Diosa Reencarnada

Una vez que se marchan los reyes de Valkovia y su hija Irina.

Egor, está más feliz que nunca, se siente muy satisfecho por lo que le hizo a la princesita, sin un ápice de arrepentimiento, con una inmensa sonrisa, va al salón de prácticas. No obstante, recuerda la profecía de Irina, decide tomar otra ruta, para evitar a aquella plebeya.

Al estar en las prácticas de espadas, llega la mujercita a traerles unos bocadillos y bebidas refrescantes, lo cual todos aceptan, pues la mujer es bastante atractiva y muy coqueta, pero Egor, firme con sus pensamientos, evitó consumir lo que le traía de forma especial para él.

-Doncella no hemos pedido ningún alimento, durante las prácticas, no podemos llenarnos los estómagos con demasiados alimentos pesados, le agradezco no vuelva a aparecerse sin ser requeridos sus servicios, de lo contrario será despedida- la mira con desconfianza.

-Disculpe mi atrevimiento majestad, solo quería ofrecerle una bebida para que recupere sus energías- baja la mirada, intenta dársela de víctima, con los ojos llorosos, sollozando quiere tomarlo del brazo.

- ¡Mujer Insolente!, ¡No te atreve a tocarme sin mi consentimiento!, y no voy a tomar absolutamente nada de lo que ofrece, ya tengo agua que es lo único  que necesito ¡Lárgate!- le grita el príncipe ya perdiendo la paciencia.

La mujer se va llorando, pero nadie se atreve a contradecir al príncipe heredero. Larisa no entiende, por qué el mujeriego del principe, no ha caido ante sus tretas y encantos, deberá elaborar un nuevo plan con Tobías y Lucio.

Al finalizar la práctica de espadas; Egor llama a parte, a Elías, su caballero personal y le solicita:

-Elías conviertete en sombra y vigila a esa plebeya llamada Larisa Popov, parece que no tiene buenas intenciones conmigo-

-Lo que usted ordene, alteza- Elías se aleja.

A los pocos días, Elías le trae el informe,

- La plebeya Larisa Popov, es la amante del Conde Tobías Portela,  y de otro noble aquí en Palacios, todavía no lo he decifrado. Ella es de origen humilde, oriunda del Imperio Prustino, sin embargo, es una gran conocedora de brebajes y pociones para usos indebidos e ilegales, como son aquellos utilizados para deseos sexuales, venenos, hechizar la mente, doblegar voluntades de personas, etc. Los cuales acostumbra vender a clientes especiales a muy altos precios - termina el informe Elías.

-Entonces, mi pequeña prometida tenía razón, hay que sacar a esa mujer de este palacio de inmediato, y debes mantener vigilado al Conde Portela-

Egor, se acerca a la Emperatriz Yulia:

-¡Madre, por favor despide a la plebeya Larisa Popov! Está intentando hacerle daño a la familia Imperial, debemos evitarlo- Ahora cree ciegamente en las predicciones de Irina, a quien no puede olvidar, el deseo por volver a poseerla no abandona sus pensamientos, aunque lo niegue.

Egor conversa con su madre, la Emperatriz Yulia.

-Hijo, ¿De dónde sacas esas locas ideas? Ella es sobrina del eunuco Lucio, el edecan personal de tu padre, no sería bien visto si se despide- contesta la Emperatriz un tanto inquieta, esa mujercita nunca le gustó.

-¿Acaso tienes prueba de su mal proceder?- pregunta Yulia, con cautela, sabe que Pável, no la dejará despedirla.

-Ella está intentando seducirme, si no quieres tenerla de nuera, y que deje mi compromiso con la Princesita Irina, es mejor que la despidas, bajo cualquier pretexto, o trasládala a algunas de los palacios vacacionales, pero la quiero fuera de mi vista, y lejos de mi hermanita, si no se va ella, entonces me iré yo- dice con determinación Egor

-¿No se por qué actúas de esa manera?

pero, está bien la mandaré al palacio de Las Gardenias- la reina suspira, se le viene una gran discusión con Pável, pero para ella su hijo es lo primordial, no permitirá que esa arribiste se acueste con el padre y también con el hijo.

-Madre no confíes mucho en esa familia, no son de fiar, aunque el eunuco Lucio haya vivido aqui desde niño, es mejor mantenerlo vigilado, ahora tiene 30 años, puede tener otros intereses- analiza Egor

Egor, al conocer los sucesos, inicia una comunicacion por cartas con Irina, quiere saber más detalles de lo que pasará con su familia, ahora si confia en sus extrañas premoniciones, y quiere mantenerla de su lado, de alguna manera le atrae mucho esa chiquilla.

Una vez en su Reino, al pasar una semana, Irina se prepara para asistir a la Torre de Magos. Para su sorpresa, recibe correspondencia del Príncipe Egor, lo que nunca se esperó:

"Estimada pequeña prometida, he investigado a la plebeya Larisa Popov como me dijiste, y no te equivocaste en tus predicciones, sí es amante del Conde Tobías Portela. Se me está insinuando constantemente, lo que ahora veo con claridad. He intentado que mi madre la despida, pero dice que es sobrina del Eunuco Lucio, edecan privado de mi padre, le propuse la traslade lejos de mi vista, pero se puso a llorar, suplicándole a mi madre aue no lo haga,

Sin embargo, me puse firme en mi decisión, y al final se va a trasladar, aunque el edecan Lucio, está muy molesto. Espero sigamos manteniéndonos en contacto. Cuéntame de ti. ¿Qué haces? Te parecerá inspropiado lo que sucedió aquella noche, pero no he dejado de pensar en ti, después de todo sigues siendo mi prometida. Me dejaste con deseos, de volver a verte.

Saludos de tu Prometido PH Egor Novikov"

<¿Y a este idiota qué mierda le pasa? ¿Cree que me voy a desvivir por él, después de todo el daño que me hizo? Aunque, pensandolo bien, supongo que es mejor mantenerlo de mi lado, conocer los acontecimientos del Imperio a través de él, para destruirlo por completo, cuando menos se lo espere. Voy a contestarle> se dice a sí misma Irina.

*Príncipe Egor: Aunque no tengo buenos recuerdos de aquella noche... Vamos a tratar de llevarnos lo mejor posible. Puedo ver que ahora confías en mis predicciones del futuro. Por ahora, mantente alejado de esa mujer y te aseguro que estarás a salvo. E investiga al Eunuco Lucio, es un resentido, al parecer uno de los nobles del Palacio lo violó de niño, y el Emperador no dijo nada; naturalmente, lo odia y quiere verlo muerto...

Larisa prepara unas pociones venenosas que hacen efecto tardío, los síntomas son: debilidad, dolor de cabeza, temblores, dolores en los musculos, finalmente perderá el gusto, olfato y la visión y luego fallecerá la persona inevitablemente. Espero haber sido de utilidad.

Pronto comenzaré mi entrenamiento para ser la "mejor Emperatriz". Saludos de la Princesa: Irina Smirnova.*

Irina, sonríe para sus adentros, piensa: se repite Irina con una media sonrisa.