Amor, Te Odio

Dasha Tosheva, había estado viajando, no sabía nada de la desaparición de Mylan y el matrimonio de Dylan, cuando llegó lo primero que hizo fue llamar a su prometido, pero el número salía fuera de servicio, entonces llamó a su amiga Alana.

"Lo siento, todo pasó tan rápido, que olvidé comunicarme contigo" Dijo Alana.

"Nana, esto no es cualquier cosa, Mylan puede estar muerto y Dylan se casó con su mujer, no te lo perdonaré y tu hermano me va a escuchar" Dijo Dasha.

"No vayas a buscarlo, el está investigando y puedes estropearlo, acepto mi culpa, pero no sabes lo difícil que ha sido peder a un hermano y no saber si aún vive" Dijo Alana.

Dasha agarraba el celular con fuerza, mientras simulaba a través de la línea pasividad "Dame el número de Dylan"

Cuando Alana le dio el número, Dasha colgó la llamada y lloró, ella conocía a la familia Volkova desde que era una niña y Mylan era importante.

1 año atrás

"¿Dasha que buscas? La fiesta es afuera" Preguntó Mylan. Era la fiesta de 15 de Nina, su hermana menor.

"He bebido mucho y busco una cama caliente" Dijo la mujer arrastrando las palabras.

"¿Me estás coqueteando?" Preguntó Mylan riendo, él también estaba pasado de copas, pero ella era la novia de su hermano.

"Quiero compañía y tu hermano está en el despacho ultimando detalles de una compra, estoy cansada de rogarle atención" Dijo Dasha mientras metía la mano dentro del saco del hombre.

"¡Dasha Detente! Eres la novia de Dyl... Yo... Sabes que no podré detenerme si empiezas, recuerdas aquella vez..."

"Sí, estoy recordando aquella vez en la universidad cerca a los vestidores. Dyl no me ha tocado nunca, ni lo notará, el solo tiene ojos para Luna, su linda Luna"

"No lo creo ¿En serio?" Preguntó Mylan incrédulo.

"Lo juro, bésame" Dijo Dasha y Mylan accedió.

Presente

"No puedes estar muerto Mylan" Lloró Dasha.

Después de calmarse un poco, compró un boleto y se fue a Estados Unidos, cuando llegó a la mansión ingresaban varios aparatos clínicos y una a mujer en una camilla.

Luego ingresó un taxi y se bajó una rubia, Dasha se bajó del auto e intentó entrar, pero fue detenida "Lo sentimos señorita ¿A quién necesita?"

"Vengo a ver a Dylan Volkova" Dijo Dasha y en ese instante antes de ingresar a la mansión Sophia volteó.

Cuando la rubia escuchó el nombre se acordó de lo que le había dicho Justin, supo de inmediato que era la prometida de su esposo, la abogada.

Sophia la dejó entrar y la mujer detalló el lugar, a Sophia le pareció una linda mujer aunque traía un aspecto desaliñado "Estás en tu casa, pronto Dylan vendrá"

"¿Eres la esposa de Dylan?" Preguntó y Sophia asintió.

"¡Eres una maldita!" Gritó Dasha lanzándose encima de la rubia.

Dylan ingresó en ese instante tomando a Dasha por la cintura y alejándola de su esposa.

"Eres un maldito ¡Suéltame!" Gritó Dasha.

"Primero Cálmate" Dijo Dylan.

"¿No te ha tocado cierto? Seguramente es gay ¿Es eso?" Preguntó Dasha como loca.

"¿Estás ebria?" Preguntó Dylan intentando calmarla.

"Me voy para que despejes sus dudas y le des una respuesta a su pregunta" Dijo irónicamente Sophia y Dylan clavó en ella una mirada cargada de furia.

Sophia subió a ver a su madre, se sentía confundida, deseaba que despertara pronto para que la aconsejara, el beso de Dylan la tenía con mariposas en su estómago y deseaba con todo su corazón que algún día le creyera.

"Madre con esto concluyo de que el amor de Dylan es Luna, la famosa pelirroja. Yo no tengo amor, creí tenerlo, pero me equivoqué. Siempre he sido abandonada, primero por mi padre, mi hermana, aquel novio de la universidad John ¿Recuerdas?, Mylan..." Sophia lloró "Lo más probable es que también Dylan me abandone algún día ¿Y tú madre? ¡Por favor no me dejes!"

Por otro lado, Dylan se disculpó "Dasha, lo siento, esto fue rápido y necesario para encontrar a Mylan"

"En la fiesta de 15 años de Nina, me acosté con tu hermano" Soltó la mujer.

Dylan la observó fijamente, era una realidad que no la amaba, pero pdiaba a las personas hipócritas y engañosas, entonces apretando au mandíbula dijo "Por mucho tiempo me sentí culpable por no darte el amor que merecías, eres una buena chica, pero con esta confesión me siento tranquilo, yo nunca te falté y pensaba divorciarme más adelante y cumplir mi promesa, pero ahora todo está dicho, te puedes quedar esta noche, mañana no quiero verte aquí" Dijo Dylan yendo a su despacho.

Dasha lloró, no sabía por qué lo había dicho, tal vez eran las copas, o quizás quería ver enojado a Dylan o lo más probable es que quisiera quitarse ese peso de encima. Karoll se acercó a la mujer y le indicó el lugar donde dormiría.

Sophia se encontraba en sí habitación, había dejado a la enfermera con su madre y ella deseaba descansar, de repente alguien irrumpió su espacio.

"Hola" Dijo Dasha.

Sophia vio su maquillaje vuelto nada y le hizo señas para qué entrara "Si me prometes que no acabarás conmigo, puedes quedarte" Sonrió y Dasha devolvió el gesto.

"¿Crees que Mylan vive?" Preguntó la mujer mientras se sentaba en la cama, Sophia era la última en verlo, tal vez podía darle alguna esperanza.

Sophia frunció el ceño, su prometido era Dylan, pero ella preguntaba por otro hombre "Espero que si, pensé que estarías con Dylan"

"Está enojado, le confesé mi engaño, pero siento que no podía ocultarlo más, él ha sido como un hermano mayor que de vez en cuando me daba sus besos furtivos" Confesó Dasha.

"¿Engaño?" Preguntó Sophia.

"Hace un año en la fiesta de cumpleaños de Nina tuve sexo con Mylan" Lloró Dasha.

Sophia quedó inmóvil, una vez más su decepción por su ex esposo aumentaba, sus ojos se cristalizaron, para evitar que Dasha lo notara se levantó y dijo "Traeré agua para que te tranquilices"

La rubia había salido sin percatarse de que no llevaba su albornoz encima, la impresión la había hecho escapar de la situación y salir hasta con los pies descalzos, cuando llegó a la cocina lo primero que hizo fue abrir el refrigerador y sacar una botella con agua que bebió con precipitación.

Unos ojos verdes la asediaba desde un rincón, Dylan había ido por hielo para beber en su despacho y fue sorprendido por una belleza deambulante que invadió su espacio "¡Vaya! ¿Qué te tiene tan agitada?"

"¡Aaaaaahhh!" Gritó Sophia dejando caer la botella al piso "¡Eres un idiota!"

Dylan se acercó sonriendo "Me lo has dicho tantas veces que me lo estoy creyendo" Dijo buscando una toalla para secar.

"Podrías avisar cuando entre..."

"Te avisé, pero gritaste" Dijo el hombre con una toalla en sus manos.

Sophia volteó los ojos, le arrebató la servilleta, la tiró al piso y secó.

"¿No puedes dormir?" Preguntó el guapo hombre.

"Tú invitada está en mi habitación" Dijo la mujer, tiró en el bote de basura la servilleta, sacó otra botella con agua y se marchó.

Antes de salir Dylan la tomó sutilmente por el brazo "No vuelvas a salir tan provocativa"

"¿Te excitaste?" Preguntó Sophia con ironía.

"Ya quisieras, pero no, mis hombres hacen rondas por toda la casa, no quiero que ninguno te vea así" Dijo el hombre y Sophia asintió.

"Debo llevarle agua a tu novia"

"Te acompaño, no quiero que te haga nuevamente un show" Dijo Dylan.

Al ingresar la mujer se había adueñado de la cama y estaba profunda, Dylan apenado dijo "Puedes dormir en mi habitación, yo me quedaré en el despacho"

"¿Estás bebiendo?" Preguntó Sophia mientras se colocaba unas pantuflas, tomaba su albornoz y celular.

Dylan asintió con una mirada confusa, entonces la rubia lo miró y dijo "Te acompañaré, también nesecito un trago o tal vez varios"