Capitulo 16.

Viaje parte 1.

A la fuerza me adentra a su Audi rojo, colocándome el cinturón, y él nota que mi mal humor desaparece en un segundo, sólo me mira raro y cierra la puerta.

En realidad yo hice esto para que la chica supiera que si yo quería lo tenía, de mi nadie se burla.

-Eres una diabla- Me habla Christopher subiéndose al auto.

-¿Yo?, jajaja por favor sólo me gustó verle su cara llena de celos.

-¿Cómo la tuya?- Suelta una carcajada, descubriendome.

-Muy gracioso- Le digo dándole en el brazo.

Arranca el auto con una sonrisa de oreja a oreja, sabia que por dentro le gustaba hacerme cabrear. Durante el hermoso camino, vaya que fue un excelente guía turísrico, me explicó como fué que compró este precioso lugar, la historia de aqui y sus distintas costumbres.

Llegos a un muelle en donde nos espera una lancha para poder cruzar a su isla, senti la brisa fresca en mi dermis, el sol estaba en su punto más resplandeciente haciendo un atardecer espectacular, pero en realidad yo no paraba de mirar a Christopher, era tan diferente al de días pasados era alguien más relajado y amigable.

Llegamos a su finca, de verdad que era el lugar más bonito del mundo, tenía un toque hogareño y cálido, no lo se...sentí tan raro al estar ahi. (Imágenes de la finca en el apartado de colecciones en tiktok).

-Has estado mirando la casa con la boca abierta por 2 horas- Me saca Christopher de mis pensamientos.

-Es que de verdad me encanta tu lugar- Respondo sincera.

-Ya me di cuenta, anda ven te muestro el interior- Me guia hacia adentro.

Pero se para en seco cuando mira su celular.

-Tendrá que esperar el recorrido, tengo que salir, si quieres que nana te atienda le hablo y...- lo corto.

-Espera, ¿¡qué!?, no te puedes ir, acabamos de llegar- Le digo deteniéndolo.

-Nadie mencionó que eran vacaciones Emily, te veo después.

Sólo lo miro marcharse de nuevo, asi que yo sóla recorro todo el lugar, llegándo a la habitación que daba una linda vista al mar, reviso el guardaropa encontrándome con diferentes prendas bellisimas, todas con etiqueta, tal vez él mandó pedir todo esto para mi, y no sólo ropa, maquillaje, secadoras, calzado y más cosas.

Bajo y tomo uno de los libros de la estantería, una manta y una copa de vino, junto a la alberca hay una amaca, asi que ahi decido estar un rato disfrutando este momento que me brindó la vida, transportándome a otro mundo mediante un increíble libro...

Pasaban las horas y me di cuenta que ya había anochecido, me levanto dirigiéndome a la cocina, decidí preparar una rica pasta Italiana, esperaba que a él le gustara esto, tal vez por lo ocupado no comería.

Lo más divertido fué hacerle el postre, unos deliciosos cannolis, había visto toda mi vida el programa de Cake Boss, me sabia la receta de Buddy al derecho y al revés ¿no podían salir mal?, traté de mantener mi mente ocupada pero cada segundo que pasaba, recordaba los besos de Christopher ni en mis más locos sueños pensé que iba a besar a mi secuestrador, ja, pero que bien lo hacia el desgraciado.

Termino de cocinar pero de tanto preparar cosas y estar probando, terminé satisfecha. Ya era muy noche y aún él no regresaba, asi que dejo una nota en la nevera "Hay comida servida dentro del horno, sólo caliéntala. Buenas noches:)".

Asi que me voy a la habitación, sólo lavo mi cuerpo y me coloco una bata de seda color lila para dormir, cayéndo en un sueño profundo.

Los dos días siguientes parecían la misma rutina, preparaba la cena y almuerzo para Christopher, sólo llegaba a dormir ¿cómo me daba cuenta?, en las madrugadas el me abrazaba mientras dormia y claramente yo a él, amanecía con una cama vacía pero tenía la tranquilidad de que había llegado a dormir.

Mis comidas, todas las devoraba y dejaba una nota que decía "Delicioso".

La tarde era hermosa, el naranja del cielo iluminaba la casa de una forma espectacular, asi que hoy disfrutaré de la alberca que pedía a gritos ser usada.

Entre miles, escojo un bikini blanco de dos piezas, no dejaba mucho a la imaginación pero me sentía espectacularmente sexy, aplico un poco de protector solar y dejo mi cabello suelto y lacio. Bajo por las escaleras y me encuentro con Christopher el cuál no deja de mirarme.

-Ya deja de babear- Le bromeo, pero se acerca peligrosamente a mi.

-No lo hago, pero a ti te encanta tentar al diablo- Me susurra en mis labios.

-Yo no tengo por qué negartelo, estos días has trabajado demasiado, ¿te gustaría un masaje?- Le vuelvo a provocar.

-Suena bien, te veo en la alberca- Me dice alejándose para subir a la habitación.

Lo espero afuera, y minutos después lo miro salir con un short blanco y su increíble torso desnudo, el era un ser fuera de este mundo.

-Ya deja de babear- Me dice el sangrón.

-Jajajaja, sólo acuestate en el camastro.

Lo hace, me subo en él tomándolo por sus firmes glúteos, él recuesta su rostro sobre sus brazos relajándose. Tomo un poco de aceite y lo voy poniendo en su espalda bien trabajada, hago lentamente el masaje de arriba hacia abajo.

-¿Si está resultando?- le pregunto al oido.

-Si pero...-Se da la la vuelta, quedando boca arriba, rozando su gran bulto en mi -asi me gusta más.

-Eres bien trampas, el masaje era en tu espalda- Le digo algo nerviosa.

-No creo que te moleste tocar mi pecho.

Asi que pongo un poco más de aceite, masajéandolo lentamente, bajo hasta su pélvis y subo hasta su cuello, durante esto no rompemos el contacto visual, él solo le toca los muslos pero sube sus manos hasta mis caderas pegándome más a él, y ya no aguantámos más, nos fundimos en un increíble beso apasionado, de verdad lo deseaba tanto pero no quería dar el primer paso.

Me acuesto sobre él, aún teniendo mis piernas de lado a lado en su cadera, toma mis glúteos con firmeza, guiándome para que me mueva encima de él <>, nos besamos con desesperación y se voltea quedándo sobre mi, abre mis piernas y las enrollo alrededor de él, sintiéndo nuevamente como pega su miembro en mi. Deja de besarme, dejando un camino de besos húmedos desde mi cuello hasta mi pecho

-Oh Christopher- Se me sale un gemido ahogado que lo vuelve loco.

Hace a un lado una de las copas de mi sostén, prendiéndose de mi pezón haciendome sentir en la cima, me levanta en brazos, todo iba bien hasta que...se tira conmigo a la alberca.

-¿¡Por qué haces eso!?- Le suelto cabreada y él se acerca a mi.

-Es mejor asi, después lo entenderás. Ahora déjame disfrutar del agua- Me dice cerrándo sus ojos recostándose a la orilla.

-Eres un bipolar- Le digo saliendo de la alberca, cabreadisima por cierto.

Subo a la habitación, me ducho y me coloco otra bata para dormir, hoy no lo quería ver, asi que me cubro de pies a cabeza con la sábana, quedándome dormida.

Despierto por la madrugada, encontrándome con Christopher durmiéndo placidamente abrazado de mi cintura, me doy la vuelta para verlo mejor, era tan guapo...no se por que me enojé con él hace rato, tenia razón yo esperaba más pero no podría tener sexo con alguien que apenas y conozco, aparte mi captor...

Sólo disfrutaría de su compañía, antes de que se convirtiera en el ser temido que era.

Eran esos momentos que ni siquiera pasé con mi familia.

❥ Gracias siempre, MaxCaos.

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