La Forma Del Amor

Mateo

Anoche llegué tarde mi bebé ya no estaba despierta y pensé que ya todo el mundo esta dormida, sin embargo el nuevo niñero estaba esperándome en la sala.

Estaba bastante cansado y antes de venirme para acá junto con Sandro y Abigaíl decidimos tomar una copa no fueron gran cosa, sin embargo, sí me dejó algo mareado.

Yo creo que fue por eso que al entrar y en la penumbra de la noche a la persona que vi sentado en el sillón ese donde siempre se sentaba Valeria para esperarme por las noches en ese mismo lugar me pareció verla a ella como antaño y por un momento pensé que realmente era ella y que no estaba muerta que estaba aquí como siempre esperándome.

Pero cuando de repente oí la voz, una voz grave, la imagen que estaba viendo se desvaneció rápidamente como si una ráfaga de viento se lo hubiera llevado.

Lo único que quedó es la imagen de un joven que estaba llamándome la atención diciéndome que no eran horas de llegar y que si esa era la forma de que intentaba acercarme a mi hija.

Aunque en teoría debería de haberme sentido ofendido ya que él es un empleado. Y un empleado no puede estarle reclamando a su jefe lo que realmente sentí fue vergüenza y arrepentimiento, porque era cierto mi hija acababa de salir del hospital y yo salí a tomar una copa con mis amigos cuando donde debería de estar es junto a mi hija tratando de acercarme a ella nuevamente.

Sentí que la persona que me estaba hablando era Valeria y que estaba profundamente decepcionada de mí y de hecho cuando yo hacía algo mal o cuando le dejaba esperando por mucho tiempo esa es la forma en que me llamaba la atención y luego me dejaba solo en medio de la noche justo como ahorita lo había hecho ese muchacho.

Mis ojos se llenaron de lágrimas, daría mi propia vida con tal de regresar el tiempo y poder evitar que ella se fuera de nuestras vidas.

Le dije que sentía mucho llegar tarde, Valentín contestó que no era ella quien debería pedirle perdón sino a mi hija, que si seguía haciendo lo mismo más adelante mi hija nisiquiera sabría quién soy.

Después de haber sido regañado, él se dio media vuelta y se fue a su habitación. yo me quedé en la sala y en la penumbra pense en como tan rápido mi vida cambió hace apenas dos meses era el hombre más feliz del mundo.

Lo tenía todo y no me di cuenta; pero lo tenía todo, tenía a la mujer que amaba, mi pequeña hija y una vida tranquila, incluso teníamos una buena estabilidad económica.

Cada vez que llegaba del trabajo me quedaba junto a mi bebé pensaba que sería genial tener otro más y tener más y más, quería tener una gran familia.

Pero ahora de repente no tengo nada es como estar en un sueño o una pesadilla del que quiero despertar.

Quiero abrir mis ojos y aunque posiblemente ella no estuviera en la habitación conmigo al oler el aire su aroma aún que muy leve aún se puede captar. Pero cada día que pasa todo se va desvaneciendo.

Estoy tan frustrado por llegar tarde y por no alcanzar a mi hija despierta.

Que incluso las ganas de comer algo se me habían quitado aún así pensé que era mejor ir a la cocina y recoger la comida que la empleada me dejaba para mi cena nocturna.

Grande fue mi sorpresa ver un plato servido cuando me acerqué y un aroma muy conocido es lo que capte.

Por un momento me emocioné pensando que lo había preparado mi esposa sin embargo, después me di cuenta de ir lo que estaba pensando no podría ser posible.

Aunque la comida tenía un sabor muy similar no era el que yo he estado buscando todo este tiempo.

Aún así me termine la comida, porque eso es lo que mi querida esposa me pediría si estuviera viva.

A día siguiente era fin de semana y no necesitaba ir a la empresa.

Entonces me dirigí a la habitación de Valentín pedí disculpas y le dije que mañana era fin de semana y la pasaría con mi hija todo el tiempo, si él quería salir o a comprar algunas cosas podría hacerlo tranquilamente.

Valeria / Valentín: Cuando oí que cuidara a mi hija, me alegro y esperaba de todo corazón que sí lo hiciera porque en serio necesitaba comprar algunas cosas personalmente.

Y con la promesa de Mateo de cuidar a la niña al día siguiente Valentín se despertó temprano, quería terminar temprano sus diligencias.

Por eso cuando bajo para el desayuno el cual por ser sábado era un poco más tarde que de costumbre, aún así se llevó, no la sorpresa sino el susto de su vida, ya que cuando se acercaba al comedor oyó un grito de su pequeño bebé.

Ella se había encargado de bañarla y cambiarla dejala lista y presentable luego la entregó a una de las sirvientas que la cuidara un ratito aunque estaba indecisa sin dejarla con Mateo llevarla con el.

No estaba muy segura de hacerlo, ya que la niña aún no quería estar cerca de su padre, el rechazo que sentía por él rra realmente desgarrador.

Estaba pensando en llevarla de compras de todas maneras no iba a ir sola, el chofer me iba a ayudar y tal vez y pedí ayuda alguna de las viviendas también podría acompañarla.

Ahora bien el problema sería si estaban preparados para que un niño viajara en el coche, eso iba pensando mientras se acercaba el comedor pero todo esto se le olvidó cuando vio a su pequeña siendo abrazada por Abigaíl.

Y pensó realmente este hombre es tan tonto que no se da cuenta que la niña no quiere estar cerca de esas arpías.

Así es arpía en plural porque no solo estaba Abigail ahí también estaba Sandro ambos sonrientes, pero tan escalofriantes al mismo tiempo.

La niña se retorcía y no quería estar ahí, en la presencia de estas dos alimañas pero Mateo a fuerzas quería que se quedarán y quería acercarla a uno de esos adefesios.

Valentín quería decir algo, sin embargo, el ambiente fue roto por la pequeña, ya que en su desesperación y Aunque parezca estúpido y poco creíble la palabra mamá salió de su boca.

Y no solo eso, extendió sus pequeños bracitos hacia mi de manera muy desesperada.

En este momento quería correr a su encuentro.

Quería apartarla de esa gente cruel, hice acelerar la cilla de ruedas y extendí mís brazos hacia mi pequeña.

Mateo estaba sorprendido por lo que acaba de suceder. Así que me extendió la niña de forma automática sin siquiera pensarlo.

La niña se agarró de mi cuello escondió su cabecita y no quiso volver a mirar a nadie de ahí.

Fulmine a todos con la mirada y le pregunté a Mateo que qué se suponía que estaban haciendo ellos ahí.

No, se supone que prometiste cuidar a la niña . cómo puedes dejarla con esa gente.

Abigaíl: Que quieres decir con esa gente.

Valeria / Valentín : Lo siento solamente estoy diciendo tonterías, pero aún así ustedes qué hacen aquí.

Sandro: No que tú haces aquí, quien eres para empezar, Mateo quieres explicar quién es esta persona y qué está haciendo aquí.

Y por qué está abrazando a tu hija y conteste; Qué hace esa persona aquí y quién es.

Mateo: Bueno pues es la niñera de Raquel.

Sandro: Que niñera, y se puede saber como un paralítico para cuidar a mi sobrina.

Valeria / Valentín : Y se puede saber cómo la han estado cuidando a ustedes que dejaron que se cayera de la cuna.

Abigail: Tu como te atreves.

Valeria / Valentín : que acaso estás bromeando.

Quisieron seguir discutiendo, Abigail y Sandro no podían aceptar que un intruso llegara de repente.

Por otra parte Valentín les dijo que no necesitaban discutir enfrente de una niña y mejor que siguieran en lo suyo ya que ya habían desayunado en su cuarto.

Mateo: Pero no ibas de salida.

Valeria / Valentín : Bueno iba primero a desayunar pero viendo lo haré en mi habitación y después me iré y me llevaré al bebé.

Mateo: No puedes...

Valeria / Valentín , Si yo digo que puedo y lo haré.

Por otra parte no cumpliste con tu promesa porque de seguro al final ellos terminarían cuidando a la niña y por si no te has dado cuenta la niña no los quiere ver ni en pintura.

Pero eres tan egoísta que solo te interesa no estar solo pues sin importarte si tu hija está cómoda o no.

Vamos mi perqué y luego iremos de compras, por favor llevé nuestro desayuno a mi cuarto.

Dijo Valentín con la bebé en el regazo de este y está a su vez estaba acurrucada en una pequeña bolita con el rostro escondido. Cómo si de esa forma pudiese esconderse de mal.

Ya en la habitación Valentín trato de calmar a la pequeña.

Mi amor ya todo esta bien dijo mientras trataba de moverla lo cual era casi imposible puesto que no podía caminar.