Dicen que lo prohibido es mas tentador y se desea con locura, es lo que ocurre en esta historia Zoe se encuentra en una gran contradiccion se ha enamorado u obsesionado con el unico hombre prohibido para ella, su vida cambiara drasticamente a causa de ese sentimiento.
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Cap 10: Mancha
Regresamos a clases luego de las festividades navideñas y de año nuevo.
Muchos de mis compañeros presumiendo, nuevas bicis otros con escúter, patinetas incluso motocicletas.
Muchos hablaban de sus obsequios navideños o de lo que compartieron en familia, me mantuve en silencio tocando la medalla que colgaba en mi cuello.
Era el collar que me envió Lucho.
Hasta que uno de mis compañeros dijo que nadie la hacia pasado tan bien como yo, que estuvo en el recital aunque en los últimos asientos, pero fue increíble, no pude evitar sonrojarme.
Kendra lo secundo y todos comenzaron a felicitarme y muchos alabaron el hecho de los obsequios para niños de bajos recursos, permanecí en silencio, pues soy de las personas que piensan que tu izquierda no debe comentar lo que la mano derecha da.
Agradecí que el profesor de inglés llegara y diera inicio a la clase.
Sentía la mirada profunda de Carlos y sinceramente comenzaba a exasperarme.
A la salida vi a varios chicos reunidos y a Carlos al medio, ellos le cobraban a viva voz, no comprendí, pero tampoco le di importancia.
No fue sino hasta el otro día que un compañero me comentó que Carlos recibió una golpiza por no pagar por una apuesta.
No hondee en detalles, la verdad estaba muy decepcionada de él y no deseaba que rumores de que me importaba y me preocupaba por él circularan.
Kendra por su parte al ser tan curiosa le pregunto a los chicos de la banda y estos le dijeron que ellos fueron unos de los que lo golpearon, que apostaron a que me llevaba a la cama, debía hasta filmarme en el acto, me sentí asqueada y comprendí tanta insistencia en que lo hiciéramos.
La paliza que le dieron será nada para cuando lo vea espete furiosa y con las lágrimas amenazando por salir.
Estuve distraída toda la clase y con un fuerte dolor de cabeza.
Por lo que faltando dos clases fui a la coordinación para pedir ausentarme por enfermedad.
El coordinador llamó a mi madre, pero estaba acompañando a mi abuela a una cita médica, dijo enviaría a alguien por mí.
Minutos más tarde Jorge llego, tan pronto lo vi, no pude contenerme y llore en su pecho.
Miro al coordinador quien estaba atónito.
Que le hicieron pregunto molesto.
Jorge por favor quiero ir a casa, susurre y el solo asintió.
Me entrego un casco y subí a su moto.
Me llevó a casa y comenzó el interrogatorio, no me quedo de otra que decirle la verdad, estaba tan furioso que la vena en su cuello parecía explotaría.
Voy a matarlo repetía mientras caminaba como león enjaulado, lo tranquilice diciéndole que no podía o iría a la cárcel.
Carlos se ausentó el resto de la semana, pero mi furia no disminuya.
El lunes tan pronto lo vi llegar, camine como poseída por una fuerza sobrenatural y le plante dos cachetadas que resonaron en el lugar, el pasillo bullicioso quedo en completo silencio.
Nunca te vuelvas a acercar a mi idiota dije con voz amenazante y giré para marcharme.
Los murmullos se hicieron presentes y varias chicas me felicitaron por ponerlo en su sitio.
Fui llamada a rectoría y me levantaron mi primera acta por mal comportamiento, una mancha en mi impecable hoja académica.
Mi madre fue convocada y no me quedo de otra que decirle lo ocurrido, estaba enojada, pero no conmigo me felicitó y dijo que debí golpearlo más.
Fui la plática por días hasta que algo más ocurrió y superaron el tema.
Semanas mmástarde recibimos una visita inusual, llegue del colegio y vi un auto negro en la entrada.
No le di mucha importancia y entre, grande fue mi sorpresa al ver a Lucho sentado en el sofá.
Mi madre me dedico una mirada un tanto rara.
Zoe tu pa, se frenó antes de terminar la palabra, Luis quiere hablar contigo, asentí y la vi ir a su habitación.
Me senté en el sillón de enfrente, mirando a mi progenitor era innegable soy una versión suya pero femenina y más hermosa claro esta.
Y bien mis palabras salieron más ásperas de lo que quería.
__Zoe hija, sé que no tengo como recuperar el tiempo perdido, también sé que he comido muchos errores, pero quiero pedirte perdón__ lo mire incrédula mientas pensaba Luis Flores pidiendo perdón esto si es nuevo pareció notarlo porque sé acercó un poco.
__Hija no he sido el padre que merecías__ ja ni que lo digas pense __ Solo deseo resarcir un poco todo lo malo__
Lo miré fijamente buscando donde estaba el engaño, cuál era la trampa.
__Y según tú como vas a reparar más de 14 años de ausencias__ dije tratando de parecer indiferente.
Zoe pronto cumpliras tus 15 años y quiero poder ser parte de la celebracion, sé que no tengo derecho, pero es algo importante para una chica y yo, oooo lo vi vacilante, yo quiero celebrar a tu lado ese momento especial__
Suspiro luego de decirlo como cuando te liberas de algo muy pesado, su mirada me dio ternura, pero me recompuse.
Lucho yo no tengo problemas con ello, pero te advierto no quiero ninguna trampa, como la anterior, nada de compromisos, ni ventas como de ganado o no volveré ni a mirarte nunca jamás.
Lo prometo fijo con una sonrisa tímida y levantando su mamo derecha.
Una condición más no quiero a las brujas, ni a tu padre, solo tú y mis hermanos
Lo vi poner cara de asombro, no sé si por llamarlas brujas o decir mis hermanos.
Será como tú quieras, es tu cumpleaños y puedes invitar a quien desees, esta semana una organizadora de evento vendrá para coordinar todo a tu gusto, solo asentí.
Puedo darte un abrazo dijo titubeante.
Lo abracé con fuerzas y fue imposible no llorar, había esperado tanto tiempo un abrazo de su parte, que parecía un sueño.
Lucho también lloro pidiéndome perdón nuevamente, no sé cuanto tiempo permanecimos abrazados, pero al levantar la vista mi madre nos observa con lágrimas en los ojos su teléfono en mano y podría jurar que nos tomó fotos del momento.
Sonreí y limpie mis ojos, la camisa perfecta de mi padre estaba mojada con mis lágrimas y pensé que se enojaría por lo que busque algo para limpiarlo, pero me detuvo dándome otro abrazo y un beso en cada mano.
Lucho se despidió un rato después prometiéndome vernos el fin de semana, dejo un beso en mi frente y me fui imposible no compararlo con el de Jorge, pero al igual que con Pablo y Kevin no sentí nada inusual, aunque fue muy lindo.