por la noche, en aquel pueblo donde, una pareja y un acompañante se hospedaron, un lugar agradable; Roberto se presentó quería llegar a un acuerdo, quería alejarlos de aquel lugar, luego, vería la forma de huir, quizá, tenía que renunciar a ese sentimiento hacia mi, tenía que terminar y olvidarme; llegó a la recepción del hotel, como un chico guapo y encantador, pulcro y con ese aroma tan peculiar solo de el; les dejo un recado a los tres, los vería en un café que se encontraba a 2 cuadras, en media hora, tiempo suficiente para esperar allá su llegada; tiempo después el, sentado en una mesa, pidió un café para esperarlos, primero llegó Victoria
Victoria _ mi amor, ya estoy aquí
Roberto _ bien mamá, cómo está mi hermano
Victoria_ muy bien, tiene una novia muy bella, hijo, por favor, regresaras con nosotros verdad?
Roberto_ mama, ¿acaso te interesa más la investigación que yo verdad?
Victoria _ no es eso hijo, la investigación se pauso casi 10 años, tenemos que concluir
Roberto _ pero mamá, yo no era parte de este sacrificio
Victoria lo miraba con amor de madre, pero al mismo tiempo, pensaba en su carrera profesional, Roberto hace muchos años había dejado de ser su hijo, frente a ella solo estaba el recuerdo de que algún día fue madre; momentos más tarde, llegaron apresurados, Adolfo y Rubén, se acercaron hasta la mesa y con prisa, Adolfo se dirigió a Roberto sin sentarse, solo le dijo al oído, mientras, Rubén hablaba con la mamá de Roberto al oído y al mismo tiempo la hacia abandonar la mesa, la tomo del brazo para mostrarle con prisa la puerta de aquel lugar
Adolfo_ está misma noche abandonamos este lugar, tenemos cosas urgentes que hacer allá, quisiera que nos acompañaras ahora, pero si no te es posible, yo entenderé, quizá luego nos visites, sabes dónde es tu casa, allá estaremos; ahora solo quisiera pedirte me acompañes, quiero mostrarte algo, será solo un momento aquí en mi auto
Roberto, incrédulo, cómo es que lo dejarían así nada más, pero era agradable pensar que lo dejarían en paz, al llegar al auto, Rubén cancelaba la cuenta del hotel, Victoria se hacia cargo del equipaje en el auto de ellos y a Roberto, Adolfo lo conducía hacia su auto, ambos autos en el estacionamiento, al llegar al auto de Adolfo, Adolfo señaló su interior, en el asiento trasero, Roberto palideció... yo Renata estaba en su interior, inconsciente, acostada, Adolfo, satisfecho, observando la palidez de Roberto, camino en silencio y con una sonrisa abrió la puerta del copiloto y lo invito a entrar, Roberto, cómo manso cordero, inclino la cabeza y subió al auto, Adolfo supo muy bien como atar de manos a ese ser tan fuerte e inteligente, la sonrisa de satisfacción que llevaba durante el camino, lo confirmo, viajaron por horas, mientras, Roberto miraba hacia atrás, tratando de asegurarse a si mismo que estaba bien
Roberto_ ¿cómo la sacaron de casa?
Adolfo_ muy bien, estaba solo la mamá y ella
Roberto _¿ la mamá, está bien?
Adolfo_ claro que sí, dormirá, hasta mañana, pero todo bien, ella, tu noviecita, dormirá unas horas más
Roberto_ no tenían que hacer esto
Adolfo_ solo queríamos estar seguros, no te preocupes, los dos estarán bien
llegamos después de la media noche, era una ciudad grande, el auto se condujo por grandes avenidas, los papás de Roberto se adelantaron, cuando llegamos, ellos ya estaban esperándonos, nos condujeron a un laboratorio, con espacios muy grandes de cristal, en uno de ellos, había una cama pequeña dónde me depositaron, Roberto a mi lado, se sentó en el piso mientras me observaba con tristeza, nos dejaron en cautiverio y mientras ellos salieron, quizá a su casa a descansar.
a la mañana siguiente desperté, me ví en un lugar desconocido, pero a mi lado tirado en el piso dormido estaba Roberto, me incorpore mientras observaba aquel lugar, a través de aquellos cristales relucientes, había unas personas vestidas de blanco y cubre bocas, sentada en la cama, sintiéndome ajena a aquel lugar, solo Roberto significaba mi amparo y mi luz, minutos más tarde, despertó y se acercó a mi, se sentó a mi lado y me abraso
Renata _ ¿quienes son ellos? ¿porque estamos aquí?
Roberto_ esto es un laboratorio, desde que me fuge de casa, mis padres han estado tras de mi, ahora me encontraron, yo, me reuse a volver con ellos
Renata_ ¿encontraron conección entre tu y yo?
Roberto_ ¡exacto! no quería que supieran de ti, esto fue inevitable, perdóname.
Renata_ estaremos juntos y juntos volveremos a casa
Roberto me abraso y beso mi boca
poco más tarde, llegó un chico joven con bata y trajo 2 charolas con comida, era una comida deliciosa o quizá era mi hambre de aquella mañana, Roberto, no quería comer, estaba pensativo y preocupado, le ofrecí alimento, pero solo bebió un poco de jugo y caminaba hacia la puerta, evidentemente quería salir, casi al medio día, llegó el señor Rubén, le abrieron la puerta y salieron juntos, yo lo miraba mientras el volteo y con su mirada me dijo que volvería, un par de horas más tarde regreso, molesto
Renata_ ¿que paso?
Roberto_ me tomaron unas muestras para laboratorio
Renata_ ¿que quieren?
Roberto_ quieren hacerme estudios para conocer mis niveles, quieren conocer mis capacidades, de curación, mortales etc
Renata_ ¿nos podemos ir después de eso?
Roberto_ no lo se
más tarde, por la tarde llego Adolfo
Adolfo_ buenas tardes
Roberto_ ya nos podremos ir
Adolfo_ necesito hacer unas pruebas también en Renata
Roberto enojado, pues el pretendía y entendía, que solo el sufriría los exámenes para esa investigación, no yo
Roberto_ ¿que es lo que pretendes? pensé que ella solo significaba presión para mí, no le van a hacer exámenes a ella
Adolfo_ pues te equivocaste hijo, ella ya forma parte de la investigación
cuando Roberto dijo esto, con gran agilidad brinco la cama mientras yo estaba sobre ella y se puso frente a Adolfo de forma retadora, Adolfo a su ves, no estaba dispuesto a ceder en sus pretensiones
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