontrará con sus ojos tan brillantes llenos de deseo... sentí lo que estaba por venir así que sólo cerré mis ojos y me convencí de que estaría bien)

El soltó mi vestido, y me besó sus besos eran tan fogosos y llenos de anhelo que me dejaban sin respiración, lentamente acariciaba mí cuerpo haciendo que me estremeciera ante los terribles recuerdos de su tacto...

_Elizabeth... sí te vuelves a ver con Louis lo mataré, no dudes de mís deseos tú siempre serás mí mujer

_No me acercaré a él, no lo involucres más conmigo - dije con nerviosismo

El sonrió tocó su barbilla y con brusquedad me lanzó a la cama, embistiendome sin piedad al terminar me abrazó y acarició mi cabello, su enfermiza obsesión me estaba enloqueciendo incluso en ese instante al verlo así tan frágil pensé en las mil formas que podría asesinarlo y así terminar con mí martirio... pero no lo hice porque no quería ser una asesina tengo una hija que cuidar; cuando se durmió fuí a la sala y vi a mí Alexa sonriendo con la niñera sentía que me estaba reemplazando así que sin pensarlo dos veces me acerqué furiosa a la mujer.

_¿Que pretendes hacer? Alexa es mí responsabilidad.

_Disculpe señora, no sabía que ya venía....es mí trabajo cuidar a su hija.

_No me importa en lo absoluto ¡Vete! no me siento bien

Ella estaba confundida, al igual que yo quién parecía estar siendo consumida por la locura de la mansión, me senté con Alexa y me quedé jugando con ella normalmente eso me calmaba pero no, de repente él pánico de que mi hija no me necesitara y me abandonara invadió mi mente y comencé a llorar sin parar por lo que se acercó y me abrazó.

_Te amo mamá

Al escuchar esas palabras me dije a mí misma que no importaba nada, estaré bien siempre y cuando ella me ame.

Se pasaron los días muy rápido el día de la Cena está muy cerca y mí Alexa ha estado más sonriente que nunca parece llevarse bien con Isabel a pesar de que alguna vez la trató tan mal, supuse que hasta un monstruo cómo ella tiene algo en su corazón... todos están encantados por la gran fiesta han comprado todo tipo de flores y las mejores carnes para la familia, yo también espero él gran día con ansias me marcharé lejos con Alexa donde nadie nos haga daño... lejos de Jorge un maníaco que me amenaza con la vida de su propia hija o lejos de la familia más hipócrita jamás conocida.

_Elizabeth quiero que en la cena toques él piano, quiero que le demuestres a todos que eres digna de ser mí hija, hazme sentir orgulloso

sonreí al escuchar esas palabras tan cómicas y tontas..

_Claro los sorprenderé a todos ese día

Jueves 23 de agosto la gran fiesta está realizada, los amigos de mí padre y los amigos del padre de Louis asistieron a la gran mansión

_Isabel te ves muy bien, me alegra que te cases con él ( dije con ironía)

_Siempre me veo bien, tú deberías esforzarte un poco más para llegar a ser la mitad de mujer que yo.

_No tengo por qué... mi belleza va más allá del vestido de seda que me pongo en ocasiones especiales, no necesito ser ostentosa de por sí ya llamo la atención¿no crees?

_Eres tan engreída... por eso jamás habrías podido encontrar un hombre que te amara de verdad, me alegra que Jorge sea con quién estás, es el único lo suficientemente loco como para obsesionarse contigo

Ante la tensión de las hermanas su madre decidió intervenir..

_Mis dos hijas con tan hermosas, cualquier madre estaría orgullosa de tenerlas.

Me acerqué a su oreja y le susurré

_Lo dice la madre que deseó no tenerme ( reí con ironía)

Mientras mi mamá también fingía, de inmediato se puso nerviosa y se llenó de tristeza.

_No creen que una madre cómo ella vale oro? es tan dedicada y nos ama por igual, que mujer tan perfecta - ( sonreí a todos los presentes y me alejé de las dos)

_¡Elizabeth !

_¿Louis?

_Vine aquí por ti (dijo mientras sostenía mi mano)

Quedé estupefacta no entendía el comportamiento de Louis... pero Jorge no se vio muy feliz y de inmediato lo atacó.

Acaso mi destino era sufrir? ¿por qué nunca me salen las cosas cómo deseo?

tuvieron que separarlos y de inmediato el bochornoso evento fue causado por mí, la mirada de todos me juzgaba cómo si yo hubiese seducido a ambos hombres y jugado con ellos... ante tal situación sólo pude reír

_Ay señores ya basta de ese show! ¿creen que una mujer cómo yo pondría a pelear a dos caballeros? Louis me quería a mí para ayudarlo con la pedida de mano de mi hermana, necesitaba saber cuales eran sus gustos ¿No es así Louis?

_Sí, lo siento si se malinterpretó todo - dijo con nerviosismo - Sin embargo Jorge no me cae muy bien, quizás competimos por la atención de nuestros suegros

Jorge lo soltó y se acomodó la ropa, me tomó de la cintura y se disculpó con todos, sonreí y tomé a Alexa parece que al menos está vez tuve suerte... no puedo dejar pasar está noche, hoy huiré.