No pude levantarme del suelo, esto realmente me estaba matando y mi respiración se acortaba a cada instante.
-Kira
-¿Que pasa? -Contesto con algo de dificultad
-Te estaba hablando pero estabas perdida en tus pensamientos ¿Estas bien?
-Ah si, estoy bien. No te preocupes
Aún algo dudoso asintió y se fue por unos minutos para volver con unas ramas
-En unos minutos podremos continuar, no hacia falta eso y además si prendemos una fogata nos encontrarán
-Lo se, es una distracción. -En ese momento rompió una parte de su camisa sorprendiéndome
-¿Que haces?
-Te ayudo, ni siquiera te das cuenta que te lastimaste
-Oh, no es nada de todas formas -Parece que al caer de rodillas me corté con una piedra y por la adrenalina del momento no lo noté
-Eres muy terca -Agarra mi pierna y comienza a desinfectar la herida con su magia algo que duele demasiado y pego un grito ahogado por mis manos
-No lo hagas, esta bien así
-No lo entiendo, esto no debería doler para nada -Dice Dylan algo confundido
-No es un problema con tu magia, es mi cuerpo el que lo rechaza pero gracias por intentar. Vamos a hacerlo de la forma tradicional.
Comienzo a dibujar en la tierra con una rama y el emperador me ve curioso como un niño viendo un nuevo juguete lo que me hace reír de repente
-¿Que es eso?
-Hiervas curativas, necesito que consigas estas
-¿Yo?
-¿Quieres que vaya yo? Estoy lastimada y no puedo caminar ahora
-Oh bueno, tienes razón
El emperador se fue rápidamente a buscar las hiervas como un cachorro en busca de una pelota, era extraño pero me divierte verlo, me da algo de ternura. Volvió muy rápido con las plantas que le pedí y comenzó a observar lo que hacía con ellas
-¿Donde aprendiste eso?
-Ya te dije que estuve en muchas guerras, antes de.. bueno no es el punto, tuve que aprender estas cosas para no depender de nadie en caso de emergencias.
-No lo entiendo, ¿Por qué fuiste a guerras? Nadie nunca supo de la primer princesa en el campo de batalla
-No era reconocida como princesa en las guerras, nunca di a conocer mi identidad por orden de mis padres
-Entonces los emperadores no dejaron que te den créditos por tu trabajo
-No es eso, desde que tengo memoria intentan asesinarme o desaparecerme entonces mis padres intentaron brindarnos seguridad
-Una guerra no es segura
-No lo entenderías, para mi familia una guerra mortal no es nada. Los enemigos de mis padres siempre fueron más allá de todo eso
-Eres humana como yo, no entiendo entonces. Acabas de lastimarte y tu cuerpo no soporta magia ¿Como una guerra no es peligrosa?
-No deberías meterte en eso, vamos, mi pierna esta mejor
Me levanto del árbol donde estaba sentada y comienzo a caminar con todas mis fuerzas intentando no caer y soportando este dolor insoportable que siento, las lagrimas amenazan con salir pero no por el dolor de mi pierna, pasé por dolores peores que este, lo que realmente me da impotencia es el hecho de que me volví débil, mis padres son invencibles y yo soy su hija pero no puedo ni siquiera soportar el maná en mi cuerpo y todo por haber sido descuidada en mi última misión. Después de un rato de caminar sin decir una sola palabra nos topamos con un pueblo que yo no conocía, era la primera vez que venía a este imperio que yo sepa y a penas se llegar a la capital.
-¿Sabes donde estamos?
-Sí, estamos alejados del palacio todavía si es tu pregunta
-Que inteligente que eres -Digo en tono sarcástico
-Vamos a buscar un caballo para volver, ya no puedes seguir caminando o va a empeorar -Dice el y me levanta en sus brazos dándome una sorpresa
-¿Que haces? Bajame ahora mismo Dylan, recuerda que soy una respetada princesa
-Y yo un temible emperador Kira asique no te quejes y agárrate o te vas a caer
-uff -Suspiro y me resigno a la situación, de todas formas el tenía razón, ya no podía continuar caminando por más tiempo.
Así el emperador me llevó por todo el pueblo hasta llegar a una cabaña donde había un hombre ya mayor y le pidió dos caballos a lo que el hombre respondió que solo tenía uno asique lo aceptó y salimos del lugar
-Tu sube al caballo y yo voy caminando a tu lado, ¿Sabes? estoy algo cansado de caminar ya -Hace un puchero y veo sus claras intenciones
-Sube de una vez y deja la actuación
-Esta bien
Se subió al caballo dejándome adelante mientras me rodeaba con sus brazos para sostener las riendas, podía sentir su sólido pecho con unos abdominales muy marcados pero no me sentía incómoda, de hecho se sentía bastante relajante
*En que piensas Kira, concéntrate*
-Ya llegamos -La voz de Dylan me saca de mis pensamientos
-Que bueno pero ya es de noche, debemos entrar por separado o se esparciran rumores acerca de ambos
-Esta bien, ven que te ayudo a bajar -El baja primero y luego extiende los brazos para que yo bajara pero en un momento perdí el equilibrio y casi caigo al suelo entonces me abrace a el muy fuerte y cerré los ojos
-Lo siento -Digo aún sin soltarlo pero casi no podía apoyar mi pierna
-No pasa nada pero ¿Estas segura que puedes llegar hasta tu habitación?
-No soy una damisela en peligro majestad, podemos separarnos a partir de ahora
-¿Majestad?
-Volvimos al palacio lo que significa que volvemos a nuestra vida habitual y por ende nos llamaremos por nuestros títulos majestad.
-Me gusta cuando me dices solo Dylan -Dice con cara de perrito regañado
-Somos dos políticos que están en busca de un acuerdo que sea beneficioso para ambos territorios y nada más que eso, si me disculpa me retiro -Hablo yo y comienzo a caminar sin esperar una respuesta de su parte, no se porque pero esas palabras me hicieron enojar. Solo dije la realidad, nada más que eso
Caminé y caminé hasta mi habitación, el camino se me hacia interminable y mi pierna dolía como un infierno pero solo me quedaba seguir hasta que una mujer se atravesó en mi camino
-Perra -Dijo ella pero yo solo quería seguir mi camino, estaba muy débil. No le dije nada a Dylan pero mi pierna se estaba infectando por mis bajas defensas
-¿Acaso no escuchas? -Se pone delante mío impidiéndo el paso
-Lo siento señorita pero no la conozco y no quiero tener problemas con nadie
-Ahora finges inocencia, ya vi tu coqueteo con el emperador. Maldita zorra -Habla enojada
-No se de que habla, si me disculpa. Debo continuar
-No te salvarás de esta zorra, juro que voy a matarte si te entrometes en mi camino al trono -Ignorando sus amenazas aceleré el paso causando más dolor en mi pierna y por fin llegué a mi habitación entrando y en cuanto cruce la puerta caí al suelo y pegué un grito de dolor dejando caer mis lagrimas una tras otra, como pude llegué a la cama y sin siquiera revisar mi pierna me tapé con las mantas y llore abrazando la almohada hasta que me quedé completamente dormida
***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***
Updated 47 Episodes
Comments
Nery Guerrero
Hay algo q le impide hacer magia está bloqueada
2024-11-26
0
Mariela De Los Angeles Serrano
Y qué le pasó, qué no puede usar magia??? Ellos que son tan poderosos
2024-05-22
1
Maru
🤔🤔
2023-05-04
1