El Alfa Enamoró Al Amigo Del Protagonista

POV Jacob

Después de la confrontación con Edric, las cosas tomaron un giro inesperado. Edric hizo un esfuerzo sincero por demostrar que sus sentimientos eran genuinos. Cada gesto, cada palabra, estaba imbuido de una determinación que no podía ignorar.

A pesar de mi resistencia inicial, comencé a ceder lentamente. Me di cuenta de que, a pesar de toso, todavía tenía fuertes sentimientos por Edric. No podía negar la conexión que compartíamos, una conexión que iba más allá de mera atracción física.

Sin embargo, había otro asunto pendiente que sabía que debía abordar, Liam. Después de haber usado a Liam como un escape para olvidar a Edric, me sentía culpable por haberle dado falsas esperanzas. Decidí que era hora de enfrentar la situación de frente y hacer las cosas bien.

Tomé el teléfono y llamé a Liam, explicándole honestamente como me sentía y disculpándome por cualquier dolor que pudiera haber causado. Aunque Liam estaba naturalmente decepcionado, apreció mi honestidad y aceptó la disculpa. Con un peso menos en mi consciencia, pude concentrarme en resolver las cosas con Edric.

A medida que pasaban los días, Edric y yo pasamos más tiempo juntos, reconstruyendo nuestra relación sobre una base de comunicación abierta y honesta, Había momentos de tensión y dida, pero también había momentos de risa y complicidad que me recordaban por qué me había enamorado de Edric en primer lugar.

A medida que nuestra conexión se fortalecía, me di cuenta que mi corazón pertenecía a Edric, a pesar de todos os obstáculos que habíamos enfrentado. Me sentía agradecido por tener una segunda oportunidad para hacer las cosas bien, para construir algo real y significativo con el hombre que amaba.

Salir del trabajo era siempre un alivio. Después de una jornada agotadora, ansiaba la tranquilidad de mi hogar, sin embargo, esa tarde fui recibido por una sorpresa inesperada en la recepción.

Allí, de pie, con un ramo de flores en la mano, estaba Edric. Su presencia me tomó por sorpresa, y mi corazón comenzó a latir con fuerza en mi pecho.

Edric me entregó el ramo con una sonrisa encantadora, y mis mejillas se encendieron de inmediato. La sorpresa y el gesto romántico de Edric me dejaron sin palabras.

-¿Para mí?- Pregunté, sintiéndome abrumado por la dulzura del gesto.

-No, son para mi amante.- Dijo Edric con una sonrisa traviesa.

-Eres un idiota.- Reí suavemente.

-Son para ti, quería alegrarte el día.- Respondió con sinceridad.

Acepté el ramo con gratitud, sin poder evitar sonreír ante la atención y el afecto de Edric. Las flores eran hermosas, y el simple hecho de que Edric las hubiera elegido para mí me llenaba de alegría y emoción.

-Gracias, Edric. Son preciosas.- Dije, tratando de expresar mi gratitud.

Edric me miró con ternura, sus ojos brillando con una mezcla de amor y cariño.

Me alegra que te gusten. Solo quería recordarte lo especial que eres para mí.- Dijo con suavidad.

Mis ojos se encontraron con los suyos, así que con el ramo de flores en la mano y el corazón lleno de amor, me dirigí a casa junto a Edric, agradecido por tenerlo a mi lado una vez más.

Mientras caminábamos hacia mi departamento, con el ramo de flores iluminando nuestro paso, Edric me miró con determinación, sus ojos buscando los míos.

-Jacob.- Comenzó, con un tono serio, pero lleno de sinceridad. -Quiero tomarme las cosas más en serio contigo. Quiero que sepas que no solo eres alguien especial para mí, sino que también desearía formalizar nuestra relación, si tú estás de acuerdo, por supuesto.-

Sus palabras salieron con fluidez, sin titubeos ni dudas. Edric sabía lo que quería y parecía estar dispuesto a luchar por ello.

Lo miré con sorpresa y alegría en mis ojos, y mi sonrisa iluminó mi rostro.

-Edric.- Dije con mi voz llena de emoción. -No sabes cuánto tiempo he esperado escuchar esas palabras de tu boca. Estoy completamente de acuerdo en formalizar nuestra relación.-

Un suspiró de alivio escapó de los labios de Edric, y una sonrisa de felicidad se extendió por su rostro. Sabía que sentía una oleada de alegría y gratitud, sabiendo que estábamos dando un paso importante juntos.

Edric tomó mi mano con la suya, sintiendo la calidez de su piel contra la mía, y supe que estábamos en el camino correcto.

El beso que compartimos en ese momento fue una celebración de nuestro amor y compromiso mutuo. Con el ramo de flores en una mano y la otra entrelazada con la de Jacob, nos abrazamos con pasión y ternura, sellando nuestro acuerdo con un beso lleno de promesas para el futuro.

Las emociones se entrelazaron en ese instante, fusionando nuestros corazones y fortaleciendo nuestra conexión.

Después del beso nos miramos el uno al otro con amor y complicidad  y con una sonrisa radiante, continuamos nuestro camino hacia casa.