Tu Dulce Aroma

Skylar paso el resto de la tarde en su habitación preguntándose qué rayos tenía en la cabeza para decirle eso a Carter.

¿Cómo había agarrado tanto vuelo? Esperó y esperó algún mensaje de parte del alfa, pero nada llegó.

Agotado, realizó toda su rutina de belleza antes de ir a dormir, dio un vistazo a sus mensajes por si había alguno del alfa, pero ni una señal de él.

-De seguro ha estado muy ocupado estudiando para sus exámenes... - se dijo a si mismo dudando. Tecleo un mensaje deseándole dulces sueños y se fue a dormir.

Ni en sus más horribles pesadillas podría concebir la idea de que él le fuera infiel, al fin y al cabo ellos terminarían juntos se eso no podía tener dudas. ¿O si?, en ese mismo momento en otro lugar un alfa y una omega se dejaban llevar por sus más bajos deseos, en la mente del alfa no había rastro de culpa no siquiera un pensamiento para Skylar.

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Había pasado ya una semana desde su último encuentro con Carter y por más que lo buscaba y trataba de encontrarse nuevamente con él, le era imposible.

Ni los mensajes, ni las llamadas, con suerte si podía verlo de lejos, pero si se acercaba desaparecía rápidamente. Toda la situación lo ponía extremadamente tenso, sumando el hecho de que Kelly seguía sin hablarle, pensó que con una escueta disculpa todo quedaría olvidado, sin embargo, la omega simplemente lo ignoró cuando intentó acercarse.

Mientras esperaba que tocara el timbre de receso miraba su manicura, manos perfectas, uñas perfectas que le recordaban que no podía dejar ni una parte de sí mismo sin arreglar, cuidar hasta el mínimo detalle de su apariencia. Su mirada se instaló en el asiento vacío a su costado, instintivamente sus ojos giraron hacia la ubicación de la omega de cabello rojizo y gruesas gafas que ahora estaba sentada en la primera fila, muy a pesar de su orgullo le dolía la indiferencia de su única amiga.

No tenía con quien compartir sus temores o pensamientos, nadie que las distrajera de la verdad aplastante que lo perseguía. Extrañaba a Kelly, pero estaba cansado de tener que defender algo que ella no es capaz de entender, sabía que Kelly solo era criada por su padre alfa, entonces carecía por completo de la educación sobre el deber de un omega perfecto.

Kelly solo se dedicaba a existir y ser ella misma, aunque se burlaran de ella, siempre defendía su punto de vista.

Al escuchar el timbre se escabullo del salón para ir a buscar a Carter, muy a su pesar entró al patio de los alfas y mientras se ocultaba logró divisar al alfa que conversaba animado con un grupo de amigos, su corazón latía rápidamente y le dolía el estómago.

Lo había imaginado de muchas formas ocupado, estudiando, cansado, en todas aquellos pensamientos siempre pensaba en él trabajando de alguna forma para construir un futuro para ambos. Ahora al verlo ahí relajado riendo y conversando como si no le preocupara nada más en el mundo, hacia que su pecho se estrujara.

Tomó su celular y escribió un mensaje rápido, preguntándole si estaba ocupado y si podrían verse al terminar las clases. Lo envío esperando que ahora si pudiera responderle, pero sus ilusiones se rompieron cuando vio como aquel alfa que adoraba revisaba el mensaje para luego guardar el celular sin responder.

-Ni siquiera eres capaz de responderme cuando tienes tiempo... - La voz de Skylar sonaba hueca, no sabía si era mejor marcharse o enfrentarlo.

Mientras pensaba qué hacer una figura femenina se acercó al grupo de alfas, con naturalidad se puso en medio de todos y muy cerca a Carter, el alfa le dedicó una sonrisa cautivadora y la omega le respondió.

Todo parecía tan natural, el susurro entre los alfas y las risitas cómplices entre todos daba a entender que estaban acostumbrados a la presencia de la omega.

Esto era demasiado para él, salió huyendo del lugar. Se encerró en el baño, en el frío cubículo se abrazó a sus piernas y se aferró a ellas como si fuera lo único que evitara que se hundiera en un abismo.

Quería llorar, sentía como las lágrimas ardían en sus ojos queriendo salir, pero con toda su voluntad las reprimió.

La imagen lo perseguía, ellos dos siendo tan cómplices, tan unidos, como sí fueran una pareja.

Con Skylar nunca se mostraba así, jamás le sonreía así, jamás permitía que los vieran juntos, sobre todo sus amigos alfas.

¿Qué había de malo con él?

Escuchó mucho ruido fuera del cubículo, se estiró el uniforme, respiro hondo y salió.

Había un grupo de omegas conversando animadamente mientras se retocaban el maquillaje,

Al verlo salir la mirada inquisidora de aquellos omegas lo analizaron de pies a cabeza, con su dignidad intacta se acercó a ellos para observar su reflejo en el espejo, al salir del lugar escuchó una suave tos y la palabra "mojigato", una suave risita le hizo coro.

Usualmente, ignoraba ese tipo de comentarios, pero hoy no le apetecía. Volteo para confrontar a los omegas.

-Si tienen algo que decir, pueden decirlo en voz alta no temo escuchar lo que dicen de mí. Pero me irrita que pretendan que no los escucho cuando lo único que hacen es hablar de mí. - Su voz estaba cargada de ironía y una sonrisa torcida adornaba su hermoso rostro.

-Creo que te equivocas, si hablamos de ti y de toooooodo aquello que pretendes ser. - Un omega bajito y algo rechoncho se abrió paso entre los demás.

-Pero no es por envidia, querido, en este momento eres el hazmerreír de todo el instituto, caminando tan dignamente por todos lados mientras tu "novio" está con otra omega - Respondió con sorna una omega morena.

-Jajaja ya no hayan qué inventar - Skylar movió su suave melena con un gesto burlón, aquellas palabras le habían dolido, pero no tenía intenciones de demostrarlo.- Es imposible que ustedes entiendan en grado de compromiso que tiene una relación que ha sido forjada desde la cuna, no espero que lo entiendan pues no pueden aspirar a algo así, pero si hay algo que deben entender es que al final siempre seré la pareja oficial de Carter aunque haya otros omegas resbalosos tras él, siempre seré yo quién ostente el título de novio y después de esposo. - Un brillo oscuro titilo en sus pupilas al dar énfasis en sus palabras. Lo decia con seriedad y orgullo, en el fondo eso es lo que había aprendido en todos estos años.

Un silencio que parecía abrumador y agobiante llenó por completo aquel baño, cuando creyó haber terminado todo y antes de salir del lugar unas risas estallaron como una bomba en el lugar.

- ¿Qué dignidad se puede mantener en aguantar las infidelidades de un alfa? Aunque fuera el único del mundo. - dijo entre risas el omega rechoncho.

- Creo que para pertenecer a una familia adinerada hay que tener el cerebro bien lavado para decir tanta estupidez. - Una voz chillona resonaba desde el fondo.

Skylar se llenó de coraje y pensaba seguir respondiendo, aunque supiera que no era lo correcto, estaba dolido.

Antes de que pudiera abrir la boca un vendaval rojizo entró.

- ¡Víboras venenosas! Vayan a echar veneno a otra parte, chismes, chismes es lo único interesante en sus vidas. Mejor vayan y consíganse una vida para que dejen de hablar del resto. - La voz de Kelly sonaba amenazante y aunque no era tan alta, en aquel momento se veía imponente.

Tomó del brazo a Skylar y lo sacó de aquel lugar, el rubio se dejó llevar hasta haber avanzado un buen tramo.

- Pa-para, espera Kelly... Pensé que estabas enojada conmigo. - un nudo grueso se formó en su garganta.

- Eres un idiota cuando defiendes a un idiota, pero eres mi mejor amigo. Intenté no meterme, pero no podía dejar de escuchar y aunque créeme que quiero sacudirte por responderles con tantas babosadas a esos infames, me causó más enojo que ellos se sintieran superiores a ti. - El rostro de la omega estaba sonrojado, era pésima ocultando sus emociones y en ese momento la ira la estaba embargado.

Skylar abrazó a la omega, no lo sabía en ese instante, pero esa no sería la única vez que ella lo rescataría. No tenía palabras para agradecerle estar ahí, a pesar de que fueran tan distintos el cariño mutuo era sincero.

- Sky, también te he extrañado. No quiero echar a perder el momento con malas noticias, pero hay algo de lo que debemos hablar... - La mirada de la chica cambió a preocupación.

Skylar sintió de nuevo como un nudo se formaba en su pecho, trago grueso y asintió.