Capítulo 18 ¿Quien es tu madre?

Ivana

-las noches aquí deben ser

preciosas – dije en voz alta 

-Lo son – me respondió Valentina, y yo voltee a verla un tanto sorprendida no sabía que me había oído 

-no me di cuenta que había hable en voz alta – confesé 

-también me sorprendió la primera vez que viene aquí, pero aprovecha que estas aquí para descansar –

-¿descansar? – 

-¿Por qué vendrías a trabajar? aquí hay empleados solo relájate, no has notado que te estresas demasiado – 

Cuando Valentina me dejo sola, no pude evitar pensar si de verdad me estresaba demás, tal vez debía aprovechar la ocasión y despejar la mente un rato, tenía algo rondando en mi cabeza hace un par de días, este era el momento, para sentarme y hablar conmigo misma.

El día era frio, pero agradable, ajuste mi abrigo y comencé a caminar por el lugar, estaba lleno de arboles, era otoño, así las hojas caían en el pasto, y crujían cuando las pisaba. No tenía ni la menor idea de que la familia Villegas tenía un lugar como este fuera de la cuidad.

Note que muchos de los arboles era frutales, así que debían haber sido plantados ahí a propósito, comencé a sentir el lugar más húmedo, y note algo de pasto aun verde, pronto me di cuenta de porque, había un lago. 

Este lugar era mejor de lo que yo creía, a mitad del algo había algo parecido a un quiosco desde donde yo estaba no venía como es que se podía acceder a este, así que me senté en una roca que vi cerca de la orilla, ese era un buen lugar para pensar.

Desde que inicie una relación con Joshua, comencé a darle vueltas a las ideas en mi cabeza, quería hacer algo más que solo ser una empleada de la casa de su tío, quería ser alguien que él pudiera presentar a sus amigos y su familia sin sentirse apenado, o juzgado, pero no sabía por dónde empezar, tal vez necesitaba pedir ayuda, pero ¿a quién? 

-aquí estas, te estaba buscando – casi me caigo de la roca en la que estaba cuando escuche la voz de Joshua a mis espaldas 

-me asustas – 

-tengo más de diez minutos buscándote – me respondió 

- ¿en serio? – 

-creí que te habías perdido, me estaba preocupando por ti – me dijo 

-solo disfrutaba el paisaje – 

-se que hacías más que eso – me respondió – pero como siempre no creo que digas que estas pensando – 

Me puse de pie – podemos volver, me está dando frio – respondí 

-estas cambiando de tema de nuevo – me respondió, dándose la vuelta y comenzando a caminar 

Fui tras el casi corriendo, ya que un paso suyo, eran dos míos - ¿qué pensarías de mi si decidiera volver a estudiar? -Solté de repente. Y Joshua se detuvo de manera abrupta, y se dio la vuelta

-¿¡lo dices en serio!?- 

-¿Por qué pareces tan sorprendido, crees que no puedo? – pregunte medio en broma, pero me asustaba su respuesta 

-por supuesto que puedes, solo que no creí que tu quisieras – 

-¿parezco una chica tonta? – 

-si fueras mas lista no andarías conmigo – me respondió, riéndose de mí 

-¿entonces si quiero parecer más inteligente debo terminar contigo primero? – pregunte en broma y me eche a correr, obvio me alcanzo en seguida, y me detuvo 

-ya hablemos enserio, si de verdad quieres volver a estudiar cuenta conmigo –

-quiero hacerlo, las mujeres de mi familia se han dedicado a lo mismo, desde mi abuela, sin embargo mi familia le debe mucho a los Villegas, eso me frena un poco –

-la familia Villegas también te debe mucho, ya que no pudimos protegerte, si mencionas que quieres estudiar sé que mi tío va a apoyarte, y por supuesto yo, si decides ir a la universidad, te puedo ayudar a estudiar para el examen de admisión –

-no termine la preparatoria, mi madre no creyó que fuera necesario, ella me tuvo muy joven, mi abuela no quería que yo hiciera lo mismo que mi madre, que fuera a embarazarme a los dieciséis, ella me apoyaba para que yo siguiera estudiando, pero mi abuela murió y mi madre volvió y ya no me dejo seguir, mi madre trabajo para la familia de tu tío hasta que yo estaba en la preparatoria  –

- ¿estás segura que tu madre estaba trabajando, para mi tío cuando estabas en la preparatoria? Porque yo no la recuerdo, se que tu abuela lo hizo, una vez que se retiro, se encargo de conseguir más empleadas de tu pueblo para la familia, ella creo esa agencia por la cual la familia Villegas consigue empleadas, pero no recuerdo a tu madre, ella debía haberse parecido a ti al menos un poco –

-pero la señora Giovanna me dijo que concia a mi madre, por eso me ayudo, dijo que mi madre era su aliada, en esa casa, que por eso me protegeria, por ello evito que yo fuera obligada a tener intimidad con los clientes, yo solo les hacia compañía, cosa que seguía siendo horrible  – 

-la tía se fue de la casa cuando yo tenía doce años, y recuerdo que una empleada se fue con ella, era como su mano derecha, sabía todos sus secretos, por eso la llevo consigo – 

-¿crees que esa mujer era mi madre? – 

-tal vez Damián pueda responder eso, después de todo era su casa no la mía – me respondió 

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A la hora de la cena Joshua estaba muy callado, así que pensé que no preguntaría lo que yo quería saber, y a mí me daba pena preguntar. 

-¿recuerdas esa mujer que solía trabajar en tu casa, y que era la mano derecha de tu madre? – pregunto al fin Joshua, y yo sentí que se me atoraba la comida, así que tome un poco de zumo.

-¿Quién? Silvana – respondió él, y yo quede fría, ese era el nombre de mi madre – odiaba a esa mujer le contaba todo a mi madre, me castigaron mucho por su culpa – agrego el

-¿sabes que paso con ella? – 

-se marcho con mi madre, cuando ella se fue de la casa, ¿a qué viene de repente la pregunta? Hace años que no me acordaba de ella –

-porque Silvana es mi madre – intervine yo por fin, después de todo era mi asunto, Valentina solo seguía la conversación en silencio

-¡oh! Mierda, no quise hablar mal de ella, y también lo siento por ti –

-¿Por qué? – 

-porque si esa mujer trabajo con mi madre, aun después de que esta se divorcio de mi padre, eso significa que bien podrías haber vuelto a tu pueblo antes de que te rescataramos- Damián se había puesto muy serio

-¿Por qué dices eso? – yo estaba comenzando a confundirme

–si mi madre conoció a la tuya, por lo que parece ser un buen tiempo, entonces mi madre pudo haberte sacado de ahí, desde que te reconoció, ella tenía el poder de hacerlo, pero no quiso, te necesitaba, tal vez incluso tu madre sabía dónde estabas, tengo que investigar eso – dijo Damián 

-pero, no creo que mi madre lo supiera, ella de verdad creía que yo estaba en tu casa, aunque me cuesta trabajo creer que la señora Giovanna conociera tan bien a mi madre, mi madre jamás la menciono –

- a mi madre le gusta usar a la gente para su propio beneficio, y a ti te necesitaba por lo visto, ella debió usar a Silvana hasta que ya no la necesito, eso pudo haber creado un resentimiento entre ellas –

-pero mi madre me dijo, que trabajaba para tu padre, que lo hizo todo este tiempo –

-tu madre te mintió, no la he visto desde que mis padres se divorciaron – dijo Damián

 Valentina que hasta ahora había estado en silenció, se puso de pie – basta ya Damián, ya fue suficiente –

-a veces es necesario saber la verdad cariño – respondió el, también poniéndose de pie y saliendo del comedor, Valentina fue tras el.  

Yo no soporte mas estar ahí y salí corriendo, en cuanto llegue al exterior, me senté e intente, tomar aire, de repente sentí una mano sobre mi hombro, levante la vista y ahí estaba Joshua, no dijo nada, solo se quedo ahí, pero de algún manera su presencia me hizo sentir mejor, algo en mi sabía que si él se quedaba conmigo todo iba a estar bien. 

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