Leticia nunca se imaginó que en su segunda oportunidad de vivir tendría que vivir como alguien más, el problema está, en qué aquella joven a quien le habita el cuerpo esta destinada al sufrimiento.
Pero si algo tiene seguro, ella no va a permitir que le hagan daño, y si tiene que ser villana, pues que así sea
Por casualidad del destino, ella se cruza en el camino de alguien muy peculiar
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Leticia
Leticia, hija única del mejor agente del país H, un hombre llamado Eduardo Roche, quien quedó viudo joven.
Desde pequeña, Leticia recibió una dura educación, en donde se le obligó a aprender cómo ser una agente de inteligencia, y con el tiempo le tomó pasión al oficio, la mujer al ser muy inteligente, logró a lo largo de su vida graduarse de diferentes tipos de carreras universitarias, las cuales son útiles para su profesión.
Enfermería, administración de empresas, abogada, actriz, y aprendió no solo un sin fin de oficio, sino, que ella era experta en artes marciales mixtas, y se graduó con honores de la academia militar, y a la hora de disparar, en dónde ponía el ojo, ahí mismo lanzaba la bala. Sus primeros pasos fueron en el ejército, y unos años después, por sus propios esfuerzos fue agente en cubierta.
Su padre le enseñó el arte de crear máscaras faciales, y gracias a eso, ella logró pasar desapercibida por los delincuentes a lo que iba a eliminar. También es experta en no dejar huella y ella misma creó un traje, el cual es antibalas desde la cabeza hasta los pies.
A sus 50 años, Leticia al ojo público es una empresaria de renombres, pero alejada del ojo público, es una de las mejores agentes encubiertas que ha existido en el país o quizás en el mundo.
Aquella bella mujer de edad madura, es el dolor de cabeza de todas las organizaciones criminales, esos delincuentes la apodaban la mujer camaleón, ya que sus múltiples personajes, hacían que fuera imposible de encontrar.
Era la mejor en lo que hacía, ya que gracias a ella, miles de víctimas de trata de blancas y etc.. Han sido rescatadas por ella con éxito.
Nunca ha fallado en una misión laboral, y sus empresas son las número uno, siendo así la mujer más rica del país.
En una cena de negocios, conoció a su esposo, un hombre que le llevaba algunos años, quien era el chofer de unos de sus socios.
Al poco tiempo de conocerse, Leticia se casó con su esposo, con la esperanza de formar una familia numerosa, pero, eso no se pudo, gracias a que dicho hombre era estéril, pero ella al amar a su esposo, le ha hecho creer, que ella es la del problema.
Ambos llevan 20 años de casados y su matrimonio es el mejor y se aman mucho, pero eso le hace creer Antonio a Leticia, ya que a espaldas de esta, él tiene un sin fin de amante y también es un ladrón, porque de manera discreta, le roba dinero en cada negocio que hace, y lo justifica con uniforme para los empleados.
Él lleva a sus amantes a la mansión que comparte con Leticia y así se ahorra el hotel, y para que nadie en la mansión diga nada, le da vacaciones a sus empleados, cuando ella está fuera, solo deja en la casa, a la encargada de la limpieza, y también a la cocinera, las cuales son sus aliadas y también amantes.
Él tiene la esperanza de ser el dueño de la fortuna de su esposa, sin imaginar lo que se le viene.
¿Cómo hace Leticia sus misiones?
Para hacer sus otros trabajos fuera de lo normal, ella aprovecha en esos viajes de negocios largos, pues ingenuamente, Leticia nombró a su esposo vicepresidente de sus empresas y cuando ella está fuera, él se hace cargo de todo.
Pero nada es perfecto, y en unas de sus tantas misiones, ella mientras se quitaba su disfraz en el baño de la habitación de hotel en el que se quedó, recibe una llamada de su esposo preguntando cuándo será su regreso.
Sin darse cuenta dejó caer uno de los guantes especiales que tenía en las manos, con el cual había terminado de hacer una misión importante.
Ella no se dio cuenta de que aquel guante cayó, y cuando nuevamente cambió de personaje, que salió por la puerta trasera de la habitación a lo que sería su siguiente misión, se va dejando detrás lo que sería su perdición.
La mafia rusa había puesto su mirada en ella, pues la mujer se hacía sentir entre los mafiosos más buscados, y había desmantelado muchos de sus negocios.
Aquella organización criminal, siguiendo de cerca su trabajo de años, comenzó a seguir las cámaras de seguridad en dónde ella se movía, y fue así como llegó a ese hotel, en dónde con ayuda del hombre de seguridad, tuvieron acceso a las cámaras del hotel y lograron dar con la habitación y tras buscar evidencia de que estuvo allí, encontraron el guante de dicha mujer, el cual al ser analizado en la base de datos, dio con la identidad real de Leticia.
De manera inmediata, los rusos se fueron en su búsqueda, y estaban dispuestos a todo, Pero como saben que ella no caerá así de fácil, lograron comprar a una de las amantes de su esposo quien era una ex policía, la cual se encargaría de matarla y de paso tomar para sí su gran fortuna.
Por esa razón, aquella mujer de nombre Carla, logró tener una relación de larga duración con aquel hombre.
Aquella mujer era sigilosa, y cada vez estaba a un paso de lograr su objetivo, pero en cada trampa que ella le ponía a Leticia, esta no caía y salía bien librada.
La oportunidad se dio, cuando Leticia le avisó a su esposo que llegaría el domingo luego de pasar un mes fuera.
Con ayuda de una droga ella logró dormir al hombre luego de tener relaciones sexuales de manera intensa, con la intención de que Leticia al llegar a la mansión la encuentre en la cama con el hombre, y así no solo matarla, sino, causarle un gran dolor, ella cuando aquel hombre se durmió, fue a la sala de estar y dejó su ropa tirada por donde quiera, en claras señales la infidelidad.
Cuando la hora de la llegada de Leticia llegó, ella llega a su mansión y prende las luces, y en el suelo de la sala de estar, ve ropa de mujer tirada por todas partes.
Al ver aquello, la mujer sintió como su alma abandona su cuerpo y una sensación agria se adueña de ella.
Con los nervios a mil, ella se encamina hasta la habitación que comparte con quien dice ser su esposo, y ahí ve lo que nunca en su vida imaginó que vería.
Indignada, ella decide hablar.
—¿Qué carajo significa esto Antonio?—preguntó ella y los que estaban en la cama se despertaron asustados, o mejor dicho, solo Antonio porque la mujer a su lado solo estaba fingiendo.
—Leti mi amor, no es lo que parece— trato de decir Antonio, pues si Leti lo deja, él pierde la gallina de los huevos de oro.
—No necesito explicaciones, ya tengo suficiente con lo que estoy viendo, así que toma tus cosas y vete de mi mansión —dice ella con lágrimas en los ojos.
El hombre al escuchar aquellas palabras de la mujer se empezó a reír, ya que aunque él haya sido infiel, ella tiene que perdonarlo.
—Ya deja el drama, ¿crees que una mujer estéril como tú, va a conseguir marido? Solo mírate, has perdido tu belleza y no solo estás vieja, sino que eres seca como un palo viejo, y para que no te enteres por otro, yo he estado robando, y aquí en tu misma cama he estado con mis amantes y dos de tus empleadas son dos de ellas y tú ni enterada de eso, eres patética — dice el hombre riendo.
Ella al escuchar semejante cosa, decide que no es tiempo de seguir guardando el secreto de la esterilidad de su esposo, y por eso decide decírselo.
—Idiota, no solo eres un ladrón infiel, también eres un perro. De saber que ibas a ser un malagradecido, no me hubiera casado con un hombre como tú, y para que también te enteres, el estéril eres tú, y lo seguirás siendo por siempre, el que está seco como un palo eres tú, y no yo— dice ella secando sus lágrimas, pues decide que no es tiempo de llorar por semejante idiota.
Tras escuchar aquello, Antonio dejó de reír para mirar con odio a su esposa.
—Tú, no tienes que mentir para quedar como la mujer maravilla — dice él mientras se sale de la cama desnudo y se coloca su pantalón.
Tras él se levanta Carla, quien tiene la intención de aprovechar la discusión de la pareja para ejecutar su plan.
—No estoy mintiendo grandísimo tonto, tú eres un estéril y también un ladrón infiel, ya mismo nos vamos a divorciar, y te voy a meter a la cárcel —dice Leti enojada y el hombre se acerca a ella con la intención de darle una cachetada pero ella logró esquivarlo, y le dio en las joyas de la familia.
El hombre cae al suelo llorando y por los gritos del sujeto Leticia por un momento se olvidó de que había una tercera persona en la habitación, quien en ese momento sacó una arma de su cartera y le dio un tiro en el hombro izquierdo y tenía la intención de disparar nuevamente, pero Leti logró esquivar el segundo impacto.
Rápidamente, ella cayó al suelo, y sacó el arma que siempre lleva en su cintura y se fue a los disparos con la mujer.
En el tiroteo, Antonio recibió de manos de su amante un disparo que acabó con su vida y Leti para ese tiempo tenía solo un impacto de bala en su cuerpo, mientras que Carla, estaba ya muerta.
Antes de que Leticia pueda procesar lo que está pasando, un grupo de personas entraron a su mansión y estos, tenían la intención de terminar con lo que Carla inició, ya que los rusos sabían que una persona normal no podía acabar con la mujer más peligrosa del servicio de inteligencia.
Estos, nada más llegar a la mansión, se fueron por Leticia, quien al sentir como la puerta de su mansión fue abierta, supone que algo malo iba a pasar, y por esa razón, se metió al closet, en donde había una puerta oculta, allí estaba su cuarto de armas.
Ella, como sabe que este es su final, se armó hasta los dientes, y curó su herida de bala ella misma, y luego de tomarse unos calmantes para el dolor y colocarse una máscara antigas y un chaleco antibalas, salió del cuarto de armas y, nada más salir de allí, comenzó a eliminar a sus enemigos.
Una verdadera masacre fue lo que se armó en esa mansión, ya que la mujer no tenía piedad con sus enemigos, los cuales eran muchos, Pero al igual que ella, los enemigos tenían claro algo, y eso era acabar con ella.
Por esa razón le dieron con todo lo que tenían, Pero eso no fue suficiente, pues ella usando gas lacrimógeno tenía ventaja sobre ellos.
Cuando pasaron dos horas, los disparos habían acabado y Leticia había acabado con sus enemigos, para ese tiempo, ella estaba perdiendo mucha sangre, pues tenía dos disparos más, los cuales hacían que ella esté en mala posición, mejor dicho, a ella le queda poco tiempo de vida y se siente muy débil y su corazón apenas latía. Ese día tuvo la mala suerte de dejar su traje antibalas en la base, o la historia había sido otra.
Adolorida, ella cae al piso y poco a poco su cuerpo se va entumeciendo y su vista se estaba tornando oscura y, al poco tiempo de estar en el suelo, ella fue cayendo en la oscuridad. Es claro que había muerto.
Fuera de la mansión, un vecino que había visto llegar a esos tipos malos y con armas largas a la casa de aquella mujer tan trabajadora, llamó a la policía, y esta llegó y puso bajo arresto a esos delincuentes, quienes al escuchar a la policía quisieron huir, pero estaban rodeados y no pudieron escapar.