En California

En el auto de Alice, el fantasma de Jerry le comenta:

- Él, tu novio, es una buena persona, no todo el mundo arriesga su vida para salvar a una extraña en la carretera-

- Somos médicos, eso es lo que hacemos diariamente, salvar vidas de extraños, es nuestro trabajo. ¡Y ya deja de decir que es mi novio! - responde Alice aparentando indiferencia.

- Será su trabajo en el Hospital, pero no todos lo hacen en las carreteras, detenerse en la mitad de la nada, en la oscuridad de la noche, sin saber los riesgos... Además, aunque no quieras reconocerlo, él te gusta y tú le gustas mucho a él, está enamorándose de ti y él no se está dando cuenta todavía- dice Jerry.

- Te digo que no es mi novio, y no creo que se esté enamorando- contesta confundida Alice.

- Se le iluminan los ojos cuando te ve, se detuvo en la carretera cuando te vio sola, su mirada es la misma que yo tenía cuando veía a mi Susan, eso es amor, y su especie solamente se enamora una vez en sus vidas, puedo asegurártelo, y tú también acabarás enamorada de él, están predestinados - confiesa Jerry

- Bien, dime hacia dónde nos dirigimos- cambia la incómoda conversación Alice. No hay ninguna especie de humano tan especial para enamorarse de esa manera. Ella suspira.

Jerry le va indicando la ruta a seguir, por fin, luego de 40 min, logran llegar a un edificio antiguo en las afueras de la ciudad. Alice toca la puerta, abre una joven de su misma edad. Tiene a un niño de 2 años en sus brazos. Jerry sonríe y comenta:

- Ella es mi Susan. Smith es su apellido-

- ¿Usted es Susan Smith- pregunta Alice.

- Sí, soy yo, ¿Quién es usted? - responde la mujer

- Soy la Dra. Alice Johnson del Hospital Pacific, hay un asunto que me trae por aquí ¿Podemos conversar? - Alice muestra su credencial de médico del hospital

- Pase adelante, tome asiento - invita Susan.

-¿Cuál es ese asunto? ¿Desea tomar algo? - pregunta Susan

- Gracias, un vaso de agua, por favor. La verdad, no sé cómo comenzar, no sé si pueda creerme, pero necesito hablarle de Jerry Stewart- dice con cautela Alice, tomando el vaso de agua.

- ¡No me interesa en lo absoluto, lo que venga a decirme de ese maldito traidor! Si de eso se trata la conversación, entonces ha finalizado, ¡Es mejor que se vaya de aquí! - dice Susan visiblemente enojada.

-Debo informarte que Jerry murió hace unos años, creo que todavía estabas embarazada- se apresura en decir Alice, antes de que la echen del departamento.

- ¿Qué dices?- Susan se pone pálida y se deja caer en el sillón de un golpe, con el niño en brazos.

-Lamento, darte esa mala noticia de esta forma, pero debía informarte, él no quiso abandonarte, él murió la noche que se fue, en un accidente de tránsito, lo cremaron haciéndole ocupar el lugar de su jefe- explica Alice.

- Pero ¿Cómo puedes saber tú esas cosas?- pregunta sin poder asimilar esa dura noticia.

- Porque él está aquí a mi lado, me pidió que te buscara para despedirse, él siempre te amó y amaba a su niño, desde antes de nacer - Alice repite las palabras de Jerry.

- Dice que cuando te vio la primera vez, recogió un adorno con una mariposa de tu cabello que se te había caído, tenías un vestido blanco, te siguió hasta la peluquería donde trabajabas, le pareciste muy hermosa. Él se enamoró de ti a primera vista. Él tomó un préstamo que le pidió a su jefe y te compró la peluquería- relata Alice, lo que Jerry le va diciendo.

A Susan se le humedecen los ojos, las lágrimas ruedan por sus mejillas, eso lo sabían ellos dos, nadie más, pregunta:

-¿Dónde está él? ¿Puede escucharme? - Alice asiente y señala su lado derecho. Susan comienza a hablar:

- Jerry amor, nunca he podido olvidarte, este es tu hijo, se llama igual que tú: Jerry- muestra a su hijo en brazos, el niño de 2 años puede ver al padre, estira sus manitas hacia Jerry y dice con su tierna vocecita, está aprendiendo a hablar:

- Pa pá, pa pá- Susan, llora de puro sentimiento. Alice sigue diciendo por indicaciones de Jerry:

- La cadena de Cristo Redentor que tú le regalaste en su cumpleaños, la dejó en el baño, la noche que salió a recoger a su jefe de aquella fiesta del 21 aniversario de BNB, la cadena la dejó sobre el espejo del baño, dice que se la des a su hijo para que lo proteja siempre y lo recuerde, que sepa lo mucho que lo ama - Susan, coloca al niño en la andadera, corre al baño, sube en una silla y encuentra la cadena, viene a la sala y abraza a Alice, le agradece, coloca la cadena a su hijito.

Alice se despide y se va, pero Jerry sigue con ella.

- Jerry, ya cumplí tu deseo, ahora se supone que debes ver una luz y dirigirte hacia ella- dice molesta Alice.

- Agradezco mucho lo que hiciste por mí y mi familia ¿Pero yo tampoco sé por qué sigo aquí?- responde confundido el fantasma.

- ¿Hay alguna otra cosa qué te quedó pendiente por hacer en este plano? - pregunta Alice, contrariada, este es un fantasma con muchos remordimientos, son los más difíciles...

- No lo sé, se me ocurre decirle la verdad a la señora Zenya, ella debe creer que su esposo e hijos están muertos- responde Jerry.

- ¿Sabes dónde puedo conseguirla a ella?- pregunta Alice.

-No, no lo sé, he ido hasta su casa de Malibú y otras personas viven allí, pero tu novio la salvó, él es quien puede ayudar. El Señor Leopold es italiano, su familia es de la Toscana, tienen viñedos allá- responde el fantasma.

- Está bien, esta noche quedé en verme con Robert, le preguntaré. ¡Y ya deja de decir que es mi novio!- responde molesta Alice.

- Bueno, pronto lo será, y serán muy felices, confíale tu don, él si te entenderá y creerá en ti... Cuando tengas noticias de la señora Zenya, solo llámame y yo apareceré donde estés, por lo pronto me quedaré con mi familia, hasta que podamos decirle la verdad de lo sucedido a la señora Zenya- Alice acepta pero le advierte:

- Es mejor, que no intervengas en la vida de ella, déjala ser feliz, es joven y merece tener una nueva pareja y tu hijo necesita un buen padre-

- Por esa razón me quedaré, los muertos podemos ver el aura de las personas, debo dejarla con un buen hombre- responde Jerry.

Alice asiente con la cabeza, promete buscar a Zenya y se va.

En el vehículo, toma su celular y ve el montón de llamadas perdidas de Robert desde el día anterior, lee los mensajes y sonríe. Lo llama:

Robert contesta - Hola amor, ¿quieres que almorcemos juntos?- se escucha una voz "entonces ¿es cierto que conseguiste a tu mate?"- "mamá, aléjate, luego hablamos"-

- Lo siento amor, mi mamá está aquí a mi lado, no se despega, está en los últimos arreglos para la cena de su cumpleaños- se ríe Robert

- Por eso, te llamo, ¡no me dijiste que era el cumpleaños de tu madre!, ahora no sé que regalarle, no la conozco- dice contrariada Alice.

Robert se aleja de su madre se va al jardín - Ahora estoy solo, no te preocupes, yo compré un regalo se lo damos los dos, ella no es fácil de complacer, yo la conozco bien-

- Entonces ¿es una fiesta formal?, Necesito saber cómo vestirme - dice Alice

- Sí, lo siento, no te dije, es formal, vendrán todas las amigas y amigos de mis padres, la mayoría empresarios, otros médicos y sus familias - confiesa Robert, si le decía la verdad, seguro no aceptaría.

- ¿En qué lío me estás metiendo?- responde Alice suspirando, pero ya había aceptado acompañarlo, no podía negarse ahora.

- Amor, no te enojes, solo quiero que conozcan a mi hermosa novia - dice sonriendo Robert.

- Robert, ¿Tú también vas a insistir en que somos novios? Recuerda que tan solo ayer terminé un noviazgo de 6 años, no puedes decir que soy tu novia, parecerá que fui yo la infiel y él la víctima - responde Alice

- No te preocupes amor, aquí nadie te conoce, además, ¿No creo que seas del tipo de mujer que le importa lo que diga la gente? A mí no me importa lo que digan de ti o dejen de decir, a mí solamente me importa lo que tú opines - responde con sinceridad Robert, en su clan es natural quedarse con la pareja de alguien más, si están predestinados...

- Sí, tienes razón, no me importa lo que digan de mí... espero me apoyes en esa reunión de lobos - responde Alice sonriendo.

- No me has enviado tu dirección para ir por ti- dice confundido Robert: ¿Cómo sabe ella que son lobos?

- Si ya te la mando, te dejo hablamos en la noche, ahora debo comprarme un vestido, hasta luego - se despide.

- Nos vemos linda, pasaré a las 8:00pm por ti, cuídate amor- se despide Robert.

Alice se dirige a la Boutique de la madre de Rina, ella la sacará de ese apuro, luego irá al salón de belleza, está muy descuidada con su trabajo en el hospital.

No entiende por qué se siente tan inquieta con esa reunión: ¿Cómo será esa familia?

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