Mi nombre es Rosalie Montana, fui comprometida con el hombre que creí sería mi gran amor, pero todo ha sido un gran error, después de la muerte de mi padre todo mi mundo se vino a bajo hasta el punto de tener que desaparecer.
ahora tres años más tardes he regresado para reclamar lo que por derecho me pertenece y hacer sufrir al asesino de mi padre.
NovelToon tiene autorización de Liose Tess para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
CAPITULO 7
Después de que ellos discutieran las algunos asuntos del proyecto, Hugo y yo salimos a las instalaciones de corporativo Villasmil.
En todo el camino no dijo nada, quería preguntarle tantas cosas, pero él se mantuvo con una mirada fría y calculadora, así que decidí sacar mi celular y comenzar a concretar contratos con R-Technologyba.
Al cabo de unos cuantos minutos estábamos en la recepción de la empresa.
-buenas tardes, señor Herrera, señorita - dijo la recepcionista con simpatía.-el Señor Villasmil está esperándolos. Tome el ascensor en el piso 3 está el auditorio de conferencias.
-gracias- le respondí con una sonrisa, pero el patán de mi jefe se límito a seguir hacia el ascensor.
Cuando íbamos subiendo Hugo se volteó y me miró con amenaza.
-no se te ocurra cometer algún error, viniste para asistirme, así que espero cumplas bien tus funciones.
Le quería arrancar la cabeza por su prepotencia, y su machismo, pero como era de esperarse mordí el labio inferior y asentí
-buenas tardes, señor Villasmil, mi nombre es Hugo Herrera y esta es mi asistente- dijo Hugo al entrar al auditorio y ver sentado al señor Villasmil de piernas cruzadas.
Llevaba una camisa blanca, su saco negro estaba colgado en el respaldo de la silla a su espalda, se veía, poderoso, intocable, sus profundos ojos negros eran como dos hoyos que te tragaban el alma, tenía cabello negro y un rostro tallado por los dioses, sentía que mis piernas temblaban y no entendía por qué estaba tan nerviosa.
él no se inmutó, ni procedió a presentarse, le hizo señas a Hugo para que esté comenzara a exponer el proyecto, pero su mirada no se apartaba de mí.
Hugo comenzó torpemente con la exposición, yo no le prestaba atención, hasta que de pronto vi la foto en la presentación de unos terrenos que mi padre había descartado anteriormente.
-¿por qué Hugo querría construir en ese lugar?- pensé, estaba tan distraída, que la voz del señor villasmil.me trajo de regreso
-señor Herrera, aún no me ha dado razones para que mi empresa tenga una colaboración con la suya.-dijo el señor Villasmil.
-señor, es importante para nosotros porque son terrenos no explorados, si sacamos ventaja de él, podemos construir un centro comercial que beneficie a la población que está a su alrededor, ya que para poder ir tienen que recorrer una distancia de 1 hora aproximadamente.
-usted que opina señorita?- me preguntó directamente mientras tomaba su taza de café y la daba un sorbo.
-yoyó... Yo... La verdad no tengo conocimiento del tema.
- a mí me parece todo lo contrario.- me reto
-con el debido respeto señor, ella es solo una asistente.- dijo Hugo para tratar de sacarme lejos del ojo del presidente Villasmil.
-me parece que tiene usted un complejo de superioridad señor Herrera - dijo mientras arqueaba una ceja - espero su respuesta señorita, y si no se siente capacitada para responder, entonces le pido que se marche y regresen cuando tengan otro proyecto que ofrecer
Hugo estaba que explotaba del coraje, sabía que su lengua picaba por soltarse y decirle sus cosas al señor Villasmil, pero necesitaba este proyecto con urgencia así que prefirió callar.
-en lo que a mí respecta señor no construiría en esa zona, se dice que es un territorio inestable, ya que debajo de ellos se encuentran minas en ruina, más, sin embargo, se puede utilizar para crear como una especie de sitio turístico para recreación de la población.
-y que opina sobre la distancia que recorren para disfrutar de tiendas y servicios que podría ofrecerles un centro comercial.
-si señor, en ese caso podemos correr un poco el proyecto a unos mil metros a la derecha que también podemos contar con un amplio terreno, para construir un pequeño edificio de unos 3 pisos, el tamaño sería reducido, pero estaríamos garantizando una construcción más estable y más segura a un desastre natural.- había trabajado con papá en varios proyectos, me había graduado de ingeniería Civil, y cursaba mi segundo semestre de arquitectura cuando mataron a mi padre, aunque mis conocimientos no había Sido llevados al campo, tenía mucha más experiencia que Hugo.
-muy acertado su discurso señorita...
-Rousse... Rousse Lascuráin.- dije con seguridad.
-veo que su empleada tiene un gran potencial, no entiendo porque la tiene de asistente y no como gerente de proyecto señor Hugo.
-en mi empresa hay una política, señor.- dijo Hugo en su defensa - además está chica es nueva, no sabía sus cualidades.
-su empresa tiene políticas de machista, simplemente porque es una mujer no le dan el cargo que se merece. Pero bien, le propongo algo- hizo silencio por un segundo y me miró con intensidad - ¿señorita Lascuráin, le gustaría trabajar para mí?
su pregunta nos tomó por sorpresa, Hugo me miró con desafío, él esperaba que yo rechazará la oferta.
-tendrías el cargo de Gerente de proyecto, un salario digno y si lo deseas te lo puedo triplicar.- dijo tentadoramente.
-yo... Yo... Muchas gracias señor Villasmil, pero no creo que sea buena idea.
-no es buena idea, ofrecerte un cargo más acordé a tus habilidades?- dijo él en tono molesto.- te gusta ser una simple secretaria a la que le limitan su potencial?
Mire a Hugo, tratando de que fuera el que hablara, pero este solo empuñaba los puños a sus costados, tratando de controlarse para no arruinar el negocio.
-ya veo... Señor Herrera, le importaría que su secretaria trabajará para mí 3 veces por semana.- le propuso.
-ella es la que decide.- dijo Hugo entre dientes.
-en ese caso, señorita Lascuráin, creo que usted está en deuda conmigo, sería una forma de pagarme.- dijo con una sonrisa de victoria en su rostro.
-creo que está confundido señor, yo no le debo nada.- dije a la defensiva.
-creo que usted le pidió a mi guardaespaldas que la llevara el otro día de regreso a las instalaciones del señor Herrera.- podía ver la malicia brillar en sus ojos.
-él fue el que se ofreció- dije a la defensiva.
-y usted lo rechazó, para luego regresar y pedirle un favor, a lo que Andrés al consultarme le dije que podía llevarla que luego me iba a cobrar el favor.
Quedé boquiabierta con sus alegaciones, pero vi un destello de maldad en el rostro de Hugo.
-por mí no hay problema señor Villasmil, siempre y cuando podamos cerrar el negocio.
-entonces no se diga más, la señorita Lascuráin trabajará para mí tres veces por semana, como acuerdo de negocio.
-y pago por el favor que me hizo su guardaespaldas- le recalque.
-no aceptaste mi oferta, tu jefe acaba de hacer un intercambio de negocios, lo que hace que tú sigas en deuda conmigo.