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Había pasado una semana en cama, Edgar realmente se estaba desesperando. Por lo que le habían dicho, Nina se encontraba grave. Sus heridas no estaban sanando rápido, y tampoco se le permitió atenderle con medicamentos, solo limpiar las heridas que tenía.

Por más que tratará de levantarse le era imposible, Pedro tampoco le ayudaba. Simplemente se dio cuenta. Que pese a que Pedro lo miraba con lástima no lo iba a ayudar porque en la mansión ya todos sabían cuál esposo era más favorecido.

Por lo que, Edgar. Se dio cuenta que en aquella mansión nadie lo iba a ayudar, por lo que solo podía esperar poder recuperarse y así poder el mismo ver el estado de Nina.

La semana había transcurrido sin problema, la misma rutina. Venía una sirvienta la cual le daba el desayuno. Y lo atendía, no se podía quejar, ya que en la comida siempre eran puntuales, pero si notaba la mirada de desgana y desagrado en las mucamas que lo atendían.

El médico, bueno. Él era muy amable, y siempre lo atendía. Pero notaba que lo miraba con lástima, Edgar sabía que de seguro había visto sus cicatrices, ya que le había atendido las heridas.

Pero, a Edgar no le importaba, ya sea que haya visto sus cicatrices o no. Sabía que los médicos estaban acostumbrados a ver ese tipo de maltratos en los omegas.

Para su desgracia o fortuna, Edgar había escuchado a una de las mucamas hablar entre ellas, por lo que escucho. Eduardo, su esposo lo mandarían a otra mansión aparte.

Aunque, el aún no había sido notificado de eso. Él prefería eso a tener que vivir bajo el mismo techo que su marido y el segundo esposo de Eduardo.

Pero, si sabía lo que significaba en la sociedad. Que él, como primer esposo sea mandado a una mansión aparte, en la sociedad eso era como una humillación, cualquier primer esposo Omega, podría reclamar tal acto de humillación, pero el no quería tener que vivir con Eduardo.

Sabía que, si se quedaba. Su vida iba a ser un infierno.

Y aunque, no esperaba nada de su esposo, por lo menos quería que lo dejarán tranquilo. Si Eduardo quería estar con Lucas. Por el estaba bien, Edgar. No tenía ningún sentimiento de amor por Eduardo, menos después de saber que no permitió que Nina recibiera medicina para sus heridas.

Solo esperaba que, si lo mandaban a otra mansión. Poder llevarse a Nina con el.

Mientras Edgar, estaba perdido en sus pensamientos. No sintió que una mucama había entrado con la bandeja del almuerzo.

¡TAK!

El fuerte sonido de la puerta al cerrarse lo saco de sus pensamientos. Miro a la mucama que traía el almuerzo, ya que no podía comer comida pesada, le daban de comer sopa y cosas ligeras para comer.

La mucama se acercó a su cama. Y puso la bandeja en una mesa cerca de la cama, la habían puesto cerca para poder darle de comer a el. Pese a que por su expresión mostraba su desagrado, se sentó cerca y tomo una cuchara para darle de comer.

Edgar, ya se había acostumbrado a que no lo tratarán con respeto, ya que la mucama debía ser educada y presentarse y por lo menos golpear la puerta antes de entrar.

- abra la boca- hablo la mucama, acercando la cuchara de sopa cerca de Edgar.

Edgar, como de costumbre. Abrió la boca para poder comer. Necesitaba recuperarse pronto, tenía que ver a Nina y asegurarse de su estado.

Pronto el sabor a caldo invadió su boca, tenía admitir que le gustaba come sopa, más cuando estaba bien hecha. Aunque quería mojar el pan en la sopa, en ese preciso momento no podía moverse.

Tampoco quería pedirle a la mucama, ya que se notaba que no tenía ganas de alimentarlo. Y solo lo hacía por obligación.

Mientras era alimentado, Pedro golpeó la puerta antes de entrar y pedir permiso. Mientras seguía comiendo, Pedro hizo una reverencia. Y hablo con amabilidad - joven amo Edgar, el amo Eduardo. Dijo que hoy vendrá hablar con usted en la noche.

Edgar, por su parte solo pudo asentir y hablar con voz un poco ronca.- entiendo, - miro a Pedro - ¿dijo de qué quiere hablar?

Pedro, miro a Edgar. Y únicamente pudo desear que no fuera para golpear o algo malo. Ya que el doctor había dicho que si sufría un "accidente" más, no lograría sobrevivir.

Por el estado en el que se encontraba el joven amo Edgar, sabía que no soportaría su cuerpo ser tratado de esa manera.

Por lo menos, no hasta que su cuerpo se recuperaba. Aunque sabía que su amo Eduardo últimamente andaba con mal humor, había escuchado que era porque había tenido últimamente problemas, con algunos negocios.

Y tampoco ayudaba mucho la familia de Edgar, ya que no me prestaron tanta ayuda. Y bueno. La familia del joven Lucas, no tenía tantas conexiones.

Y su familia lo estaba presionando para que tomara a algún Omega que le dé poder, pero el amo Eduardo se negaba. Por lo que sabía. Se negaba por qué amaba a Lucas, y le había prometido que después de él, no tomaría a ningún omega.

Por lo que, había tenido mucha presión por parte de su familia.

Pero, también Con el joven Lucas tuvo problemas, ya que después del incidente. El joven Lucas dijo que no se sentía seguro con el amo Edgar, estar viviendo bajo el mismo techo. Tenía miedo de que tratará de hacerle algo.

Aunque, Pedro no creía que el joven amo Edgar, le haga daño.

el amo Eduardo no tenía pensado dejar vivir a ambos esposos bajo el mismo techo, por lo que le había mandado a comprar una mansión al amo Lucas, pero el amo Lucas dijo que no quería estar separado del amo Eduardo, por lo que el amo Eduardo cambio de planes dijo que la mansión sería de Edgar.

Pero, cancelo la mitad de las cosas que tenía preparado para el amo Lucas, ya que había mandado a comprar muchas cosas para la mansión. Solo encargo lo necesario.

Además, de que se aseguró de que sea solo sabido por la mansión. Ya que sabía que si su familia se enteraba de que el primer esposo era enviado a una mansión aparte y no vivía en al principal, le reclamaría. Porque en su familia eran muy tradicionales.

A pesar, de no querer al amo Edgar.

- el amo Eduardo, no dijo el motivo.- miro a Edgar, y hablo.- solo me pidió que le notificará.

Miro al joven, que se encontraba en la cama. De apariencia frágil. Se encontraba muy delgado. Y más aún después de haber sido golpeado por su amo.

Escucho un leve suspiró de parte de Edgar, - ya puedes retirarte.

Pedro hizo una reverencia y dijo antes de irse.- con su permiso, me retiro.

Edgar, solo quería descansar. No estaba interesado en la visita de Eduardo. La mucama antes de irse ordenó todo y pregunto - va a querer arreglarse para recibir al amo Eduardo.?

Edgar no le dio importancia a la mirada de desagrado y dijo - no, no hace falta.

Edgar, cerro los ojos. Y solo logro escuchar el sarcasmo en el tono de la mucama. - sí, como usted diga.

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