LOS HILOS DEL DESTINO

Peter estaba sentado en el salón de fiestas esperando a que esta comenzará, había invitado a su prometida Ariadna a acompañarle al festejo, como había sido una semana de trabajo, en ese lugar les acompañaba Anna su asistente, ella siempre iba con él a sus viajes de trabajo y al estar asistiéndolo, también fue invitada, pero le molestaba mucho verlo con Ariadna, de lejos o cerca, le molestaba ver las muestras de amor que se daban, ella no le gustaba saber que estaba por casarse, faltaba 2 meses para realizar la boda.

Ariadna tenía otros compromisos, ya que ella era diseñadora en la empresa de su familia y esa temporada era de la más cansada, pero al ver que Peter estaría muchos días lejos de ella, le prometió alcanzarlo, ella le hizo la broma de que no iría, que su trabajo era demasiado y no pudo acompañarlo, Peter estaba triste de pensar que pasarían más días sin verla, pero el mero día del evento, ella llegó de sorpresa.

Anna, que sabía que Ariadna no estaría en la fiesta acompañando a Peter, estaba  feliz, ya que al no ir Ariadna ella sería quien estaría toda la noche durante la fiesta acompañándolo como su asistente y si todo salía como esperaba, a lo mejor ese sería el inicio de algo entre ellos, pero también sabía que si salía mal podría alejarla para siempre de él y eso no podría soportarlo, estaba enamorada él, no quería estar lejos aunque no pudiera tenerlo como hombre, por ello pensó en darle algo para qué pasará con ella la noche y al despertar no se acordará de nada, solo ella tendría ese recuerdo para atesorar como lo más grande e importante en su vida,

Anna pensó que esa sería una noche inolvidable, la mejor de su vida, pero todas sus ilusiones y planes se vinieron abajo al ver entrar sonriente a Ariadna en la fiesta, sus planes se esfumaron en un abrir y cerrar de ojos. Ariadna fue recibida con una enorme sonrisa por su jefe, lo cual la disgusto mucho, no podía creer su suerte.

Sin embargo, todo cambio cuando molesta de verlos abrazados bailando, salió rumbo a su cuarto, encontrándose con esa chica que actuaba raro y por lo que había escuchado cuando expiaba en el pasillo; no soportaría más tiempo observando en la sombra, entonces su cabeza se iluminó, si aprovechaba los planes de esa gente desconocida para la desafortunada chica, podría matar dos pájaros de un tiro, a esa chica alguien ya la había puesto en bandeja de oro para ella, de todos modos estaba destinada a estar ahí, así en vez de que pasará la noche Anna con Peter, sería con una desconocida y eso haría que su prometida Ariadna se decepcionará de él, si todo salió a como esperará, ese mismo día Anna alejaría a Ariadna para siempre de Peter y los otros que desconocía dañaban a esa chica en su reputación, porque eso es lo que se pudo percatar que querían hacer con ella. Le hablo al mesero que había pagado para qué continuará con las instrucciones que le había dado antes del evento, ya que al estar hospedados en el mismo hotel fue fácil para ella conseguir ayuda y solo cambiaría un poco los planes de manera que ella no tuviera riesgo de ser alejada del al darse cuenta de que estaba en su cama.

Cuando Ariadna fue al baño procedieron al plan, acababa de tomar el vaso con la droga, una persona de recepción se acercó a él y le dijo que alguien le estaba marcado a su habitación diciendo que era importante, mientras Peter iba a ver que sucedía, Anna fue a esperar a Ariadna y con varios pretextos le hizo plática para hacer tiempo a que el mesero apareciera dándole una señal con los ojos de que estaba todo listo, que ya Peter iba rumbo a su suite. Aragón al llegar a la recepción le pasaron el teléfono de ahí, le llego una llamada que no entendió, le dijeron que le habían enviado un paquete que era regalo de su prometida, que lo habían dejado en la habitación, entonces dejo ver una sonrisa. Anna ya había llevado a Ada, con ayuda del mesero, a la habitación de Peter, dejando todo listo para lo que tenía planeado sucediera.

Peter en el camino empezó a sentirse mal, al llegar a su suite estaba la luz con la menor intensidad, la chica estaba en la cama solo en ropa interior, ya que, el efecto de la droga le había subido mucho su temperatura haciendo que se sintiera con la necesidad de quitarse todo para refrescar su cuerpo, ella gemía y se retorcía, Peter sabía que Ariadna había ido al baño, por lo que pensó que la sorpresa era ella y en vez de ir a los servicios del salón fue a su habitación a esperarlo mandándole a traer a su cuarto con el pretexto del paquete de regalo. Desde la sala se podían escuchar los gemidos de la mujer, sofocado por el calor que sentía, se empezó a quitar el saco y desabrocho las mangas de su camisa, aventó la corbata que lo asfixiaba, cuando estaba con los botones ya abiertos entro a la habitación viendo la silueta de la mujer retorcerse, se acercó a pasos lentos, su vista que era un poco nublada por la sensación de calor en su cuerpo y la luz tenue no le permitieron ver con nitidez a la persona que estaba en su cama.

Acelero sus pasos y se subió a la cama quedando sobre la chica, al estar sobre ella alcanza a ver que no era Ariadna, era una chica muy bella, pero no se trataba de su prometida, sorprendido trato de levantarse de inmediato, pero ella al sentirlo encima, lo toma del cuello de la camisa y acerca más a ella, lo empezó a besar, él trata de alejarse, pero el poder de esa droga le nublaba y debilitaba la razón, además que esos labios sobre los suyos le hacen sentir sensaciones que no podía entender, se separan solo para tomar aire y él volvía a devorarla, mientras ella al sentirlo, empezó a acariciar su cuerpo por sobre la ropa, pero el calor le hace sentir que esa ropa quema y le empieza a quitar la camisa que ya estaba abierta, se siguen besando y tocando emitiendo gemidos que se acompasan al movimiento de sus cuerpos.