Capítulo 17

Hace un tiempo... Más precisamente el día en el que Dylan se enteró que Kira inevitablemente moriría, ese día una mujer maliciosa aprovechó que el emperador se fue a su orina para llevar a cabo un plan junto a algunos nobles, Dylan estaba dentro de la oficina enfocado en trabajar para tratar de apaciguar el pensamiento de muerte que rondaba por su cabeza ¿Que haría sin Kira? Es lo que se preguntaba una y otra vez.

-Majestad, le traje un té de hiervas para que se relaje -Entra una sirvienta a su oficina, lo cual le parece algo raro

-No quiero nada, puedes irte

-Pero majestad, fui enviada por la emperatriz. Me castigará si no cumplo su orden

-Déjalo y vete -Al menos así sabe que Kira piensa en el

Pero al contrario de lo que el emperador creía, ese té tenia todo menos buenas intenciones. Sin sospechar de esto el se tomó la bebida pero al instante se dio cuenta de lo que pasaría.

-Debo salir de aquí -Dylan como puede se levanta de su silla y comienza a caminar hacia la puerta pero un calor se apoderaba de su cuerpo y cuando por fin iba a salir para buscar la ayuda de su emperatriz esa mujer entró, Alicia era su nombre, provocando al emperador comenzó a moverse a su al rededor, Dylan aún intentando huir de esta seguía caminando pero la droga era muy fuerte y al otro día simplemente despertó en una habitación del palacio con la mujer desnuda a su lado.

Él se sentía una persona horrible y no recordaba que lo habían drogado, solo recordaba haber tomado unas copas de vino mientras trabajaba y luego llamar a esa mujer. Por supuesto, sus recuerdos estaban alterados.

-Buenos días su majestad -Dice Alicia pero el solo se levanta de la cama para luego vestirse e irse rápidamente.

Día a día la culpa lo consumía, si bien tenia permitido tener concubinas y ya tenía 2 jamás las había tocado. El realmente se enamoró de Kira y pudo lograr que sea su esposa pero ahora la engañó y no supo como enfrentar la situación, ya no podía verla a los ojos. Por los próximos días se encargó de ocuparse del trabajo o salir del palacio para evitar ver a Kira pero muy pronto una tragedia sucedió.

-Felicidades majestad, Alicia esta esperando un hijo suyo -Esas palabras fueron como una bomba que estalló en su cabeza

Por más que no quería hacerlo, ese mismo día tuvo que hacer una reunión con los nobles pero no quiso avisarle a Kira, el quería hablar personalmente con ella, sin embargo, en aquella sala entró ella cumpliendo su mayor miedo, se enteró de que otra mujer estaba esperando a su hijo.

El emperador terminó la reunión y fue en busca de su esposa pero cuando llegó ella estaba discutiendo con un hombre lo que le activó un recuerdo que al parecer había olvidado, hace poco había descubierto que Kira tenía un amante y pensó que tal vez fuese ese hombre pero terminó arruinando todo otra vez. Ni siquiera pudo explicarle que es lo que había sucedido pero ¿Que iba a decirlo? "No se que fue lo que sucedió" "Fue un error" todas esas frases no servirían de absolutamente nada, ella no lo creería de todas formas.

Todo este tiempo se estuvo sintiendo como una basura, Ayla había perdido el control por culpa de un error suyo y claro, Kira estaba más que enojada con él y como si fuera todo ahora el hermano de su esposa también lo odiaba.

-Esto ya es demasiado -Suspira con pesar pero decide ir a ver a Ayla, después de todo hace unos días que no la veía.

Ayla estaba en el jardín así que el fue hacia allí pero para su sorpresa la niña no corrió hacia el para abrazarlo, ella simplemente lo miró y volteo la mirada a las flores nuevamente

-Ayla ¿Como estas?

-Estoy bien.

-¿No me extrañaste? Estuve algo ocupado estos días y no pude verte

-¿Ocupado con mi hermano? me dijeron que tendrás un hijo

-Bueno, si lo tendré pero eso no significa que voy a dejar de verte

-Ya lo sé, mamá me lo dijo

-¿Tu madre ya te lo dijo?

-Sí, ella dijo que como emperador debes tener mujeres que se llaman concubinas para tener hijos y que el imperio sea próspero. Pero ella dijo que no debo enojarme y que podemos cuidarlo juntas

-¿De verdad dijo eso?

-Si, dijo que ustedes se aman y que tu solo cumples con tu deber de emperador y que no vas a abandonarme

-Ya veo, tu madre es muy sabia

-Lo soy -Aparece Kira

-¡Mamá! -Ayla la recibe abrazándola

-¿Por qué a mi no me abrazas?

-Es que... no me gusta la idea de que tengas muchos hijos porque... te olvidarás de mi

-Jamás me olvidaría de ti hija

-Ya te lo dije Ayla, tu padre te ama mucho

-¿Tanto como a mamá?

Ambos se quedaron en silencio por unos segundos.

-Las amo a las dos por igual hija, no compitas -Kira ve a Dylan sin ninguna emoción en su rostro, lo cual hace que el se sienta mal otra vez.

-Vamos a dormir Ayla, ya es tarde

-¿Podemos dormir los tres juntos?

-Yo digo que si -Habla Dylan

-Hoy no Ayla, otro día, tu padre está muy cansado y mañana debe ver los preparativos para su boda

-Yo..

-¿Se casará con alguien más?

-Si hija, es solo para reconocer ante la gente a la mujer que lleva a tu hermano

-Entiendo mamá, mejor vamos. Adiós papá

-Hasta mañana Ayla

Y así una vez más el emperador se quedó completamente solo en el jardín, se sentía muy solitario hasta que sintió una mano en su hombro, sinceramente esperaba con todo su corazón que sea Kira pero no era así, la persona que estaba ahora a sus espaldas era Alicia, sabe que ella no fue la única culpable pero de todas formas no quería verla.

-¿Se encuentra bien majestad?

-¿Que haces aquí?

-Yo solo paseaba por aquí y lo vi, estoy preocupada por su salud

-Mi salud esta bien -Sin decir nada más se levantó y se fue pero hace segundos atrás, Kira había visto que ambos hablaban en ese lugar por lo que solo se fue sin decir nada. No valía la pena.

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