¿Quién podría enamorarse de un misterioso hombre que solamente lo ve por las noches?
Rocío Martínez, una joven que se sacrifica día a día por su humilde familia. Con un primer amor que solamente le dejó inseguridades.
Sam Warren, un hombre que creció con todo el dinero del mundo, mujeriego y solitario. Que jamás a recibido afecto y amor de su familia.
Cómo estas dos personas tan diferentes pueden llegar a amarse incondicionalmente y enfrentarse a todos con tal de proteger su amor y a su familia.
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sentí que la traicioné.
(Sam Warren)...
Al otro día fui nuevamente a ese lugar, porque de alguna forma inexplicable quería volver a ver a esa hermosa mujer con su alma noble.
Aunque me desconocía porque jamás había tenido que buscar a una mujer, en donde esta vez la esperé en otro lugar, hasta que la vi caminar por mi lado, ignorando mi presencia.
Yo muy confundido y sin saber qué decir, le pregunté si tenía algo de comida, puesto que era la única forma en que ella se acercaría a mí. Nuevamente, ella, con su bella sonrisa, me regaló su comida, pero esta vez le agradecí el gesto con mi voz temblorosa cuando le hablé como un tonto y muy nervioso me fui por esa oscura calle.
Creo que al otro día fue cuando vi a Rocío en mi empresa. Obviamente, no la reconocí de inmediato, pero sí su forma sencilla de vestir llamó mi atención y al ver su rostro me di cuenta de que era la misma chica que me está quitando el sueño y que me obsequia comida cuando me hago pasar por un vagabundo.
En ese momento no pude evitar llenarme de ira al ver cómo era sacada como una basura por parte de los encargados de seguridad. Ahí fue cuando intervine y le ordené a la inepta de la recepcionista que fuera tras de ella y le diera un trabajo en la empresa.
Después de ese largo día de reuniones, tomé mi carro y volví a ir a ese lugar, solo para volver a verla y platicar con ella. Donde por primera vez en mi vida me sentí diferente, puesto que solo me sentí un simple hombre platicando muy a gusto con una hermosa mujer, ya que jamás había conocido a alguien tan buena y transparente como lo es Rocío.
Con el transcurso de los días me enteré de sus problemas con su familia y de la enfermedad de su madre, en donde quise ayudar de inmediato, pero de una forma discreta para que ella no se diera cuenta de quién realmente soy.
Ese mismo día se les informó a todos los empleados sobre el seguro médico. Cristina, la gerente de operaciones de la empresa que asistió a la reunión, subió hasta mi oficina en donde yo me encontraba algo estresado trabajando.
Al verme, Cristina me pide que la lleve a mi habitación prohibida donde suelo llevar a las mujeres para practicar "Sadomasoquismo". Sí, en esa habitación cumplo todas mis fantasías sexuales con distintas mujeres, obteniendo placer al ver el sufrimiento y el dolor que les causo a cada una de ellas.
Obviamente, siempre y sin excepción, es consensuado por parte de ellas, ya que jamás obligaría a hacer algo que una mujer no desee.
(Volviendo a ese día)...
Como Cristina casi me suplicó de rodillas que la volviera a llevar a la habitación, yo accedí, puesto que jamás me negaría a tan excitante oferta.
Pero lo que yo jamás pensé fue ver a Rocío saliendo de mi suite privada, mientras yo salía de la habitación junto a Cristina, y por el rostro de Rocío debió escuchar cada grito de placer que le di a esa mujer.
(Me sentí como si la hubiera traicionado)
Aunque sé que no es así, ya que aún no somos nada y aunque ella no sabe quién soy por el momento. Y, por otra parte, aunque sé que se enterará de que soy ese vagabundo con el que pasa cada noche platicando, ella no podría reprocharme nada.
Pero de igual forma me siento mal, porque cuando estaba en esa habitación con Cristina, al cerrar los ojos imaginaba el rostro de Rocío en mi cama y por eso decidí enviar a sacar todos los muebles y accesorios de esa habitación para no volver a cometer ese mismo error otra vez.
Esa noche, como de costumbre, esperé a Rocío algo más nervioso que de costumbre, pero esta vez con algo de comida para ella, puesto que me imaginé que llegaría tarde porque iría al hospital a ver a su amigo Carlos y su esposa.
Debo reconocer que sentí miedo de perderla, aunque nunca ha sido mía, pero cuando estoy con Rocío me vuelvo vulnerable y me siento otra persona que solo desea abrir su corazón por primera vez, solo por ella.
Y al estar tan cerca y sin rodeos, me armo de valor para abrazarla y luego besarla... Ese beso que le di a Rocío me hizo tocar el cielo al sentir por primera vez sus dulces e inexpertos labios que solo se dejan llevar por cada roce suave que yo le doy con los míos.
Sé que fui un cobarde porque le vendé los ojos para besarla y no dejar que ella viera mi rostro, pero no creo que aún sea tiempo de hacerlo...
Ya que de alguna forma, este juego que tengo con Rocío, no quiero que se termine, por el hecho de que siento que cada día yo la necesito más.
Debido a que si Rocío se llegara a enterar de que mi verdadero nombre es el de su jefe, pienso que la perdería para siempre. Y sobre todo, porque hoy me lo demostró en esa habitación vacía cuando quise acercarme, pero de inmediato ella me rechazó, dejándome muy en claro que ella solo es una simple empleada de servicios de mi empresa y yo solo su jefe.
me encantó la historia y la forma en que está escrita...❤️