Al principio, tu presencia en mi vida era solo un pasatiempo, un mero entretenimiento que llenaba mis horas vacías. No te veía más que como un juguete, sin profundidad ni importancia; eras solo una distracción temporal. Sin embargo, a pesar de los esfuerzos por liberarte de mis garras, siempre te sentías atrapado, como un pájaro que añora el cielo abierto y el vuelo libre. Esa lucha constante por tu libertad reflejaba un anhelo profundo en tu ser. A medida que pasaba el tiempo, comencé a darme cuenta de que tu valor iba más allá de mi entretenimiento, y que había una complejidad en ti que merecía ser explorada y entendida.
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Dia de Soledad
Me dio un poco de celos ver como las otras chicas lo miraban, como si quisieran saltar sobre él y a él parecía gustarle, se los presenté a todos y me tomó de la mano, cosa que no pasó desapercibida por ninguno de los presentes, por lo que poco a poco se fueron despidiendo de mi.
-¿Comiste? – me preguntó en el oído haciendo que todos los vellos de mi cuerpo se levantaran
En momentos como esos me preguntaba cómo alguien podía tener esa voz tan sensual.
-¿Cómo sabias que estaba aquí? – esa era una pregunta que me había cruzado en la mente cuando lo vi
-Estaba pasando cuando te vi salir de ese local y se me ocurrió llevarte a casa, aunque si quieres ir a otro lado solo dilo – había mucho en esas palabras
-Creo que lo mejor es que vayamos a casa – el aceptó y me llevó hasta el auto abriéndome la puerta de atrás del auto, ya que estaba con el chofer
Un silencio se instaló en el auto y no me hacía sentir cómoda, por lo que decidí lanzarle algunas preguntas, su actitud me estaba desconcertando.
-¿Por qué a veces me tratas como si fuera lo peor del mundo y otras veces eres tan caballeroso? – me miró fijamente por unos segundos antes de contestar y sentía que no debía haberle preguntado eso
-No sé de que hablas, yo soy como soy y ya – respondió después de lo que pareció una eternidad
-Si pero… - no me dejó terminar de hablar
-No creas que seremos los mejores amigos solo por que te estoy llevando a casa, no me gustan las niñas como tú, me gustan las mujeres de mi edad que no andan haciendo preguntas y pueden aceptar ciertas cosas – parecía que estaba midiendo cada palabra
-¿Cosas como cuáles? – su mirada se tornó un poco oscura y poco a poco se acercó a mi
-Cosas que no le haría a una linda ovejita como tú, se que estas esperando a un hombre que te llene de cursilerías, que te lleve a caminar al parque y a quien puedas presentar ante todos, pero yo no soy ese hombre – tragué grueso al escucharlo hablar
Di gracias de que llegamos a casa y pude salir corriendo de allí, el tenerlo tan cerca me hace sentir demasiado nerviosa y lo peor es que me he vuelto masoquista porque me gusta él, me gusta su forma de ser y tengo miedo de entrar a ese callejón sin salida que se llama Víctor
….
Al día siguiente me encontré a Nika haciendo maletas, lo que me extrañó mucho, no me había contado nada de algún viaje que planeara hacer.
-Nika, ¿A dónde vas?, no me digas que te peleaste con tu hermano – mi voz sonaba un poco preocupada
-Jajajajaja, nada de eso, se me olvidó decirte que voy a un retiro de la empresa, será todo el fin de semana y creo que vas a pasar el fin de semana sola – se notaba que estaba alegre
-¿En serio?, ¿me dejaras solita todo el fin de semana? – puse cara de cachorrito triste, pero en realidad estaba feliz porque podría descansar
-Si hubieras dejado que mi hermano te diera empleo en su empresa pasaríamos el fin de semana juntas y te presentaría a unos chicos hermosos que trabajan allí, podríamos portarnos mal un rato – y ahí estaba la Nika fiestera y despreocupada que me alegraba la vida
-Nunca cambies – le dije y le di un abrazo para después dejarla terminar lo que estaba haciendo
Fui a mi habitación y me cambié de ropa, saldría a mi casa, había pedido cita con un par de personas, una para que me hiciera un presupuesto para las reparaciones que debían hacerse y otra para que evaluara la casa para su venta.
Adoro la casa donde viví con mis padres, pero esta bastante deteriorada y no se si tenga el suficiente dinero para remodelarla, y por otra parte pienso en si seria buena idea comprar un lugar que pueda llamar hogar e iniciar una nueva vida.
El día lo pasé en mi casa y de verdad es una decisión difícil, aunque tengo que aceptar que lo difícil de la decisión es por un tema emocional más que económico, tendría mas beneficios si la vendo y compro otra que remodelándola, aparte de que me queda alejada del trabajo.
Con el corazón encogido volví a la casa de Nika y recordé que estaría sola todo el fin de semana, en parte agradecí que fuera así ya que podría votar todo este dolor que me está consumiendo, es difícil actual como adulto en algunos casos.
De igual manera, me hubiera hecho mucho bien tener un abrazo de Nika en este momento, así como unas palabras positivas de las que siempre sabe decirme y que me levantan el ánimo al mil por ciento.
Después de mucho llorar me metí en la ducha y descargué un poco de mi tristeza, me vestí con algo cómodo y mi estomago me recordó que no había comido desde la mañana, de verdad que me comería un elefante, así que bajé a la cocina y recordé que le habían dado el fin de semana libre a los empleados.
Definitivamente me estoy mal acostumbrando a las bondades de las personas que tienen dinero, comencé a revisar la cocina y opté por prepárame un sándwich, pero de esos que aparecen en los comerciales, con muchísimos ingredientes y un poco de jugo.
Me fui a la sala donde está la televisión tamaño cine y puse una película romántica, de verdad que soy masoquista, después de todo lo que estoy pasando y viendo películas románticas, como si esas cosas de verdad pasaran.
Comí y después de un par de películas creo me dormí.