En Mi Segunda Vida Soy La Villana

Tras el incidente de hace un momento, la emperatriz mandó a los sirvientes a quitar el desastre y luego ella mandó a que todos siguieran con la celebración de cumpleaños de su hija, después de todo, no vale la pena que esta se arruine por la imprudencia de otro.

Ya para ese tiempo Cristal se había calmado, y la familia Rinaldi había abandonado la fiesta, estos estaban avergonzados con lo que pasó en esa fiesta, y prometen hacer pagar a aquella arrogante familia, Fausto ya tiene el plan que lo llevará al trono, es solo cuestión de tiempo para que eso pase y él sea el soberano del imperio.

Para adelantar el plan, esa misma noche él se reunió con sus hombres, y estos tenían orden de incendiar las casas cercanas a la frontera del imperio, y cuando los emperadores llegarán a investigar lo que pasó, tenían orden de acabar con sus vidas.

Mediante un portal mágico, y sin piedad alguna, aquellos hombres se fueron a hacer su trabajo, y prendieron fuego a algunas casas de las fronteras, y también le dieron muerte a los guardias de ese lado, y luego se escondieron en el bosque, en espera de cumplir con la otra parte del plan.

Por suerte los afectados pudieron salir con vida de sus casas, pero de algunas de sus viviendas no quedaron nada, nadie se explica de dónde vino el fuego, pues a esa hora todos estaban durmiendo.

Tras buscar la causa, ellos no encontraron nada más que unos cuantos guardias muertos, es claro que quien atacó, sabe bien lo que estaba haciendo.

Unos de los pobladores esa misma noche tomó su caballo y se fue al palacio a informar al emperador de lo que pasó.

Cuando él llegó pasaban ya de la 9 de la mañana y la familia imperial, al terminar la fiesta muy tarde de la noche, apenas estaban reunidos en el comedor desayunando.

Unos de los guardias entró al comedor a dar el aviso de la llegada de ese hombre, y los emperadores, sin aún terminar su desayuno, se van a la sala del trono para ver lo que está pasando.

Cristal, quien se imagina que algo pasa, también deja de desayunar y se va detrás de sus padres, cuando llegó, entró a la sala del trono, y escuchó lo que le estaba diciendo un hombre a sus padres.

—Majestades perdonen que llegara así tan de repente, mi nombre es Luis y en la noche de ayer, en el pueblo cercano a la frontera, el cual es el lugar donde vivimos muchas personas, sufrimos un incendio que acabó con algunas de nuestras viviendas, no sabemos de dónde salió el fuego, al buscar la causa, encontramos solo algunos guardias muertos— dice aquel hombre mientras hace una reverencia.

—Tranquilo, iremos personalmente a investigar el asunto y le ayudaremos con la construcción de sus casas— dice el emperador y Cristal, quien ya sabía que este es el inicio de la historia original, decide intervenir.

—Padre, madre, creo que es hora de ir asumiendo mi responsabilidad de princesa heredera, es hora de que ya comience a conocer a mi gente, dejen que sea yo quien vaya a ver lo que pasó, el palacio no se puede quedar sin sus gobernantes, y no sabemos si esto es una invasión del reino vecino, o alguna trampa de alguien no es normal que pasara algo así— dice ella y sus padres abren los ojos como platos, ya que no habían pensado en algo como eso.

—Hija tú... — trata de decir la emperatriz y la pequeña vuelve a decir.

—Madre tenga confianza en mí, sé que aún soy pequeña, pero debo demostrar mi valentía y así de ese modo traer orgullo a la familia Silva, de lo contrario, no seré más que un estorbo y cuando llegue a gobernar, seré solo la burla de los nobles— dice ella, y sus padres van hasta dónde está ella y le abrazan.

—¿No tengo manera de convencerte de no ir?—dice el emperador con una sonrisa.

—No, no la hay— dice ella decidida.

—Bueno, creo que es tiempo de que tomes tus responsabilidades de princesa heredera, esta es tu primera misión— dice la emperatriz — Pero si no regresas con vida, me aseguraré de ir por ti al más allá, solo para darte una paliza — agrega la mujer y todos ríen.

Tras un breve cambio de planes, los emperadores prepararon todo para que sea su hija quien acuda a ver lo que pasó, y ella, en compañía de un pequeño escuadrón de cien guardias, salieron del palacio imperial luego de la comida.

Cristal estaba mentalizada con lo que podía pasar, y estaba dispuesta a eliminar a quienes le quieren hacer daño a su familia, por esa razón, ella decide ir cómoda y antes de salir se colocó una armadura muy ligera, y llevaba consigo una espada que le regaló su padre por su cumpleaños número 12.

Ella ya se hace una idea de quién puede estar detrás del ataque, y eso le hace sonreír con malicia, después de todo, no sería divertido no ver ningún movimiento de su parte.

Quizás es cruel su manera de pensar, pero como ella no tiene interés de caerle bien a todo mundo, actuará como mejor le plazca, siempre y cuándo no le haga daño a los inocentes.

Unas horas después, todos estaban por llegar al lugar en donde sucedió aquel incendio y desde lejos se ve que el sitio estaba muy feo.

Solo los que andaban con Cristal tenían conocimiento de que en vez de los emperadores, es la princesa quien iría.

Cuando el carruaje casi estaba por llegar a su destino, un grupo de hombres salieron del bosque, y aquellos hombres comenzaron a pelear con los guardias imperiales, lo que significa, que todo lo que estaba pasando era una trampa.

Ella sabe que si se queda en el carruaje matarán a esos guardias, y por esa razón salió de él, con su espada en las manos.

Los delincuentes ya tenían a los guardias imperiales sometidos y todos esos guardias estaban malheridos. El hombre que fue a dar el mensaje al palacio también lo estaba, ya que esos delincuentes no solo eran expertos en la espada, sino también en la magia.

Cuando vieron venir a la niña, ellos se comenzaron a burlar de ella.

—Miren nada más y nada menos a quien tenemos aquí, ¿no es está la princesa heredera Cristal Silva? Parece que sus padres no la aprecian, ya que mandarla a morir de este modo, es claro que sea así— dice el líder de ellos con burla, todos también se burlaban de ella.

—Jefe, la princesa es linda y ella ya está en edad de contraer matrimonio, ella puede servir como diversión— dice uno de ellos y los demás estaban de acuerdo con eso, y hasta estaban sacando turno para violarla.

—No solo son unas ratas, sino, que también son unos violadores. Yo le enseñaré lo que es ser decentes, bastardos infelices— dice ella.

Al decir esas palabras, Cristal pone la espada frente a ella y pasa una de sus manos en la parte que no tiene filo, y la espada de un momento a otro se prende en fuego.

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*Nota

Espero y estos dos capítulos sean de su agrado, nos vemos el miércoles si Dios quiere, no olviden dejar su lindo apoyo