CATARINA: LA ÚLTIMA NIÑERA

Sin entender la verdadera razón de eso, Catarina tosió levemente y luego dijo:

—Bueno, no hace falta decir que me parece bastante extraña esta historia, he trabajado como niñera y nunca he experimentado esto, pero hablaré con el señor Andrey más tarde, disculpe. dijo Catarina y luego regresó a la habitación, llamó suavemente a la puerta y luego entró.

—Vamos a darnos una ducha, tienes que ir a la escuela-dijo Catarina y luego caminó hacia el armario buscando el uniforme escolar de Luca, Catarina, al elegir todo lo que usará Luca, volvió a decir:

—Vamos, pequeño.

—Estoy en un juego, respondió Luca sin siquiera mirar a Catarina.

Sin saber cómo reaccionar ante aquella situación, Catarina dio un largo suspiro y dijo:

—No me metas en problemas en mi primer día de trabajo-dijo Catarina para luego apagar el videojuego y salir empujando la silla de Luca hacia el baño, a él no le gustó mucho su actitud, pero no dijo nada. y sólo podía hacer lo que le pedía Catherine.

—Solo ayúdame a deshacerme de mi ropa, no te atrevas a mirar mi equipo, simplemente odio a las mujeres devaprase-dijo Luca, haciendo sonreír a Catarina.

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Mientras tanto, Andrey parece agonizar moviendo algunos papeles, todos los días es lo mismo, varios proyectos e informes por analizar y así el tiempo pasa y nada cambia, el dolor y la culpa siguen carcomiendo el pecho de Andrey.

En ese momento alguien tocó ligeramente la puerta, era Regina trayendo más documentos consigo.

—Deja todo ahí, me voy a casa a almorzar, tal vez vuelva mañana, dijo Andrey y luego salió de la oficina, dejando a Regina muy confundida.

—Y pensé que cuando Andrey encontrara una niñera para cuidar a su hijo él curaría a esta cabra, parece que está mucho peor—confirmó Regina.

En la acera, los guardias de seguridad, que anteriormente habían estado protegiendo a Luca, ya estaban esperando a que Andrey se fuera, así que se subieron al coche y pronto se dirigieron a la mansión de la familia Gorky.

Hubo un silencio extraño en el auto, en ese momento sonó el teléfono de Andrey, el número era desconocido y como resultado Andrey no contestó.

Hizo esto sucesivamente, los guardias de seguridad estaban en agonía con ese ruido estridente resonando por la habitación.

—Señor Andrey, el conductor nos dijo que la nueva niñera estuvo todo el tiempo sujetando la silla del señor Luca por miedo a que se lastimara, y además ni siquiera necesitó nuestra ayuda para sacar a Luca del vehículo, dijo un Hombre de aproximadamente 37 años, cabello deliberadamente gris y aura aterradora.

Al escuchar esas palabras, Andrey esbozó una pequeña sonrisa, tal vez encuentre la paz pronto, pero ¿Andrey está pensando con claridad?

¿Realmente llevar a cabo tus planes y deshacerte de este dolor es la única salida? ¿Y tus hermanos no representan nada?

La secretaria, el conductor, los guardias de seguridad, el ama de llaves, todos acordaron contratar una buena niñera, alguien que pudiera darle a Luca todo lo que su madre no podía, esta sería la última niñera.

Andrey estaba perdido en sus pensamientos y solo volvió en sí cuando los guardias de seguridad le informaron que ya estaban frente a la mansión de la familia Gorky, Andrey se bajó del vehículo y pronto entró a la casa, fue directo al baño a lavarse las manos y luego se dirigió al comedor, en ese momento Andrey solo vio a Catarina y Luca sentados en la mesa y conversando, se quedó ahí, estático, escuchando todo.

—Dime Luca, ¿qué te gusta hacer los fines de semana, ir al cine, comprar, hacer un picnic, tomar un helado?- preguntó Catarina mientras mostraba una pequeña sonrisa, hablaba lentamente tratando de tener exactamente la idea correcta. lo que a Luca más le gustaba hacer.

—No me gusta hacer nada, al fin y al cabo soy un inútil, que necesita ayuda hasta para ir al baño, así que me quedo en casa – dijo Luca aumentando el tono de su voz, notó la presencia de Andrey, pero Catarina no , y luego dijo:

—Oye querido, no vuelvas a decir eso, tu discapacidad solo te hace un niño aún más especial, entonces tía Catarina le pedirá permiso a tu padre para llevarte a caminar, te encantará, al fin y al cabo, es no porque no podamos hacer ciertas cosas es por eso que no podemos alegrarnos de la felicidad de los demás-dijo Catarina y luego besó la frente de Luca.

Al ver eso, Andrey se alegró mucho, ya que Luca tiene la costumbre de limpiar siempre el lugar donde lo besaron, pero el beso de Catarina no repudió a Luca.

Fingiendo que acababa de llegar, Andrey tosió levemente y luego saludó a los presentes con solo buenas tardes y ni siquiera besó a su hijo.

Catarina, por alguna razón desconocida, de repente se puso nerviosa y ya no interactuaba con Luca, porque Andrey no podía dejar de mirarla.

Unos minutos después, Catarina miró a Luca y dijo:

—Vamos querida, tenemos una cita, dijo Catarina seriamente, ya levantándose.

—¿Qué compromiso?- preguntó Andrey, involucrándose en la conversación, ya que fue ignorado en todo el tiempo.

La voz del hombre era muy espesa y seductora, era un sonido agradable de escuchar y Catarina sintió que su cuerpo temblaba.

"¿Por qué los hombres de esta casa tienen que ser tan hermosos? Y este todavía tiene una mirada que me hace sentir desnuda, eso no está bien", pensó Catarina mientras miraba en dirección a Andrey, sus miradas se encontraron, pero Andrey retrocedió.

—Oh, no es gran cosa, señor Andrey, es solo Luca quien está comprometido con la educación - respondió Catarina mientras intentaba mantener la calma ante la mirada penetrante de Andrey.