Julia es una chica que es drogada y por capricho del destino termina entregando su virginidad a un desconocido que pretendía salvarla y fue él quien terminó atrapado por la lujuria y la pasión de ella, hasta el punto de acosarla y hacerla huir de él, pero ella se llevó algo muy valioso y el llegará a tiempo para descubrirlo...
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CAPÍTULO 1
...*****NOTA DE LA AUTORA****...
Bienvenidos a esta nueva historia, para mis FIELES LECTORES, lo prometido es deuda, y a los nuevos seguidores, les invito a leer antes de esta historia, mi novela anterior, ya que esos protagonistas se integran al final de esta novela, para formar parte del famoso "Clan de Amigos"
UNA NOCHE LO CAMBIA TODO
Luego si te doy la bienvenida para acompañarme en esta gran aventura, está historia es un gran reto para mí. Prometo dar lo mejor para no decepcionarlos.
Espero les guste, dejen sus comentarios, regalitos🎁🎁🎁, votos, también puedes calificar la novela con las estrellitas 🌟🌟🌟🌟♥️ y presiona me gusta 👍al final de cada capítulo, tu apoyo es importante para mí.
Pueden agregarse en mi Grupo "FIELES LECTORES", para que vayan compartiendo conmigo los pormenores del desarrollo de mis historias.
...***** FIN DE LA NOTA*****...
CAPÍTULO 1
En el exclusivo Ristorante Ángelo de la ciudad de Guadalajara, se celebraba una cena de negocios de empresarios muy importantes, son seis hombres muy elegantes, rodeados de escoltas, cuatro de ellos son figuras públicas y conocidos como empresarios respetables de México, mientras los otros dos son invitados, su interés es hacer alianzas con ambos extranjeros para fortalecer sus imperios.
John Santino de 45 años, Julián Vasalle de 52 años, Dominic Trejo de 42 años, Darío Montesino de 50 años, Mitch Benedetti de 48 años (Rusia) y por último el más joven y guapo de ellos Thiago Smith de 28 años (Chicago), que a pesar de su edad, su manera arrogante y fría de actuar, opacaba a los demás, todos sus negocios eran legales, solo Mitch Benedetti era mafioso, pero esto era de desconocimiento de los demás. Ya que manejaba bajo perfil sus contactos con la mafia.
Todo el Ristorante fue reservado para esta reunión por lo tanto, no había más clientes.
Entre los mesoneros se encontraba una hermosa chica llamada Julia, de tan solo 19 años, era una mujer blanca, cabello rojizo hasta la cintura, ojos verdes, figura esbelta, por supuesto que había llamado la atención de varios de los empresarios, aunque ella permanecía seria y firme antes las insinuaciones.
En una oportunidad cuando ella fue a servir el café, Mitch Benedetti la tomo por la mano insistiéndole que se sentara en sus piernas, ella se soltó de su agarre y se marchó rápidamente hacia la cocina intentando huir de la vista de aquel hombre abusador.
Todos en la mesa rieron ante el atrevimiento de aquel hombre, solo Thiago expresó su molestia al permanecer serio aunque no emitió ninguna palabra, él pensó que al irse la chica el asunto quedaría ahí.
Pero Mitch mando a llamar al gerente del Restaurant y cuando este se presentó ante él, le dio unas ordenes en ruso, lo hizo en voz baja, pero Thiago alcanzó a oír y a entender todo, su abuela era rusa y desde pequeño le enseño a dominar perfectamente el idioma, pero esto era algo que los presentes ignoraban completamente.
__подготовь для меня эту девушку, ты же знаешь, как я это люблю, позаботься обо всем, я не хочу ошибок, мой помощник заберет ее у тебя в офисе. (Traducción: Prepárame esa chica para mí, sabes cómo me gusta, encárgate de todo, no quiero errores, mi asistente pasara por ella a tu oficina).
El gerente solo asintió y se retiró.
Thiago desde su puesto pudo ver como el gerente salía con la chica desde la cocina, hacia la oficina de la gerencia. Por esto decidió actuar rápido y sin perder tiempo, escribió un mensaje en su celular y lo envió a su asistente Nash que estaba del otro lado del Restaurante, observando todo.
Nash, ve por la chica, sálvala del peligro y llévala a un lugar seguro, no la lleves a su casa seguro Mitch ira por ella, asegúrate de que no te sigan. _ De inmediato Nash busco al gerente.
Cuando el Nash llego a la puerta de la oficina del gerente, se acercó a la puerta y escucho la conversación entre ellos:
__ Señor Jeremy, le juro que yo no hice nada mal, fue ese señor que trato de sentarme en sus piernas, no me despida por favor necesito el trabajo.
__ Lo sé, Julia no te preocupes, claro el señor Mitch no es solo un cliente, en realidad es el propietario de ese lugar, pero creo que si te disculpas con él, puede ser que te perdone.
__ ¿Disculparme yo?, fue él quien se propaso conmigo.
__Bueno Julia, vamos a hacer algo te invito una copa de vino, mientras pensamos en cómo salvarte de este problema.
__ Bueno señor Jeremy sabes que no tomo licor, pero aceptare solo una copa, para calmarme estoy muy nerviosa.
Nash abrió un poco la puerta y vio como el gerente le ponía unas gotas adicionales a la copa de la chica que estaba de espaldas hacia él. Pero Nash no podía intervenir, sabía que esas gotas eran para adormecerla y facilitar su traslado.
Apenas la chica se tomó la copa, Nash entro a la oficina, el gerente muy orgulloso de sus actos le dijo:
__Lista, como tu jefe la pidió, dile que en esta ocasión le di algo más que somnífero para que lo atienda como él se merece.
Estas palabras alertaron a Nash, sabía que debía darse prisa o estaría en problemas.
Cargo a Julia como un saco de patatas y siguió al gerente por unas puertas secretas que daban hacia las camionetas.
A los diez minutos, Mitch marco en su teléfono un número y volvió a hablar en ruso:
__Иди в кабинет управляющего, у него есть посылка для меня, отведи ее в мой номер. (Ve a la oficina del gerente él tiene un paquete para mí, llévala a mi suite).
En eso Nash observó que había movimiento entre los escoltas de Mitch y entendió que ya estaban por ir tras la chica.
Nash salió sin ser visto aprovechando la oscuridad del callejón para meter a la chica en una camioneta, la acostó con mucho cuidado en el asiento de atrás y condujo rápidamente, pensando a donde llevarla.
Cuando de repente Nash sintió una manos que le acariciaban el cuello y dió un frenazo, cuando giro a ver estaba Julia, riendo muy divertida, tirándole besos y queriendo quitarse la ropa, trataba de seducirlo, él le advirtió que se quedara tranquila y lo dejara conducir, ella asintió y el volvió a concentrarse en el camino, cuando miro por el retrovisor la chica ya no tenía la camisa, el solo negó con la cabeza y se apresuró a buscar un hotel, necesitaba librarse de esta loca mujer.
