Karen Wilson, era una esposa amable, cariñosa y muy atenta con todos, ella pensaba que tenía todo hasta que su prima Samanta la engaño para poder así lograr separarla de su flamante esposo.
Sebastian Meló un hombre rico y poderoso es engañado también por Samanta y con eso ella logró llegar a ser la amante del esposo de su prima a la que envidia y odia.
Karen por decepción y para poder darle una buena vida a su hijo, decide volver a trabajar para mantener a su hijo, aún cuando eso le lleve a meter a su ex esposo y a su amante a la cárcel, Karen Wilson hará lo que sea necesario para no volver a ser pisoteada por su esposo, aún cuando ella lo ame no le pasara una infidelidad más. Ahora ella cuenta con el apoyo de Andrew Lezama, el mejor abogado, hijo de una de las mejores familias, además es guapo él la ama y no dejará que nada malo le pase.
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Capítulo 12
Sofia arranco el auto y se dirigió hasta una clínica de belleza y ahí se quedaron recibiendo todo tipo de tratamiento, limpieza facial, masaje tratamiento para rejuvenecer, depilación láser, corte, y tinte para el cabello, manicura y pedicura se ocuparon todo el día por su belleza desde la cabeza a los pies.
Cuando terminaron, Karen y Sofia no podían creer lo que lograban unos cuantos miles de billetes por que las mujeres se vieran y sintieran mejor, el cambio en Karen era super espectacular, parecía como si fuese otra mujer, las gafas negras y grandes que usaba no la dejaba lucir sus hermosos ojos grises, el cabello castaño era opaco sin vida, con esas nuevas mechas casi blancas le daba vida en su rostro, el que antes era reseco y lleno de pecas ahora parecía como si sus pecas se las hubiesen acomodado en forma que le hicieran resaltar más aún su piel blanca, sus manos lucían muy elegantes con esos tonos de barniz.
¡Te ves mucho más joven amiga!
¡Como si te hubieran quitado diez años de encima!
Ja ja ja
Dijo sofia al ver a Karen, al escucharla también comenzó a reír con su amiga.
Ja ja ja
Entre risas y piropos que se dedicaban una a la otra, se subieron en el auto, rumbo a casa de Karen, esta le preguntó a Sofia.
¡Como ya te he contado, Sofi me pienso hacer cargo de mi empresa y para eso quiero preguntarte ¿si puedo contar con tu ayuda en el área de publicidad?
Sofia de inmediato le respondió.
¡Por supuesto que puedes contar conmigo!
¡Mi agencia de publicidad está en su mejor momento por eso me puedo dar el lujo de dejarla en manos de uno de mis socios para poder ayudar y estar a lado de mi mejor amiga y ser testigo de su buen desempeño como mujer empresaria!
¡Por qué estoy muy segura que lograrás hacer de esa pequeña empresa una de las mejores en su rama!
Karen le tomó la mano a su amiga y con una sonrisa le dijo.
¡Gracias Sofi, yo sabía que podía contar con tu apoyo!
¡Muy bien, pues te veo mañana temprano en la empresa para poder saber el estado real y así comenzar a trabajar!
Karen no dijo más, se despidió de su amiga y bajo del auto, comenzó a caminar hacia la puerta de su casa abrió, y ahí estaba su pequeño, con una sonrisa, y sus ojos brillantes, corrió al ver a Karen y la abrazo con amor y le dijo.
¡Mami!
¡Mami, que bella te ves!
¡Mi papi, se perdió verte tan hermosa!
Para Karen el que su pequeño le recordará al hombre que la hacía sufrir al que ella deseaba olvidar, le hizo que le doliera el corazón, antes que el pequeño Johan continuará hablando de su padre fue interrumpido por la señora Lola, que de inmediato al verla le preguntó.
¿Ya comió algo señora?
Karen con una sonrisa le respondió a la ama de llaves.
¡Comí algo antes de venir gracias Lola!
Antes que la mujer saliera de la sala le dijo a Karen.
¡Lo siento señora se me olvidaba decirle, que el señor Sebastian llamó esta tarde para informar que tenía que salir fueras y que por esa razón no vendría a casa en algunos días!
¡Lo siento señora!
Karen se sintió aliviada al escuchar esas palabras, cuando en un tiempo atrás, esas mismas palabras le hubieran roto el corazón, en ese momento se dio cuenta que ella estaba lista para dejar atrás a Sebastian y comenzar una vida nueva junto a su hijo, después Karen dijo.
¡Muchas gracias Lola por tomar el recado del señor!
¡Ya puedes retirarte para continuar con tus tareas!
La mujer salió de la sala, con una cara de incredulidad al no ver a Karen romper en llanto al enterarse que su esposo no llegaría en varios días.