DEMONIOS VANNECELLI

** Matteo Vannecelli**

-Con un tono amenazante, me acerco a él y golpeo su abdomen con un puño, diciéndole- Cuida muy bien tus palabras, imbécil. Aunque ya no estemos en la misma escuela, siempre estaremos un paso por delante de ti.

-Él tose y responde-Nunca lo serán. Ustedes son solo unos revoltosos, caóticos, manchando su apellido. Es un alivio saber que aún hay miembros de esa familia que respetan su nombre, como tus hermanos y tu prima.

-Miro hacia ellos y sonríen. Liam se acerca a su hermana Alicia, tomándola del brazo y le dice- ¿Qué haces con estos cerebrados? ¿Acaso ahora eres amiga de ellos?

-Ella responde- Suéltame, solo los acompañé porque quería conocer la nueva escuela donde estudias; también tenía curiosidad. Además, ellos se han estado burlando de ustedes y, en ocasiones, de mí, hermanito. Por eso los traje, para que les den una lección por su comportamiento.

-Liam interrumpe-¿Cómo es que se atreven a burlarse de ti? ¿Por qué no me lo dijiste antes?

- Él aprieta su mano e intenta golpearlo. Elio lo agarra y le dice-No podemos pelear frente a todos en el colegio. Nos meteríamos en problemas. Déjamelo a mí, yo me desquitaré con él por donde más le duele.

-Liam responde- ¿Crees que me importa en este momento?

-Mis hermanos se acercan a mi lado y, visiblemente molesto, les digo-Ustedes no tienen nada que hacer aquí, y mucho menos estar al lado de estos perdedores.

-Me doy cuenta de que Liam aprieta su puño y le da un golpe a Jim en la mejilla, quien cae al suelo. -No vuelvas a burlarte de mi hermana, Jim, o te encontrarás con consecuencias que no te agradarán.

-Elio sonrió, al igual que Gino. Jim se levantó del suelo, se sacudió el polvo y, con irritación, comentó- Los únicos perdedores aquí son ustedes, que están en esta escuela de muertos de hambre.

-En ese momento, escuchamos una tos detrás de nosotros. Al voltear, vimos a Maximiliano, acompañado de su grupo, quien exclamó-Parece que los ricachones están invadiendo nuestro territorio, faltando al respeto a todos nosotros.

-Coloco a mis hermanos detrás de mí, mientras Liam sostiene a Alicia y los gemelos, junto a Kai, hacen lo mismo con Kira y Flor. En ese momento, observamos que Maximiliano comienza a golpear a Jim, lo que provoca un altercado que se transforma rápidamente en una lluvia de piedras. La situación se convierte en un caos. Sin dudarlo, corremos hacia los autos, tratando de proteger a los más pequeños. Con esfuerzo, logramos salir de allí, pero una de las piedras impacta en el vehículo. Abrazo con fuerza a mis hermanos para evitar que el vidrio les caiga encima, aunque uno de esos fragmentos me corta la espalda. Pasados unos minutos, el vehículo se detiene y uno de los escoltas me revisa. Mi hermano Dylan, visiblemente nervioso, me pregunta-Matteo, ¿estás bien? Por Dios, estás sangrando. -Luego, dirige la mirada hacia el conductor y añade- No te detengas y maneja rápido hacia una clínica, mi hermano está sangrando. Tú, Noan, llama a nuestros padres.

-Le respondo-Noan, no llames a nadie. Estoy bien, solo fue un pequeño corte; no es grave. Solo llévame a casa.

-Ellos me miran con nerviosismo y preocupación, pero asienten. Pasados unos minutos, llego a casa y, para mi mala fortuna, se encuentra allí mi madre, quien, al verme, se asusta y corre hacia mí. Al notar mi camisa manchada de sangre, me pregunta-¿Qué te ha pasado? Tu marco está encargado de la seguridad de mi hijo, ¿qué ocurrió?.

-Él responde-señora Sandra:Lamentablemente, fuera de la escuela se inició un altercado con otros jóvenes de la escuela de los gemelos, lo que resultó en que una de las piedras lanzadas impactara el vidrio trasero de su automóvil. Lamento profundamente lo sucedido.

-le digo-Le aseguro que estoy bien, solo tengo un pequeño rasguño.

-Sin embargo, ella me interrumpe diciendo-Por supuesto que no, debemos atender eso.

-Me acompaña a la sala donde toma el botiquín, me quita la camiseta y comienza a limpiar la herida. El dolor se intensifica al sentir el contacto con el alcohol. A veces envidio a Kira y Kai, quienes no pueden sentir dolor. Al intentar explicar a mi madre lo que había sucedido, ella se molestó y me aseguró que tomaría medidas respecto a los irresponsables involucrados. Para proteger a mis hermanos de su reprimenda, decidí cubrirlos. Mi madre se retiró a llamar a mi padre, y yo hice una señal a los gemelos.

Al acercarse, les golpeé suavemente en la frente con mis dedos, mientras ellos se sobaban la zona, les dije - Espero que esta sea la primera y última vez que asisten a la escuela, ya que podría resultar peligroso. Es importante que transmitan lo que he mencionado, ¿queda claro? -Ellos asienten con la cabeza-. No quiero que se acerquen a esos Bastardo. Si tienen problemas con ellos, comuníquense conmigo; yo me encargaré de la situación.

-Noan se aproxima y dice-Lo haremos, hermano. Sin embargo, sabemos cómo defendernos; nuestros padres nos han enseñado a pelear. Agradecemos tu protección, y lamentamos que hayas resultado herido en la espalda por nuestra causa.

- Suspiro y digo-No tienes que agradecer, soy su hermano mayor y por nuestra pequeña princesa Luna y ustedes daría mi vida. Además, como el mayor, es mi responsabilidad. Ahora, vayan a cambiarse.

-Ellos asienten y se retiran; yo hago lo mismo. Tomo mi teléfono y comienzo a escribir en el grupo, donde informo que están bien. Allí nos ponemos de acuerdo para ir a la casa de Luker, ya que Sobresa, los mellizos y Gino también querían ir. -