Cálmate niña

Ese día había resultado caótico para todos. Reconstruir los espacios derrumbaos había agotado la fuerza de muchos ayudantes he instructores. Algún que otro novato voluntario se había ofrecido pero no bastaba. La noche se avecinaba y más de una de las habitaciones se habían vuelto tan heladas como el rocío de la noche. Las duchas, luego de aquel episodio con Lilit, habían sido inhabilitadas.

_ ¡Señorita Génesis, venga de inmediato! Esto es muy urgente

Ver la desesperación del instructor era alarmante. Lo primero que había cruzado por mi cabeza fue aquel rebelde que se había colado en el instituto. Si alguien me llamaba era porque nadie más podría revertirlo.

El agua fría de la regadera seguía corriendo y dispersaba un poco aquel terrible escenario.

Sus gritos, su llanto y como intentaba seguir rasgando su cuello no lo había visto en mi vida. La asistente que cuidaba de ella luchaba por mantener sus manos alejadas de su cuello, pues su intento de autolesionarse era continuo. En aquel piso mojando, pude distinguir su sangre y restos de su piel pellizcados y arrancados esparcidos ante la lucha de ambas.

Rápidamente, la llegada de los demás sirvió para inmovilizarla y hacer mi trabajo. Sin perder tiempo, coloque mis manos en su cuello aún herido. Pude ver la profundidad de su lesión al punto de notar como parte de su respiración se perdía entre sus venas. Observé su mirada perdida, era como si aquella joven no estuviese entre nosotros. Bendito sea en momento que se decidió contratar desquiciados para la Guardia Civil...

Mantener la concentración era un tanto difícil mientras debía tener calma ante esta muchacha que deseaba quitarse la vida. ¿Pero qué la llevó a cometer tal acción?

Sin fuerzas, el silencio y la calma habían llegado de repente. Sus ojos habían caído en un sueño profundo una vez curado su dolor. Débil e indefensa caía entre mis brazos sin señal de mover un solo dedo. Sus manos pronto recuperaría las uñas que había perdido y sus cicatrices era cuestión de tiempo para que desaparezcan.

Mi ropa teñida de rojo debía ser cambiada. Pero deseaba interrogar a su cuidadora.

_ Se lo juro Doctora. La joven comenzó a lastimarse sola. Nada ni nadie intervino.

_ Entonces ¿Por qué gritaba que no la tocaran?

_ ¡Nadie le puso un dedo encima! Se lo aseguro. Puede preguntarle a las dos novatas que estaba con ella en la ducha.

No debía dudar de la cuidadora que más prestigio tenía aquí. No podía mentirme o rápidamente lo notaría. Muchos años llevamos trabajando juntas y ya se hasta lo que piensa.

Por la tarde debía entregar el informe de Lilit al Director Samuel para explicarle aquel altercado y ver que medidas se debían tomar a partir de ahora. Claramente, no será de su agrado saber que una novata intento quitarse la vida. Pero solo él tendría la responsabilidad de tomar la última decisión.

_ ¿Has indagado con todos qué fue lo que sucedió?

_ Así es Director.

_ ¿Y su condición cómo esta?

_ Estable. Todavía no ha despertado. Pero tomamos las medidas necesarias para que no vuelva a lastimarse.

El Director Samuel siempre fue un hombre perspicaz e intuitivo. Supongo que las circunstancias de la vida lo llevaron a convertirse quien es hoy día. Creía en que tomaría la decisión más sabia.

_ Directora Génesis. Usted se hará cargo de esta joven y será responsable de cada cosa que haga.

_ ¡Pero Director yo no..!

_ Se que lo harás bien. Y también estoy al tanto de que esta no es tu área ni especialidad, pero en este momento necesito de tus habilidades e inteligencia para guiar a esta muchacha. Sé que será de gran ayuda tenerla con nosotros. No dejemos que se nos escape de las manos.

Rara vez lo había visto tan interesado en alguien. Pero no debía defraudar al único hombre que puso su confianza en mi todos estos años.

A cada hora volvía a aquella habitación para controlar sus signos vitales. En una cama con sus pies y muñecas amarradas, como cuál sicario desquiciado. No me pareció amenazante, más bien era por su propia seguridad.

Tome mi tiempo para juntar muestras de su ADN y así indagar sobre su historial. Alguna compatibilidad debería encontrarse en los archivos. Pero nada coincidía con su perfil. Más bien no existía señal de su pasado ni familiares relacionados. ¿Cómo era posible que escapara de este tipo de control? Algo no me convencía del todo. Observé el historial del Dr. Gabriel y allí solo encontré más dudas que respuestas.

Volví a tomar más muestras de ADN y esta vez busqué en los archivos generales. Lo que encontré fue aún más extraño. Veinticinco años y era clasificada todavía como humana no dotada. Que surrealista. Algo no andaba bien. ¿Cómo pudo esta joven obtener un don? ¿Y que don es el que porta? Cada minuto que pasaba con ella despertaba aún más mi curiosidad. Pensé que la tarea que me había asignado el Director Samuel había sido aleatoria pero ahora se que la indicada en averiguar esto era yo. Al fin y al cabo resultamos ser idénticas.

Aquel pequeño gato me asusto cuando salto sobre mi regazo y se acurrucó descaradamente.

_ Le agradas.

Sus palabras me habían puesto los pelos de punta. ¿Hacía cuanto tiempo estaba despierta?

_ Baell es muy suspicaz con las personas. Ver que se comporta así con alguien es de extrañar.

Me sorprende ver como dio un giro de ciento ochenta grados su personalidad. No hace mucho intentó quitarse la vida y ahora...

_ ¿Cómo te sientes?

_ Lo de antes... pude recordar algo que había olvidado.

_ Tú, ¿Me podrías contar que recordaste? No quiero incomodar, es solo que quisiera ayudarte.

_ Jajaja bueno. Pude recordar sobre mi infancia. Como aquel maldito pervertido se quiso aprovechar de mi en la ducha.

_ ¿A quién te refieres?

_ El cuidador de mi orfanato... Recuerdo... haber tenido muchos padres y madres pero todos me llevaban de regreso allí.

_ ¿Qué sucedió con él cuidador que mencionaste?

Note en su mirada triste algo en lo profundo que la hería. Pero su rostro dibujaba una gran sonrisa siniestra.

_ Me lo comí.

No podía ser cierto. Era broma ¿verdad? Pero podía ser la explicación del porqué se desgarro la garganta. Todo aquello habrá traumado a la pobre al punto de borrarlo de su memoria.

_ ¿Qué ... qué ocurrió luego de aquello?

_ Luego... yo... todo empeoró. Pero no recuerdo con claridad. Es todo muy confuso.

Note el malestar que sentía debido a la sobre exigencia que hacía con su memoria. De inmediato la detuve. Forzarla no sería de ayuda. Mucho menos en el estado en el que estaba ahora.

_ Lamento lo que te sucedió. Lo que ocurrió nunca fue tu culpa. Tú solo te defendiste.

La mirada en sus ojos reflejaba toda aquella angustia que llevaba guardada por tanto tiempo. Las lágrimas cayeron sin parar mientras que su gato la acompañaba en su angustia.

Deseaba liberar sus manos y pies para poder desahogarse pero el protocolo me lo impedían... Al diablo el protocolo...

Uno a uno libere sus manos y la rodee con mis brazos. Pobre niña. Solo necesitaba alguien que la entendiera.

_ No me toques...

De inmediato me alejé.

_ No necesito tu lástima. ¿Acaso no lo entiendes verdad? Tu débil corazón aún no lo entiende jajaja snf. Lo mate porque así lo deseaba. Devorar su cuello no fue porque fue en defensa propia. Fue porque me agrado ver su rostro aterrado. Oír como luchaba por tomar un poco de aliento y como se ahogaba en su propia sangre. El sabor de miedo en mi boca y la textura de su carne entre mis dientes me excito demasiado. Por eso fue que continúe. Lo que ocurrió luego no estaba en mis planes, pero valió cada maldito segundo.

Lo que tenía frente mío no era un monstruo, era una joven que había perdido la cabeza debido a la vida que le había tocado vivir. Una desquiciada y sádica muchacha. Una niña que buscaba venganza y ver a quienes le habían hecho daño sufrir tanto como ella sufrió por sus acciones. Lo entendía perfectamente. ¿Pero como debería actuar con ella y evitar que pierda la cabeza nuevamente?

_ Debo amarrarte nuevamente o tendremos problemas las dos.

_ ¿Y qué si no quiero? _ Me dijo mientras probaba mi nerviosismo.

Claramente no se que tan peligrosa pueda llegar a ser. Pero no puedo correr el riesgo con ella. Debo ser indiferente ante sus amenazas.

_ Vasta de juegos. Entre que más pronto te recuperes y colabores, más rápido volverás con el resto.

_ Y... ¿Qué debería hacer para salir de aquí? No me gusta esta posición. Corro en gran desventaja ¿Sabes?

_ Bueno... para empezar, yo seré tu instructora y guía en todo el periodo de prueba, así que prácticamente serás mi estudiante. A partir de hoy estarás a mi lado como ayudante y deberás aprender absolutamente todas mis habilidades y así iremos descubriendo acerca de tu don y tus límites. Por cierto, solamente te enseñaré técnicas evasivas y de defensa así que acostúmbrate.

_ Sin peleas... Bien. Creí que sería mucho peor. Aunque un tanto aburrido.

_ ¿Dices que soy aburrida?

_ Bueno. Eso dependerá de ti. Jaja.

Vaya muchacha más descarada. No soy tonta. Se a donde va ese comentario. Y espero que aprendas en este tiempo a mirar mis ojos cuando te hable y no mi busto, ya cálmate niña...

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***