¿Estoy loco?.

Jacob.

Toda esta situación me ha dejado sumamente estresado, no puedo permitir que mis hoteles se vean envueltos en ningún tipo de controversia. Mientras voy en el auto, recibo una llamada de Jack.

- ¿Qué pasa? ~contesto de golpe~

- Señor, el fotógrafo que contraté para usted dejo unas últimas fotos, ¿Quiere que se las mando?.

- No ~digo decidido~ ¿Por qué las querría?. No me interesa saber que hace o no, realmente fue un error desde el principio. Ya sabes que solo quiero cogérmela, me vale madres si tiene novio, después de lo sucedido; no la veré más.

- ¿Está seguro de eso, señor? ~sé que no me cree lo que le digo~ Bueno, en ese caso, no creo que le importe si quemo las fotos verdad.

Seré yo muy curioso y recién me estoy dando cuenta, hay algo en mi interior que sí quiere saber de ella, que si quiere ver esas malditas fotos.

- ¡Espera! ~titubeo un poco~ Quizás... Sí quiera verlas ~maldito seas Jack~

Jack, aunque nunca me ha reprochado nada de lo que hago, siempre ha querido que asiente cabeza con una buena mujer, espera con ansias verme en el altar casando y después teniendo una familia, hasta parece a Lían todo el tiempo. Lo curioso de todo es que nunca se había molestado con que supiera de la vida de las chicas con las que me he acostado, Incluso, llegó a "regañarme" por lo patán que he sido con ella. Me estoy empezando a cuestionar si Jack sabe algo que yo no porque no entiendo porqué le gusta la dea de que pase algo más con Kathering.

- Lo sabía ~dice con suficiencia~

Sin colgar la llamada, me manda un mensaje con las fotos. Al parecer estás se tomaron después de las que ya me habían mandado antes a la misma hora, no sé porqué el hombre que trabaja para mí, no me las había mostrado en el avión.

Si antes estaba enojado, no sé que nombre darle a lo que siento en estos momentos, impotencia, es justo lo que siento, pero está vez se siente algo más extraño dentro de mí, siento que mi pecho arde y que las venas de mi cuello y la de mi frente van a explotar. En este momento no dudo de que estoy tan rojo que siento mi cuerpo caliente, y no precisamente de excitación.

- Es... ¿Es su casa? ~no he querido decirlo tan fuerte porque quizás estoy equivocado~

- Sí, efectivamente es su casa y está es la hora en la que el chico no ha salido ~dice con tanta tranquilidad que hasta parce que disfruta ese hecho~

Miro la hora y apenas son las 7:10 pm. No creo que vaya a pasar la noche en su casa... ¿Verdad?.

~ ¡¿Cómo que no ha salido de su casa?! ~creo que grité más fuerte de lo que soy consiente, porque el hombre que está manejando brinca un poco sobre el asiento y mira fugazmente por el retrovisor~

- Pensé que no te importaba, Jacob ~ríe bajito~

- No me jodas, Jack ~en este momento estoy odiando estar aquí en LA~ Tienes que hacer algo, no sé, irrumpe en su casa y secuestrala hasta que yo vuelva.

- ¿Estás loco?, no voy a hacer eso, tú solo te la quieres coger y pues no estás aquí, así que no sé para qué quieres que la tenga retenida hasta que regreses ~me imagino la expresión que tiene en este momento mientras me dice eso y de verdad quiero partirle la cara~

- Jack, no me tientes, se supone que debes aceptar exactamente lo que te digo ~hablo entre dientes tratando de sonar calmado~ Has algo para que ese imbécil salga de su casa, ahora.

- No voy a dañarle el polvo, no soy tan malo ~estoy apretando tan fuerte el celular que creo estar a punto de dañarlo~ A demás, tú solo la quieres para una noche, así que ella puede cogerse en su casa a quien quiere, ni siquiera es como que tenga un acuerdo. Adiós.

Jack me cuelga antes de que pueda responder. Estoy que parto el celular en las manos. Cómo se atreve a llevar un hombre a su casa, bueno, ni siquiera sé porqué estoy así, cómo dice Jack, no es como que tengamos un acuerdo o algo que le prohíba estar con otros hombres, eso me desespera y hace que me pregunte que estarán haciendo en este momento.

Llegó al hotel y antes de entrar me dirijo a mis hombres. Les digo que pueden ir a descansar si quieren o lo que sea, ya que no saldré más del hotel. Me dirijo al bar y el chico que atiende se acerca.

- Señor, con todo el respeto, por su cara parece que hubiese descubierto una o fidelidad ~no estoy de humor, pero debido a que trato de tener una relación decente con el personal de mis hoteles, me abstengo de callarle la boca de mala gana~

- No exactamente ~digo muy serios~ Dame un whisky ~el chico asiente y me lo sirve. De un solo sorbo me lo bebo~ Dame otro.

- ¿Quisiera hablar al respecto, señor? ~pregunta mientras me sirve otro~

- No ~digo de manera cortante~

- Bueno, usted es un hombre muy exitoso. Desde muy joven puedo llevar las riendas del hotel y ahora lo ha vuelto una cadena, tiene dinero y las mujeres se mueren porque se las lleve a la cama, creo ~agrega alzándose de hombros~ No creo que tenga porque sufrir por una mujer.

Me le quedó viendo un rato. Este chico no parece ni de 25.

- ¿Cómo te llamas y cuántos años tienes? ~lo miro fijo~

- Me llamo Jhonatan, señor, y tengo 20 años ~como creí, bastante joven~ Quizás crea que aún me falta mucho y que no tengo idea de lo que habló ~se alza de hombros, nuevamente~

- Es cierto, no tienes idea de lo que hablas ~me quedo en silencio mirando el vaso de whisky~ No es una infidelidad, bueno, está con alguien en su casa en estos momentos, pero ni siquiera somos nada ~hablo sin pensar~

- ¡Oh...! Ya veo, no hay nada entre ustedes, pero a usted le duele verla con alguien más ~sonríe confiado, pero yo frunzo el ceño~

- Por supuesto que no, es... ~ni siquiera sé qué decir~

- De pronto se le haga difícil esto de las relaciones, pero es evidente que le gusta la mujer de la que habla ~yo a punto de llevarme el vaso a la boca, me detengo, lo miro por unos segundos pero este parece muy confiado de lo que dice~

- Definitivamente no sabes de lo que hablas ~sigo mirando el vaso~ ¿Quién eres tú? ~lo miro fijamente~

- Bueno, soy una persona muy, pero muy común. Vivo con mi madre y tuve que dejar la universidad porque se le hacía muy difícil a ella pagarla. Aquí ganó muy bien, pero no puedo pagar la universidad y los gastos de la casa al mismo tiempo ~parece como si eso no le afectara~

- ¿Y tu madre por qué no trabaja? ~alzo una ceja~

- Tiene problemas con su salud, quizás pueda trabajar por un tiempo, pero al final siempre tiene que salirse del trabajo.

No sé que pasá, pero desde que conocí a Kathe, me siento más humano. Es irónico, me siento más humano con todos menos con ella. Recuerdo mi promesa de no volverme a enamorar de ninguna mujer, y actuar así con ella, deja de afectarme. Nadie me asegura que no va a hacer igual, así que prefiero mantenerme al margen con ese tema de los sentimientos. De una me tomo el trago y me paro decido a irme.

Estoy listo para dejar el bar del hotel, pero me detengo en mis pasos y retroceso unos cuantos, lo miro seriamente y este parce que está pensando que se ha equivocado en algo.

- Apartir de hoy tu sueldo se triplica ~trato de decirlo lo más frío y cortante que puedo, no quiero que piense que por esto ya nos volveremos mejores amigos y que vendré a contarle mis cosas o que puede venir a llorar conmigo~

Me voy sin esperar respuesta, no quiero oír tampoco los mojes de agradecimientos o ver cómo empiezan a llorar de emoción, eso me pone incómodo.

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***