Borrador

Edgar, en cuanto escucho el nombre de Nina, salir de la boca de Eduardo. Lo miro directamente.

Eduardo, que vio que Edgar lo miraba. Prosiguió.- mientras tanto te quedarás encerrado en tu habitación.

Edgar, que escucho lo que le dijo Eduardo solo asintió, y pregunto seriamente.- ¿cómo se encuentra Nina?, ¿está bien?.

Eduardo, que fue interrumpido. Miro seriamente a Edgar, ¿le importaba más una mucama, que lo que él le estaba diciendo?

Tal pensamiento lo hizo molestar. Aunque no se preguntó porque le importaba, - ¿Acaso escuchaste lo que te dije? - hablo fríamente, mirando a Edgar, el cual se encogió en su lugar.

Debía admitir que sí, lo golpeó bastante. Pero, cambio de idea. Al recordar el mal momento que hicieron pasará Lucas, para Eduardo, Edgar se lo merecía. Eso y más.

Edgar, ante los ojos de Eduardo solo era una molestia. La cual no veía la hora de deshacerse. Débil y molesto, pero debía de aguantar por lo menos hasta conseguir lo que quería.

Además, de que Edgar para algo debía de servir. Su celo era demasiado fuerte cuando llegaba y tenía miedo de lastimar a Lucas, Eduardo ante la solo idea de que Lucas le tenga miedo.

Decidió que durante su celo, lo pasaría con Edgar. Además, debía de tener un heredero.

Sus padres ya le estaban exigiendo un heredero, aunque quería tenerlo con Lucas, era una tradición de la familia que los herederos solo sean del primer esposo.

Hasta con eso, Edgar era una molestia para Eduardo.

- Solo, solo quiero saber si se encuentra bien. - dijo Edgar, sacando a Eduardo de sus pensamientos.- no la he visto desde aquel día.

Eduardo, miro a Edgar. El cual hablaba mientras miraba a suelo, cosa que. Por alguna razón, lo molesto.

Acercándose a Edgar, Eduardo tomo con una mano el rostro de Edgar. Obligándolo a mirarlo a los ojos.

- cuando te hablé me mira a los ojos- dijo Eduardo, mirado a los ojos a Edgar, debía de admitir que tenía muy lindos ojos, mirándolo fríamente a Edgar, Eduardo hablo - lo listo es si tú me hablas. - apretando su agarre, pregunto.- ¿entendido?

Edgar sintió como apretaba Eduardo su mandíbula, sentía como si se la fueran romper. Trato de sacarse del agarre pero solo obtuvo que Eduardo frunciera más sus cejas, y lo apretara más-¿acaso debo de repetir lo que digo?, - hablar fríamente Eduardo, Edgar lo miro a los ojos. Y por un momento pensó que lo volverían a golpear.- te pregunté, si ¿entendiste?

Edgar, solo puedo con sus manos agarrar el brazo de Eduardo, y apretarlo con todas sus fuerzas. Cosa que no funcionó, estaba tan débil que ni para eso tenía fuerzas, trato de hablar lo más entendible posible.- en, entendí.

En cuanto Eduardo, escucho esas palabras, soltó a Edgar. El cual solo podía masajear su mandíbula.

Había dejado una marca de su agarre, dejando la marca de su mano en la mandíbula, la cual se encontraba roja.

-en cuánto a aquella mucama- Eduardo, el cual miro a Edgar. Noto que Edgar le prestaba suma atención en cuanto escuchaba aquel nombre, frunció el ceño notablemente y dijo.- si no quieres que le pase algo, - noto en la mirada de Edgar miedo.- será mejor que no causes problemas.

Por un momento Eduardo, se preguntó que tan importante era aquella mucama para Edgar, Edgar el cual siempre tenía una expresión neutral, solo parecía importarle aquella mucama, nada más.

Cosa que lo molestaba. Pero igual aquellos pensamientos se esfumaron, no debía de importarle eso, debía de preocuparse por Lucas.

Lucas, el cual ahora se encontraba mejor. Tuvo que llevar de compras para que se animará. El solo recordar a Lucas, Eduardo sonrió. Sí, solo Lucas era importante.

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