Cosecha De Pasiones

Con el corazón latiendo con fuerza en el pecho, Alonso se apresuró hacia la pequeña sala justo a tiempo para ver a Sofía y a Beatriz salir de ella, sus miradas se encontraron en un momento de complicidad.

Sin perder ni un segundo, Alonso se acercó a Sofía, su determinación brillando en sus ojos mientras buscaba la oportunidad de hablar con ella a solas.

- Sofía, necesito que hablemos - hablo con voz suave y firme - ¿Podemos tener un momento a solas?

Sofía asintió con una sonrisa alentadora, antes de entrar a la pequeña sala con Alonso.

Una vez dentro, Alonso cerró la puerta detrás de ellos, creando un espacio íntimo y privado donde pudieran hablar con franqueza.

Alonso acortó la distancia entre ellos, tomo a Sofía por la cintura y con voz suave le dijo.

- Sofía, sé que las cosas han estado tensas, y que me has estado evitando. Yo he estado luchando con mis propios sentimientos, y por eso necesito que sepas que yo te amo, y que voy en serio contigo, solo te pido una oportunidad.

Sofía lo miro con atención, sus ojos buscando los suyos en busca de la verdad detrás de sus palabras.

- Alonso - hablo Sofía con una voz suave - Yo también estoy luchando con esto que siento, y ya no puedo negarlo más, ya no puedo ser egoísta con lo que siento por ti.

- Entonces, ¿Me das la oportunidad de amarte? ¿Me aceptas?

Sofía asintió, aceptando sus palabras de amor. Alonso dibujó una enorme sonrisa en su rostro y luego acercó más a Sofía hacia su cuerpo, y la beso.

Ella entrelazó sus brazos en el cuello de Alonso, mientras él con una mano la sostenía de la cintura y con la otra la tomaba por el cuello. La besaba con deseo, la apretaba hacia su cuerpo.

Ese beso desató un torbellino de emociones, deseos y pasiones, que los envolvían en un remolino de sensaciones abrumadoras.

Un impulso ardiente empujaba a Alonso hacia Sofía. Con una intensidad abrumadora, sus labios ya no reprimieron sus emociones contenidas.

Sofía, sorprendida por la ferocidad del beso Pero incapaz de resistir a su atracción mutua, respondió con la misma intensidad, fundiéndose en el abrazo apasionado de Alonso mientras sus corazones latían al unísono en un ritmo frenético.

En ese momento, en la penumbra de la pequeña sala, el mundo entero pareció desvanecerse a su alrededor, dejando solo espacio para ellos dos y su conexión ardiente y poderosa. Cada caricia, cada suspiro, resonaba en el aire cargado de electricidad, mientras el deseo y la pasión los consumía por completo.

Y así, en el calor del momento, Alonso y Sofía se encontraron a sí mismos, explorando los límites de su deseo mutuo y descubriendo el amor que ardía entre ellos con una intensidad casi palpable. En ese instante, el universo parecía detenerse ante la magnitud de su unión, mientras se entregaban al torbellino de emociones que los unía en apasionadamente.

El sonido repentino del toque en la puerta rompió el hechizo del momento, sacando a Alonso y Sofía sé su mágico momento devolviéndolos a la realidad de la pequeña sala.

Alonso y Sofía se separaron, cargados de deseo y emoción mientras se enfrentaban a la repentina interrupción. Con un suspiro resignado, Alonso se acercó a la puerta y la abrió, revelando a Beatriz del otro lado, con una expresión expectante en su rostro.

- Disculpen que los interrumpa, Pero ya están a punto de dar el premio al mejor vino del año. ¡Tenemos que ir!

Sofía y Alonso intercambiaron una mirada rápida, compartiendo una sonrisa cómplice antes de seguir a Beatriz fuera de la pequeña sala hacia la emocionante ceremonia que les esperaba.

- Beatriz, danos un minuto, ya salimos. - le pidió Sofía a Beatriz.

- Está bien, pero no sé tarden.

Beatriz salió de la pequeña sala. Y los dejo solos para qué terminarán de hablar.

- Alonso, quisiera pedirte por favor, que mantengamos esto en secreto. Solo será por un poco tiempo.

Alonso llevó hasta su pecho, la beso en la frente y le dijo

- Yo hago lo que tú quieras, cuando estés lista haremos pública nuestra relación.

- ¡¡¡Gracias, muchas gracias!!! - le dio un dulce beso en los labios - Ahora déjame salir primero a mí, para no levantar sospechas.

Se dio la vuelta y salió de la pequeña sala, rumbo a dónde sería la premiación.

Alonso salió luego de un par de minutos irradiando felicidad.

- Los participantes de la competencia de vinos, por favor acercarse al escenario principal. Empezaremos en 5 minutos.

Se escuchó una voz femenina.

Todos se reunieron frente al escenario, para escuchar el resultado del concurso.

- Bienvenidos a todos, y sobre todo a nuestros destacados vinicultores, al concurso del mejor vino de la región.

Todos los presentes aplaudieron al unísono.

- Esto comenzó como un pequeño festival local, y al pasar el tiempo y con el apoyo de todos ustedes se ha convertido en un evento de nivel regional. Dónde se pueden disfrutar de los mejores vinos de la región.

Todos los presentes volvieron a aplaudir. El ambiente era muy festivo.

- Elegir al ganador de este año, ha sido muy difícil, ya que todos los competidores crearon vinos exquisitos, que reflejan el amor y la pasión por lo que hacen. Ahora sin más demoras el premio del Mejor Vino es para el Cabernet Chianti del Viñedo De Luca.

Todos aplaudieron, la familia De Luca estaba muy feliz y emocionada.

Don Eduardo subió a recibir el premio, acompañado de Sofía y Emma.

- Quiero agradecer, a todos por este premio, que es gracias al gran trabajo de mi hija Sofía - dijo y abrazo a Sofía.

Todos aplaudieron. Luego bajaron del escenario. Alonso y Leonardo se acercaron para felicitar a los De Luca.

- Muchas felicitaciones por ese premio - le dijo Alonso, mientras miraba a Sofía con un brillo especial en los ojos.

Y Leonardo no le quitaba los ojos de encima a Beatriz.

- Bueno, es tarde ya. Y este viejo está algo cansado - dijo divertido Don Eduardo.

Todos se estaban retirando cuando Leonardo se acercó a Beatriz y le dijo al odio.

- Bet, por favor, estaré aquí hasta el miércoles, por favor escríbeme para que nos veamos y podamos hablar.

Ella solo asintió y salió de la bodega. Mientras con un gesto significativo, Sofía se despidió de Alonso, estrechando su mano con una mezcla de emociones que no podía ocultar. En ese breve contacto, intercambiaron miradas cargadas de complicidad y promesas no dichas, cada uno sabiendo que este no era adiós definitivo, sino más bien un hasta luego lleno de posibilidades.

Cuando finalmente se separaron, Sofía dejo discretamente un pequeño papel en la palma de la mano de Alonso, un gesto que no pasó desapercibido por ningún de los dos. Al abrirlo, Alonso descubrió el número de Sofía, escrito con una caligrafía elegante, una invitación silenciosa a continuar la conversación que habían comenzado esa noche.

Con una sonrisa en los labios y el corazón lleno de esperanza, Alonso guardo el papel en su bolsillo, sabiendo que era el comienzo de algo nuevo y emocionante entre él y Sofía.