Capítulo 11

En todo el camino no hubo un intercambio de palabras, al menos no hasta que Tatiana se hartó del silencio y a la par notó que el camino no era el camino para ir a su casa, ¿A dónde la estaba llevando ese hombre?.

—¿A dónde se supone que vamos?.

—¿Ahora si quieres hablarme?.

—Por favor, tú empezaste a ir todos los días a mi trabajo con el fin de que renunciará.

—Tatiana… no me malentiendas, no me interesa en lo más mínimo nada de lo que hagas, todo lo contrario, me da igual –Respondió Leon con tono serio mientras miraba el camino– te dejaré los puntos en claro, la única razón por la que me entrometo es por la imagen que debes darle a mi familia, en especial a mi abuelo. No hago esto ni siquiera por mí, lo hago por mi hermano y… ni siquiera debería hablar contigo sobre eso.

—Entiendo, ahora simplemente dime… ¿A dónde vamos?.

Leon suspiró con frustración, guardo silencio por unos largos momentos y tras mirar a Tatiana decidió hablar.

—Iremos a comprarte ropa, no puedo dejar que sigas en harapos.

Tatiana ya estaba bastante irritada como para que Leon siguiera diciéndole ese tipo de cosas, si embargo, esta soltó un suspiro y soporto las ganas de contestar de mala manera, ya había aceptado que eso solo sería gastar saliva en vano.

—Bueno, ya que estoy haciendo lo que a ti te apetece ¿Qué sigue?.

—Bueno, esta semana recibirás clases de etiqueta, no me interesa si no quieres, puesto que debemos empezar a pulir tu personalidad, esto es necesario para que conozcas a mi abuelo, tenemos no más de un mes.

—¿Algo más? –Preguntó Tatiana con poco interés– puesto que parece que no me has contado mucho sobre tus planes, ni siquiera sé sobre tu trabajo o simplemente a que te dedicas en sí.

—Te lo diré después, aunque lo que si puedo decirte es que tu padre trabaja en mi empresa.

—Espera… ¿¡Qué!?, imposible, yo conozco a su jefe y no eres tú.

—Oh, hablas de su antiguo jefe, le ofrecí una mejor paga y un contrato por varios años asegurando un seguro médico ¿Crees que se negaría?, pues no, acepto totalmente feliz.

—¿Por qué involucra a mi padre en esto?.

—Él está involucrado desde el inicio, ¿Acaso no hicimos este trato para que pudieras pagar su tratamiento? Simplemente, busqué una forma de tener una excusa más sencilla para darle dinero.

Tatiana mordió su labio inferior, no confiaba en la amabilidad de Leon, le estaba dando demasiado y ella aún no le había dado nada, simplemente se negaba a la idea de recibir tanto de alguien que en pocas palabras era un desconocido. Aunque no había nada que hacer, pues, ya había aceptado todos los términos y no podía negarse después de firmar el contrato.

Minutos después llegaron a un centro comercial, pero había algo extraño, no había autos en el estacionamiento, al entrar fueron recibidos por un grupo de personas y además de eso, un grupo de hombres con trajes los seguían, eran hombre de seguridad.

Un hombre de buen aspecto los recibió, tenía tal vez entre treinta a cuarenta años, resaltaba al tener un traje negro puesto y una postura excelente, por lo que se veía elegante a simple vista.

—Joven Frits, es un placer verlo –Dijo aquel hombre con un tono muy cortés y amable– apenas supe que vendría todos se pusieron a la orden para que pudiese estar cómodo.

—Está bien, no recuerdo tu nombre, simplemente vengo por ropa, pero no quiero errores –El tono de voz de Leon era frío y muy severo, aquel hombre simplemente asintió con miedo y me vio de pies a cabeza– bien, esta mujer es mi prometida, por lo que quiero que quede claro el trato que deben darle.

—Sí señor, gracias por confiar en nosotros.

Aquel hombre corrió rápidamente saliendo del campo de vista de Tatiana y Leon, pero una duda mataba a Tatiana, ¿Qué tipo de hombre era Leon? Por más dinero que tuviera, era un poco increíble ver como intimidaba a todos a su alrededor con una simple mirada, ¿Qué tan poderoso era como para cerrar un centro comercial enteró para a secas comprar unas pocas prendas?.

—Bien, espero tengas buenos gustos y esto sea rápido –Dijo Leon con mucho desinterés– aunque dudo mucho que tus gustos encajen bien con lo que compraremos hoy.

—¿Podrías dejar de ser tan ofensivo? –Dijo Tatiana con desagrado– cada vez que puedes destacas que soy pobre o sencillamente críticas mi entorno, estoy acostumbrada, pero es agotador escucharlo a cada rato.

—Como gustes.

Leon comenzó a caminar mientras Tatiana intentaba seguirle el paso, por momentos esta lo miraba con curiosidad, era extraño que un hombre tan atractivo u joven tuviese tanto poder.

No caminaron mucho, ya que, Leon entró a una boutique en la que Tatiana jamás habría entrado por sí misma, los empleados lo rodearon como abejas a su preciado panal, sin embargo, no lo tocaron a se acercaron demás.

Tatiana no escogió nada, solo se probó vestido tras vestido, todos escogidos por Leon, este la miraba de reojo con poco interés y enseguida le pedía probarse otro, estuvieron en las mismas por casi una hora, hasta que Leon se levantó y fue a pagar, compro la mitad de todo lo que Tatiana se probó.

Tras pagar siguió caminando hasta llegar a una zapatería, donde, repitió el mismo procedimiento con Tatiana esta vez con zapatos, tacones y zapatillas, Tatiana jamás usaba zapatillas, se sentía como una muñeca o un simple maniquí.

Tatiana estaba confundida, al principio Leon dijo que no deseaba gastar mucho tiempo, pero habían hecho paradas en cuatro lugares diferentes en los que pasaban casi una o dos horas en la que ella solo se probaba ropa y diferentes tipos de prendas. Tatiana tenía hambre y ya no quería seguir utilizando nada, ninguno había comido nada, pero Leon no parecía afectado en lo absoluto.

Al parecer Leon ya estaba satisfecho con todo lo comprado y decidió irse, aunque Tatiana no pudo cantar victoria, pues, no fueron a su casa, fueron a una peluquería donde tardaron media hora más, Tatiana ya no quería hacer nada, pero sus ojos se iluminaron cuando pararon frente a un restaurante.

Leon bajo y sujeto el brazo de esta, este se había asegurado bien de la imagen de Tatiana, la obligó a usar un vestido antes de salir del centro comercial y ya habían estilizado el cabello de esta, ya se veía como una joven heredera, aquella imagen que Leon deseaba ver.

Al entrar al restaurante fueron bien recibidos y guiados a una mesa, Leon pidió la comida y Tatiana pudo estar en paz cuando se llevó el primer bocado a sus labios.

—Lamento haber hecho que soportarás el hambre por tantas horas, pero a partir de este momento estarás en el ojo de todos.

—Está bien… al menos los dos estábamos en la misma situación.

Tatiana tenía tanta hambre que ni siquiera quiso discutir con Leon, estaba bien simplemente con poder comer a gusto.

Más populares

Comments

Carmen Blanco

Carmen Blanco

pobre Tatiana con ese témpano de hielo ya verá cuando agare vuelo jajajaja 😍

2023-09-06

1

GiovannaXchelMayaCejudo

GiovannaXchelMayaCejudo

se supone que paso de ser rica a pobre y ahora es viceversa

2023-08-31

0

Gladys Ramirez

Gladys Ramirez

autor un pequeño detalle no nos ha dicho o descrito a los protagonistas como.son color de piel solo se la edad de cada uno 💯

2023-08-25

0

Total

descargar

¿Te gustó esta historia? Descarga la APP para mantener tu historial de lectura
descargar

Beneficios

Nuevos usuarios que descargaron la APP, pueden leer hasta 10 capítulos gratis

Recibir
NovelToon
Step Into A Different WORLD!
Download MangaToon APP on App Store and Google Play