Reencarne: En Mi Primera Vida

Un dolor insoportable se expandía por el pecho de Meredith, sentía la respiración agitada y la garganta le ardía como si tuviera fuego en ella, en eso se desplomó al suelo ya no podía sostenerse de pie, sus manos temblaban tratando de apoyarse de nuevo, su corazón se sentía apretado y triste, el veneno que había ingerido estaba haciendo efecto muy rápido.

 Su hermana adoptiva Penélope quien también era su mejor amiga o eso ella creía, estaba frente a ella con una mirada victoriosa y llena de satisfacción al ver a Meredith en sus últimos momentos de vida.

_ No me mires así hermanita, susurró de manera cruel _ No eres la maldita víctima aquí, eres simplemente un error en mi vida, un error que nunca debí dejar que siguiera apoderándose de lo que es mío.

 Meredith sin casi fuerza intentó responder pero fue imposible, botaba sangre por la boca sabía que ese era su final, en eso su visión empezó a verse borrosa, aún podía sentir el amargo del té que había ingerido en su boca.

 Penélope su maldita hermana adoptiva se agachó para estar a su altura, disfrutando cada momento mientras veía que la vida de Meredith estaba escapando poco a poco de su cuerpo, le causaba mucha risa ver cómo intentaba verse fuerte y resistir el dolor.

_ Sabes qué es lo que más me causa gracia_ ¡Qué nunca lo viste venir! Desde ese momento en que tú entraste a mi casa como Una intrusa, estando adoptada por mis padres sabía que querrías robarme lo que es mío, el orgullo de mis padres, todo lo que me pertenece, Luego te comprometiste con el hombre que debió ser mío desde un principio,pero sabes que no lo voy a seguir permitiendo me cansé de ti.

 Meredith sin casi fuerza levantó la cabeza mirando con tristeza y decepción a la persona a la cual había querido tanto, y a la que consideraba su hermana, su mejor amiga su confidente. Pero en realidad era su peor enemiga, la causante de muchos de sus males, eso le entristecía y la llenaba de indignación porque ella nunca hizo nada para lastimarla, ella nunca le había robado nada.

 Pero entonces algo cambió, repentinamente el viento se sentía más frío de lo normal, las luces empezaron a parpadear, fijó su vista en el espejo que daba hasta el suelo, y pudo ver que el espejo reflejaba a otra persona quién la miraba con tristeza, como si la imagen tuviese vida propia, en ese momento no entendía que era, ni porque esos ojos verdes tan hermosos la miraban con tanto dolor.

 En un pequeño susurro del viento, logró escuchar esta frase: "Morimos de nuevo"

 Muchas imágenes empezaron a golpear su mente de pronto, voces desgarradoras pidiendo Auxilio, mujeres siendo azotadas, maltratadas, traicionadas, asesinadas, odiadas, muchas imágenes de distintas mujeres, con distintos nombres y distintos rostros, en distintas épocas, en distintos mundos en diferentes vidas, extrañamente sentía el dolor de esas mujeres, en carne propia como que si esa sangre la derramó ella, Como si fuese a ella a quien habían quemado, Como si fuese a ella a quién congelado, mutilado, apedreado, aborrecido.

 Un extraño sentimiento como un frío se apoderara de su columna vertebral, en ese momento se dio cuenta todas esas mujeres, eran ella, ella en diferentes vidas, y en cada una de sus vidas había sido traicionada, sin justa razón, sin saber por qué, Qué había hecho mal para merecer todo esto, era triste saber que en cada vida en cada mundo fue desdichada y nunca había encontrado su final feliz, si es que eso existía.

 Y la persona que tenía enfrente de ella, Penélope simplemente había sido un Verdugo más, era la última persona que le había arrebatado la vida, y en ese momento la odio, odio su maldad, odió su traición, La odio en todo el sentido de la palabra _ Penélope sin notar nada, se puso de pie con mirada triunfal y se dirigió a la puerta para huir como una rata que era.

_ Adiós maldita bastarda, muere y Púdrete en el infierno, le dio una última mirada

 Pero para su sorpresa meredith, con todas las fuerzas que logró acumular logró decir: _ podrás quedarte con mi vida... Con mi prometido... Con todo lo que queda de mi...

Una sonrisa muy forzada se dibujó en el rostro pálido de meredith, y en su mirada se reflejaba todo el odio que sentía hacia esa desgraciada_ pero nunca podrás escapar de mí, jamás me olvidarás, voy a atormentar tu vida hasta el último de tus días, de ahora en adelante seré tu sombra y no podrás deshacerte de mí. Meredith lo dijo con tanto odio que la sonrisa triunfal de Penélope se borró totalmente.

En ese momento se descompuso totalmente, empezó a temblar mucho Penélope  no sabía por qué repentinamente su seguridad se había quebrado, Aunque buscando la poca seguridad que no tenia,huyó del lugar desapareciendo no quería verse implicada en nada.

 Antes de cerrar los ojos por última vez en su mente Le deseo todo el mal que podía, a Penélope, te quedaste con todo lo que era mío, con mi carrera, con mis logros, con mi prometido, Solo espero que tengas un final devastador y que no seas feliz nunca.

 Finalmente, cerró sus ojos, sintiendo una paz infinita, ahora lo comprendía todo, en lo que era su muerte, logró ver sus diferentes vidas, y en ellas su primera vida, esa mirada de ojos verdes Esmeralda, que la miraba con tanto dolor era ella misma en su primera vida se pudo reconocer quizá morir no es tan malo, pero si tan solo pudiera ser feliz una vez, nunca experimente lo que realmente es ser feliz y sentirse amada y segura.

 Una voz que no sabía de dónde provenía, hablo con voz como trueno que retumba: Mi pequeña y dulce Boa, finalmente tu espíritu pudo recordar sus vidas pasadas, y ahora es el momento:

 Meredith o Boa, estaba paralizada no podía siquiera responder

_ No tengas miedo pequeña, soy un Dios que se apiadó de ti, Quiero que en esta vida logre ser feliz, y para hacer eso debes volver a tu primera vida, donde Todo comenzó, debes revertir una maldición, salvar a tu familia, vengarte de los que te hicieron daño los cuales son los mismos responsables de tus fracasos en otras vidas, porque maldicieron tu alma, tu espíritu, Y eso provocó tus fracasos y soledad en todas tus siguientes vidas, no te preocupes para que no vivas una vida llena de sufrimiento, solamente vas a recordar tu última vida, y cuando despiertes recordarás todo lo que pasó en tu primera vida, Boa Lavoie, se feliz y no permitas que el odio sea más fuerte que las ganas de ser feliz, haz que valga la pena tu regreso.

 Sin saber cómo logró responder dijo: No te preocupes voy a ser feliz destruyendo a todos los que me hicieron daño ...