Tal Vez Lo Nuestro Era Conocernos, Pero No Estar Juntos

—En eso habíamos quedado, ¿no?

Y sí, en eso habíamos quedado y, pues, por supuesto, había que seguir así. Lo menos que quería era perder su amistad, y como lo he dicho a lo largo de todo: él es mi mejor amigo y una de las cosas más importantes en mi vida.

—Dime que sí porque necesito a alguien a quien joderle la paciencia otros muchos años más.

—¿Y quién mejor que la pendeja esta?

—¡Claro! Por eso te digo.

—Jajajaj, bueno, entonces seguimos como mejores amigos.

Mejores amigos, claro, mientras yo me tenía que tragar todo para no perderlo, cada emoción, cada sentimiento oculto.

—Me voy a descansar, mañana me tengo que despertar temprano.

Lo primero que hice fue escribirle a Sara, necesitaba contarle a alguien desesperadamente.

—Mi vida.

—Dime, mi amor —respondió ella a los minutos.

—Tu pareja fav se acabó.

—¿Cómo así?

Le conté todo y cómo habían pasado las cosas, y su reacción se destacó en su respuesta:

—Bro, ¿a quién no le va a doler que su mejor amigo, y digamos que su novio por una semana, te diga cosas tan hirientes sin pensar en tus sentimientos? Comprendo que él lo dijo y se expresó, pero ¿no se detuvo a pensar en lo que te podía causar diciendo esas cosas? La palabra “aburre” marca, y mucho. Realmente, desde que conozco a Josh, siempre me sorprende la manera en que habla y expresa las cosas, y bro, qué bien, pero... contigo de esa manera, me hace odiar eso de él. —Me sorprendió su respuesta, la verdad. Fue tan sincera.

—Y no quieres que te muestre lo que me dijo totalmente. Ni yo lo conocía así.

—¿Ves? ¿No es que es tu mejor amigo? ¿Y luego qué? ¿Pretende que luego llegues y lo abraces y le digas “hola, mejor amigo, ¿cómo estás hoy? ¿No estás aburrido?” ¿Eso quiere? Y luego dice que eres tú... O quizás no sea así, pero tú eres mi amiga, no Josh, y por más aprecio que le tengo, nunca lo escogeré a él, y que haga esto me recuerda que nadie es perfecto, que todos cometemos errores y que es normal que cuando estamos tratando de evadir un tema digamos cosas así, está bien. Pero el hecho de que lo haya hecho contigo es molesto... Solo digo que Josh no sabe lo que hace y solo puedo decir que fue un inmaduro tratando esta situación porque en el primer momento solo dejó todo así, ¿y ya? ¿Ofendiéndote, diciendo que le “aburriste”? Bro, ¡qué maldito inmaduro!

—Mi vida, relájate, no quiero que se lleven mal por mi culpa, no es justo. Y sí, tienes mucha razón, pero son cosas que pasan y no podemos hacer nada.

—Pero no es eso, te ofendió, ¿okay? ¿Y eso era necesario? ¡Claro que no! ¿Y por qué lo hizo? Porque se la tira de maduro, pero al fin y al cabo es un inmaduro que no sabe controlar situaciones serias. Él no fue el que empezó con todo, pues sé tú el que le dé sentido a todo, pero no, él solo vio que te molestaste y dijo “no doy para más”. Así me da a demostrar que no es el hombre maduro que aparenta con su maldita labia que se carga. —Lo peor es que tenía razón en todo, pero yo no podía reclamarle nada a él, sabía las consecuencias de todo y no importa, sigo teniendo su amistad y es lo mejor para ambos, creo... O al menos eso me decía a mí misma.

Después de la charla nos despedimos y simplemente me acosté a dormir. No lloré más, mi habitación estaba oscura y en silencio, silencio que me consumió hasta quedarme dormida.

A la mañana siguiente desperté normal, muy normal, a decir verdad. Desayuné con mamá y charlamos un poco, luego la ayude a recoger las cosas y dejar todo limpio y ordenado, luego subí a mi habitación y me di una duchada rápida. Preparé palomitas y me acosté en el sillón de la sala y puse una peli. no cualquier peli, era la saga completa de tinkerbell, hay que respetar

Estaba muy interesante e iba por mi segundo tazón de palomitas cuando mi cel sonó.

Josh —Oe, ¿podemos hablar?

—Sí, dime.

—Es que llevo rato pensando algo. —

Y yo acabando de despertar —yo, aligerando el ambiente, soy una mrd—, cuéntame.

—Es que estuve pensando las cosas que dije ayer y sé que dije muchas cosas que no debía y de las que estoy arrepentido y me quiero disculpar sinceramente contigo.

—¿Ah sí? —respondí un poco sorprendida, ¿el Josh que yo conozco dejando su orgullo? Eso era nuevo.

Para mí era raro, después de todo lo de ayer no creí que fuera a pedir una disculpa, creí que haría como si nada y ya, pero aparentemente no fue así. Estaba genuinamente sorprendida por su gesto inesperado.

—Sé que dije cosas malas, pero no siento nada de eso. Ahora que estoy pensando con la cabeza fría, puedo ver que dije cosas muy malas.

—Muy malas

—No tienes que recalcarlo. Solo quiero que me des otra oportunidad y hacer las cosas bien de verdad.

Pensé por un momento y solo dije

—Déjame pensar y te digo, estoy algo ocupada

Claramente, la saga es más importante.