La Diosa De La Guerra
Mi nombre es Kira Ruiz Arslan, hija de los gobernadores y conquistadores más grandes de la historia, Elena Ayala Ruiz y Heinley Arslan. Los emperadores más poderosos del mundo, desde mi nacimiento siempre lleve una corona invisible sobre mi cabeza con el peso de cien reyes juntos, a lo largo de mi infancia muchos reinos intentaron asesinarme por codicia del imperio que formaron mis padres incluso cuando acababa de nacer fui secuestrada junto a mi hermano, toda mi infancia crecí con mi mellizo Jiro Ruiz Arslan y mi hermana menor Medea Ruiz Arslan, a la temprana edad de tres años aprendí que no podía ser débil. Mi destino estaba sellado, debía matar o morir, mis padres siempre fueron cuidadosos conmigo y mis dos hermanos, no puedo quejarme de eso sin embargo mi vida no es nada fácil, a los 14 años fui a mi primera guerra con el puesto de general con mi hermano pero ningún guardia me tomaba enserio por ser una princesa que vivió toda su vida en un palacio, la vida era complicada si eras mujer, en cambio las órdenes de mi hermano eran como las de mis padres, nadie lo enfrentaba.
Un día, antes de que comenzara la primer batalla mis soldados me tendieron una trampa entregandome al enemigo, ellos intentaron violarme por según ellos ser una belleza la que servía para divertirlos, dejé que mía propios soldados me entregasen al enemigo porque sabía que podría liberarme e infiltrarme en el campo enemigo sin esfuerzos. Me tuvieron atada en una tienda de los brazos, estaba con la ropa rasgada por los maltratos que se me dieron en el transcurso al lugar pero aun debía esperar. Cuando anocheció 5 soldados entraron a la tienda mientras yo me hacía la dormida e intentaron desnudarme pero a penas se acercaron yo liberé mi magia oscura para dejarlos completamente inmóvil, ellos sorprendidos no sabian que hacer pero sin pensarlo demasiado les corte la garganta. Mi vida siempre fue así, mi madre siempre me dijo "En este mundo, a veces para sobrevivir debes matar. Nunca lo dudes" y así era, una mujer como yo debía convertirse en un monstruo para no ser violada o humillada por hombres como esos.
Recuerdo muy bien que ese día salí de la tienda con total sigilo y me dirige hacia la tienda principal donde estaba un pequeño rey planeando sus estrategias mientras se sobaba las sienes por el lío en el que se metió, simplemente entre al lugar donde solo estaba aquel hombre y lo decapité, sin piedad ni remordimientos, luego regresé a mi campamento y frente a la mirada de todos arrojé la cabeza del rey. Rápidamente mi hermano Jiro me abrazó preocupado porque le habían dicho que había sido secuestrada pero le conté lo que realmente pasó y a la mañana siguiente tortura frente a todos a esos hombres asquerosos que intentaron dañarme, los pobres no tenían idea de que se estaban metiendo con una asesina a sangre fría. Sí, en eso me transformé al pasar los años, en una mujer que ya no sentía nada al quitar una vida, una mujer sin sentimientos decían algunos, muchos me llamaban demonio, otros simplemente no creían en esas cosas pero mi imperio siempre me reconoció como "La diosa de la guerra", una mujer invencible a la que amaban sólo porque los mantenía a salvo pero siempre tuve muy en claro que estos simplemente veían su conveniencia en mi.
Años habían pasado desde esa primera guerra, siempre estaba en mi memoria pero me mantenía ocupada con otras cosas, me alejé un poco de mis hermanos pero eso fue porque cada uno tenía distintos problemas que resolver, generalmente yo me encargaba del frente de la batalla para que todos los enemigos vieran que yo, la princesa Kira no era alguien con quien deban jugar. Mi hermano Jiro siempre me apoyaba en batalla pero se encargaba más de asuntos políticos en las fronteras del sur del imperio, por otro lado mi hermana Medea quien era la más tranquila solo se encargaba del pueblo, nunca la entendí realmente, el pueblo siempre le dijo que era una hija ilegítima de mi madre pero ella continuó ayudando a pesar de todo eso, bueno de todas formas ella sabe lo que hace y estoy tranquila porque se que mis padres la entrenaron por la baja posibilidad de que se enfrente a una guerra por si sola.
Vamos al presente, justo ahora estoy viajando a un imperio que casi iguala el nuestro para firmar un importante tratado de paz entre ambos. No soy la que se encarga de esto generalmente pero mi hermano esta arreglando unos asuntos en las fronteras asique mis padres me enviaron en su lugar. Finalmente después de 3 días de viaje llegué, el lugar se ve bastante bien y el castillo es muy hermoso, aunque todo se ve algo desolado.
Sin pensarlo mucho entré al lugar y fui rumbo a la sala del trono donde nos esperaba el emperador Dylan Meyer quien no era mucho mayor que yo, de hecho solo nos llevábamos dos años y admito que era un hombre guapo pero eso no me interesaba en lo absoluto.
-Saludos a su majestad el emperador Dylan Meyer -Dije sin hacer una reverencia y mirándolo directo a los ojos, realmente no debía hacerlo pero al ver hostilidad en sus ojos opté por hacerlo simplemente para terminar rápido este asunto y volver al campo al que pertenecía.
-Es un placer conocerla princesa Kira he oído mucho sobre usted -A pesar de que parece un comentario cortez veo en sus hijos que claramente está intentando burlarse de mi, lo cual no me gusta para nada
-Si no es molestia su majestad, me gustaría ir a descansar después de este largo viaje -Digo sin apartar mi vista de sus ojos lo cual parece convertirse en una guerra de miradas.
-Esta bien, puedes irte -Y así sin siquiera hacer una reverencia simplemente me fui del lugar algo fastidiada por sus aires de superioridad.
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(Kira)
(Dylan)
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Updated 47 Episodes
Comments
Salomé Páez
* ojos *
2024-08-28
1
Marina Hinostroza
Se gustarán?
2023-05-31
1
~√{©£¢%}✓¶🌟💖
El machismo, nunca falta que barbaridad...
2022-12-08
0