Capitulo 14.

Anuncio antes de empezar.

Este capitulo incluye escenas para personas mayores de 18 años, se encontrarán con lenguaje fuerte, violencia etc. Si eres sensible a estos datos, por favor abandona la lectura.❗

-No sabia que el tenía un hermano- Le respondo sincera.

-No, nadie lo sabe, Emily necesito que te cambies para irnos ya- Me ordena.

-Claro, en un momento.

-Emily...Christopher me pidió que te colocaras este tactico chaleco antibalas, es uno de los mejores y te mandó advertir que no te lo quites- Me dice sacándo un grandioso chaleco, de color negro.

-No hay problema, en 15 minuros te veré afuera.

Rápidamente voy y me visto con mi pantalón táctico negro, una blusa manga larga, al igual una sudadera deportiva negra, encima me coloco ese chaleco a mi medida, igual unos guantes medio dedo tácticas, no podían faltar las armas y mis navajas en mi muslo, un toque de maquillaje para no verme tan desvelada, dejo mi cabello suelto, veo el collar que me regaló Christopher anoche, asi que me lo pongo, acariciándo el corazón...cierro mis ojos recordando lo sucedido, pero la realidad me golpea, tomo mi ultimax 100 y me dirijo para afuera de la mansión.

-Estoy lista- Le digo al hermano, saliendo de ahí.

-¿Hasta para pelear luces arreglada?- Me bromea.

-Jajaja por favor, hay que morir con estilo.

Le digo y él suelta una carcajada, al menos era un poco más agradable que Christopher. Subimos a la camioneta y partimos a toda velocidad, y aún no se a dónde.

-¿Irémos sólo a recoger la mercancía?, disculpa pero no me has explicado nada- Lo cuestiono.

-No se han vuelto a ver árabes por aqui, por si te lo preguntabas, uno de los Lombardi nos deben una buena pasta de dinero, nosotros le dimos de nuestra nueva cocaína y no pagó, verémos que pretexto ponen ahora, irémos a Roma.

-Espera, los Lombardi ¿no son aliados a ustedes?.

-No, nosotros somos Lombardo, estamos por mucho arriba de ellos, nisiquiera tienen los suficientes para meterse con nosotros, son más conocidos, pero no saben hacer negocios ni nada, se creen "malos" pero el verdadero diablo es Christopher el lider de líderes.

-Vaya, nunca pensé que fueran asi las cosas, él es muy peligroso...

-He visto como lo miras- Me dice él.

-¿Hay una forma?- Le respondo nerviosa.

-Si, no pensé que existíera un ser que se enamorara del demonio.

-No lo estoy, eso es lo único que diré...

Le digo bastante seria, no quería tocar ese tema, asi que me volteo viendo el camino, pero en mi cabeza no dejaba de rondar el...¿podría yo sentir algo por él?, no, Christopher no quiere ni a su sombra, tengo que hacerme a la idea de que su objetivo es sólo matarme, haciéndome sufrir, pero cuando se porta diferente conmigo es como si fueramos dos personas distintas tratándose de conquistar...anoche, sentí a un Christopher diferente, me tocaba...de una manera tierna.

Bastantes horas incómodas después, hemos llegado a la hermosa Roma, nunca había venido para acá, siempre lo deseaba pero no en estas condiciones.

-A unos cuantos metros está la mansión de Massimo Lombardi, es padre de dos niñas una de 14 y otra de 17, casado con Emma de Lombardi, nos pidió más de 20 toneladas de cocaína y no pagó un sólo euro- Rompe el silencio.

-Entendido, ¿qué haremos si no tiene el dinero?.

-¿Has desmembrado gente?- Me pregunta de lo más normal.

-¿¡Qué!?.

-Es broma, lo llevaremos hacia la mansión, Christopher sabrá que hacer con él, te encargarás de sus hombres, si las mujeres se ponen difíciles, te las cargas.

-¿Acaso no tienes familia?- Le digo tratándo de haciéndolo recapacitar.

-Si, estoy casado, me gustaría decir que felizmente pero no. Emily el mundo de la mafia es asi, nunca sabes si regresarás a casa...

Joder, tenía razón en lo que decía.

-Prepárate Emily, ojos por dónde quiera.

El portón de la mansión se abre, varios hombres armados caminan alrededor de esta, nosotros avanzamos hasta la casa cargando nuestras armas, preparándonos para lo peor.

-Es hora de bajar, primera bala y les vuelas la cabeza a todos- Me ordena.

Bajamos y todos nos miran, algunos ya deben saber de parte de quienes venimos, no creo que sean tan tontos para intentar algo.

Asi que veo como este hombre abre la puerta como si nada y entra de inmediato, asi que lo sigo.

-Vaya vaya, ¿a quién tenemos aqui?, buenas tardes Massimo, por tu cara no esperabas nuestra visita.

Y tenía razón, el hombre se veía cagado de miedo.

-Déjame explicarte mira...-Lo interrumpe Nick (hermano de Christopher) desenfundando su arma y apuntándole.

-No tienes el dinero, ¿no es asi?, verémos que dice el jefe.

La esposa sale corriendo por las escaleras, junto a sus hijas. Nick niega con la cabeza diciendome que no vaya tras de ellas.

-Llevense a mi hija de 17 años, ya casi es mayor de edad, al diablo le gustará- Suplica sollozando Massimo.

-Que asco de hombre- Le digo yo.

Me asomo por la ventana viendo como los hombres vienen corriendo hacia la mansión, y suena el primera balazo.

Asi que rompo una ventana sacando mi arma y desato el infierno, me cargo a la mayoría de ellos, otros corren hacia atrás de la casa.

-Nick, necesito ayuda- Le grito.

El amarra a Massimo, para asi poder ayudarme con los que venían por detrás, otro se logra colar a la casa asi que gustosa lo recibo moliéndolo a golpes, pero él no se quedó con la suya y yo recibí mi parte, subo las escaleras a todo lo que da, entrándo a una habitación sacándo el francotirador, por el miralejos veo dos camionetas dirigirse aqui, eran de los nuestros, al parecer Nick pidió refuerzos.

Sigo en lo mio y tumbo a cada uno de los francotiradores.

Pego mi frente al arma y <>.

Bajo viendo como Nick desata al hombre, y lo lleva afuera.

-¿Todo bien Emily?.

-Si, ya vienen los demás- Le digo desde la puerta.

-¿Los demás?, yo no pedí a nadie.

-¿Qué?.

Detrás de mi escucho un grito y después un golpe detrás de mi rodilla, no me jodas era la loca esposa de massimo, se me tira encima queriendome pegar con un secador de cabello, asi que no me dejo y las dos nos pegamos un tremendo agarre, hasta que siento que toman del cabello y eran las dos mocosas, no puedo creer qje vaya a pelear con dos adolescentas.

Mientras tanto afuera...

Christopher y Will llegan a la mansión Lombardi, viendo la escena del infierno y encontrándose con Nick.

-Diablo, ¿qué hacen aqui?- Los cuestiona.

-Cancelé la misión, por lo que veo no me pagó Massimo- Habla Christopher.

-No, ya está arriba de la camioneta- Le señala Nick.

-¿Qué tanto se escucha adentro de la casa?- Pregunta Will.

-Es Emily vs Emma la esposa de Massimo y sus hijas, ya casi acaba con ellas- Dice Nick riendo -Y hablando de la Reina de Roma.

Salgo cogiando y un poco desorientada, encontrándome con un Nick muy sonriente, pero mi vista se va a su lado, viendo a Christopher observándome detalladamente y se detiene en el collar de de mi cuello.

-¿Sigues compadeciéndola?- Se burla Nick.

-Créeme que ya no- Le respondo con voz adolorida -Buenas tardes Christopher- Le saludo, pero él me corta con la mirada, ignorándome por completo.

-Llévenlo a la mansión, al cuarto del bosque- Sólo dice eso, dándose media vuelta para subir a la camioneta.

Los demás me miran algo apenados por la acción, ¿por qué hice eso?.

-Diablo, la camioneta está ponchada- Le advierte Nick.

-Suban entonces- Ordena él.

Iba a subirme de copiloto cuando...

-Will, te quiero aqui enfrente- Espeta.

Ya no era necesario las palabras, literal hoy no me podía ni ver en pintura. Y todo el camino fué asi, tampoco decidí hablar, sólo volver a ver los lugares que recorríamos, notaba que a veces me miraba por el retrovisor pero no le tomé importancia.

Al llegar, yo sólo me bajo sin decir nada y entro a la mansión como puedo.

-Niña, ¿estás bien?- Me dice nana al verme.

-Si nana, sólo necesito ir al cuarto.

Le digo casi corriendo a las escaleras, entro a la habitación buscando un analgésico, después me doy una ducha, buscándo ropa limpia y sólo encuentro una bata, debajo me coloco una lencería gris nueva que encontré, tomo un cobertor y me largo a la otra habitación, no pensaba estar en la suya, ahora quien no lo quería ver era yo, me recuesto en el colchón tratándo de dormir para no tener que pensar...

Horas más tarde, 4 am.

El estómago no me dejaba de rugir, no había ni siquiera desayunado, me levanto y me coloco mi bata, asi que a oscuras y sólo la gran luna iluminando por la ventana, me dirijo a la cocina en busca de un vaso de leche.

Abro la gran nevera y veo mi objetivo, busco un vaso y <>, casi me da un maldito infarto al ver a Christopher parado en la puerta viéndome, pero decido ignorárlo, le doy la espalda buscando en los cajones el vaso.

-¿Qué haces despierta a esta hora?- Se digna a hablar el mudo.

No le respondo nada y sigo en lo mio.

-Hace rato no te paraba la boca, ¿por qué no hablas?- Todavía pregunta el idiota.

-¿No vas a hablar?- Vuelve a preguntarme.

Trato de pasar por un lado, pero me toma del brazo, regresándome haciéndome explotar.

-¿¡Todavía preguntas!? Me ignoras, me volteas la cara, joder contigo Christopher, no se ni siquiera que hice mal ahora para que te comportes asi, y si es lo que pasó anoche fijate que...-Le grito, pero me interrumpe tomándome de la cintura fuertemente, pegándome a él.

-¿Por qué tienes que hacer todo más dificil?...- Me susurra.

Y junta sus labios a los mios...

❥ Gracias siempre, MaxCaos.

Les agradecería mucho si me apoyan con su like y comentario, las leo..

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