-¿tienes algo que decir? –
Mire a mis hermanos y a mi padre con cara de póker, no funcionas en este negocio si no sabes poner una cara que no refleje emoción alguna
-¿respecto a qué? – pregunte fingiendo estar aburrido
-respecto a tu esposa –
-¿Qué hay de mi esposa? – esto lo dije con cierto tono de amenaza
-¿vas a dejar que se inmiscuya en la crianza de Dionisio? – Dimitri me miro molesto, por que el niño en cuestión no había dejado de seguir a Valentina desde que llegaron
-¿era eso? –Respondí restándole importancia al asunto – creí que te referías a los otro –
-¿Qué otro? – Pregunto mi padre -¿pasa algo con mi nuera? Más vale que me lo digas si así es –
-nada malo viejo relájate –
-¿estás seguro? – Dijo Dominic – yo la veo muy desmejorada últimamente, hace mucho que no baja a cenar con nosotros –
-solo está un poco estresada por el asunto de la boda, y está buscando opciones de empleo –
-¿estás diciendo que mi preciada nuera va a trabajar? – mi padre no parecía feliz con eso
-y tú estás diciendo, que creías que con todo lo que estudio se quedaría de ama de casa, me sorprende que seas tan anticuado, bueno la verdad no – mi padre me fulmino con la mirada
-¿a todo esto cuando será la boda, ya tienen fecha? – quiso saber Dominic
-hasta agosto o septiembre del próximo año, no lo sé, aun no me decido -
-¿Qué tonterías estás diciendo? Habíamos quedado con tu suegra que la boda seria en la primavera del año próximo, en marzo o abril –
-pues no se va a poder hubo un cambio de planes –
-te dije que no intervinieras y metieras tus ideas en la cabeza de tu esposa, sé que no quieres esta boda, pero lo prometiste, y los Villegas siempre cumplen sus promesas –
-lo prometí, si, pero no dije cuando – respondí, encogiéndome de hombros
Mi padre estaba tan molesto que levanto su bastón, aunque podía quitarme no lo hice, eso solo lo enfadaría más, así que solo cerré los ojos y espere el golpe.
-¡suegro! – exclamo Valentina, y mi padre se detuvo a medio camino
-¿Qué haces aquí hija? – le dijo papá
-no puedo permitir que golpee a mi esposo, por mucho que se lo merezca –
-cariño, mejor no me defiendas – le pedí
-fui yo la que decidió cambiar la fecha de la boda – respondió Val, y mi padre la miro confundido
-me podrías explicar porque –
-por el momento no puedo decírselo, pero pronto lo aremos, y espero que usted apoye nuestra decisión en cuanto lo sepa –
-¿es una razón lo suficientemente poderosa? – le pregunto mi padre
-lo es – respondió ella con firmeza, mientras tomaba mi mano – ahora si me permiten me llevo a mi marido –
-me llenas de orgullo, cariño – le dije al salir de la oficina
-no puedo dejar que mi futuro hijo se quede sin padre, además tendrás que lidiar con mamá primero –
-prefiero los bastonazos de mi padre, y permanecer el día de rodillas, que lidiar con tu madre –
-tendremos que hacerlo, ella vendrá mañana, para la prueba de vestido, estoy cerca de las seis semanas, he subido un poco de peso, pronto ya no podre ocultarlo, mañana será el momento de decirlo, además creo que Estela, o ya lo sospecha o ya lo sabe, por que parece estar evitándome, desde que ingreso a la universidad –
-mañana será mi funeral entonces, fue un placer ser tu marido mientras duro – Valentina me regalo un preciosa sonrisa
-te prohíbo morir mañana, no seré una viuda joven, y tampoco quiero ser una madre soltera, tendré que volver a casarme si mueres – bromeo conmigo
-eso jamás, tu único marido en esta vida seré yo, si quieres volver a casarte será conmigo –
-ustedes me empalagan – dijo Joshua que venía llegando -¿Cómo está el bebé? – pregunto, el único que sabía de todo esto en mi familia, era él, y eso se lo conté porque necesitaba que me ayudara a cuidar a Val, de que esta familia no la estresara demasiado, cosa que sabía que a Caleb no le haría mucha gracia cuando los supiera.
-va muy bien, gracias por preguntar, ahora si me lo permiten voy a la cocina –
-mas te vale que no vayas de nuevo por helado, has comido mucho estos días – le advertí
-no soy yo la que quiere helado, alguien más lo pide – me respondió
-voy a decirles que te prohíban entrar a la cocina, o que dejen de comprar helado – le respondí
-si haces eso te voy a acusar con tu papá – me respondió y se fue rumbo a la cocina
-mi más sentido pésame para ti – me dijo Caleb, dándome golpecitos en el hombro, yo le lance una patada, pero él se alcanzo a quitar mientras se reía.
...****************...
Al día siguiente...
No sé cuánto tiempo estuve dentro de mi auto tomando valor antes de atreverme a bajar y entrar al interior de la casa, después de mucho me encontraría con Dimitri de nuevo. Al entrar lo primero vi fue a Joshua ayudando a Ivana con una caja enorme, ella iba tras el intentando que se la diera, mientras él se negaba, ellos no me vieron, y yo no pude saber de que hablaban.
Estaba tan distraída que no note a nadie más, hasta que algo choco con mis piernas, o más bien alguien, baje la mirada, y me quede helada, yo conocía a este niño.
-perdón señora – me dijo, y retrocedió sobando su cabeza
-te he dicho que no corras por los pasillos – levante la vista cuando reconocí esa voz
Dimitri también se detuvo al verme – ve a tu habitación – le dijo al niño, este solo asintió y se fue, hacia el mismo lugar que Joshua e Ivana se habían ido antes, esta casa era tan grande que no tenia de cuantas habitaciones tenia
-¿Cómo sigue tu espalda? – me pregunto
-mucho mejor – respondí, no sabía hacia dónde mirar, Val me conto lo de Vania, pero no pensé que me sorprendería tanto ver al hijo de esa mujer aquí
-me imagino que vienes a ver a mi cuñada- yo solo asentí
-ella está con su ruidosa madre por ahí, en algún lugar de esta casa – respondió, y comenzó a caminar en busca del niño al parecer
-Dimitri espera, tengo que hacerte una pregunta –
-dime –
-¿Cuándo estaba en el hospital, fuiste a verme? –
-¿cambiaria algo las cosas entre nosotros si te digo que si? –
-debería ¿o no? – estaba un poco asustada por su respuesta
-eso fue antes, ahora las cosas son diferentes, no soy un hombre sin compromisos, así que me mejor dejémoslo así –
-¿tan fácil te rindes? –
-tú te rendiste primero ¿o ya se te olvido? – Dimitri se fue y me dejo sola en el vestíbulo, sus palabras fueron como un balde de agua fría, pero tenía razón, además yo no sabía si podría tener algo más formal con un hombre que ya tiene un hijo, así que ya no hice un intento por detenerlo.
***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***
Updated 60 Episodes
Comments