PRINCESA EMBAJADORA

____ Mi intención no es detenerlo, solo le aconsejo que deje sus pertenecías y no retrasará su viaje ____ respondió el que parecía ser el líder.

El príncipe Liam reconoció de inmediato que eran los mismos bandidos que los atacaron el día de la boda.

___¿Fueron ustedes quienes nos atacaron el día de mi boda?, ¿pero como diablos es que están en esta nación?___ pregunto Liam, con espada en mano, mientras que su guardia se colocaba en posición de defensa.

____ Yo estoy donde quiera estar, no le pido permiso a ningún gobierno o estamento, no tengo rey, ni reglas, ni me detiene nadie. Por ahora me quedaré en esta nación y también con tus pertenecías____ respondió el enmascarado.

Diciendo eso muchos integrantes de la secta salieron de entre la maleza como si nunca hubieran estado allí, eran expertos en camuflaje y artes marciales, aunque no eran figuras de gran tamaño su destreza era increíble, en cuestiones de segundos la pequeña caravana del príncipe se encontraba totalmente sometida.

___ ¿Quién eres?, ¿por qué quisiste matarme?___ pregunto Liam, mientras que blandía su espada contra él enmascarado, pero no era rival, se notaba que solo se divertía con él.

___ Soy una sombra, y lo de matarte eso fue otro negocio, por ahora me interesas vivo, tus provisiones me son muy útiles ____ respondió "la sombra" burlándose de él.

Desaparecieron tal y como llegaron, los guardias del príncipe solo se miraron unos a otros sin entender lo que había sucedido, mientras que Liam asotaba su espada contra él carruaje desocupado.

____ Como es posible que suceda esto, averigua quienes son, y rastrea lo que se llevaron, las pondrán en venta, los atrapáremos dice Liam a su guardia personal; Hwar, quien de inmediato asiente con una expresión de rabia y impotencia, pues sentía su orgullo arruinado.

____ ¿Tienes idea de quiénes podrían ser?___ preguntó Hwar.

___ No lo sé, pero a mi padre no le gustará esto___ dice Liam, sonriente, pues saber que algo molestaría a su perfecto padre no le desagradaba.

El rey estaba furioso, pues ya había llegado la noticia a sus oídos, envió a sus comandantes a buscar por todo el imperio a la banda de ladrones.

___ Su majestad... por segunda vez envié espías a investigar sobre el asunto de los espías anteriores y tampoco lograron volver, es como si la tierra se los tragara____ informa Norman, ante el rey, pero a solas.

____ Que diablos es lo que sucede, trae a esa mujer, necesito sacarle lo que sabe ___ dice el rey.

El fiel hombre salió rumbo a buscar a Haylen, quien como siempre se mostraba sumisa y obediente.

____ Su majestad, que desea de mí?___ pregunta Haylen, mientras hace una pequeña reverencia.

____ ¿Dime que es lo que sabes realmente de la secta de la que me hablaste, y como lo averiguaste?____ preguntó impaciente Dominit.

___ Ya le dije todo lo que sé, es cuestión de que averigüe usted por su cuenta ___ respondió Haylen, aunque ella ya conocía perfectamente lo que realmente sucedía con los enviados del rey.

___ No estás en condiciones de negarme nada, aquí eres mi rehén, cuéntamelo todo, y hazlo ahora mismo ___ gritaba Dominit.

___ La información que tengo es muy poca, ya se lo conté todo, no tengo más que decirle a menos que...

____ Habla!!, no tengo paciencia para soportar tus niñeces ____ dice Dominit furioso.

____ Sus espías están desaparecidos, ¿verdad?___ pregunta Haylen.

____ ¿Cómo sabes eso, tienes algo que ver?___ pregunta Norman.

___ Se los dije desde el principio, tenemos que detener esto ahora, si lo dejamos avanzar tal vez sea imposible detener ___ respondió Haylen, aunque esa no era la respuesta que esperaban.

____ ¿Que es exactamente lo que propones?___ pregunta Dominit.

____ Una alianza ___ respondió Haylen sin vacilaciones.

____ ¿¡Una alianza!?___

____ Si, una alianza con otras naciones, una que nos permita hacerle frente a lo que se viene, te vuelvo a ofrecer mi servicio como envajadora, estoy dispuesta a buscar ayuda y aliados para usted, no tienes nada que perder___ dice Haylen, esta era la última oportunidad de poder convencer al terco y vanidoso rey.

___ Eso es una locura, pensarán que estoy loco___ respondió el rey.

___ Déjeme esa responsabilidad y esa tarea, daré mi vida a cambio de lograr mi cometido, si lo logramos, usted pasará a la historia y se convertirá en un héroe ___

___ ¿Qué ganas con todo esto?___ pregunta Dominit.

___ Nada, lo único que quiero es que los pueblos y la gente humilde e inocente no sufra, si ese mal llega a tocar nuestras tierras, no dejará más que desdicha, tristeza, huérfanos, desolación...

___ Serás la única responsable de lo que suceda, aparte, no tendrás ningún respaldo económico que financie este recorrido, tú mirarás como lo llevas a cabo ___ dice el rey de mala gana.

____ ¿Eso quiere decir que aceptas?___ pregunta Haylen.

___ Si, pero bajó tu responsabilidad, lo anunciaré ante el concejo, debes convencerlos a ellos, aún no tienes nada ganado ___ respondió el rey, mientras le daba la espalda. Haylen sabía que no sería fácil, pues era odiada por todos los ancianos y concejeros, necesitaba encontrar la manera de convencerlos.

Una azaña no es reconocida si no se sufre por conseguilar, un héroe no surge sino tiene injusticia que rectificar, una princesa envajadora no lograría cambiar el curso del destino y las tradiciones de su mundo sin esfuerzo que demostrara que había nacido para ello.