—Soy una persona que cuando encuentra es alguien especial... no la dejara, hará lo que sea para estar junto a ella.
—Nunca me ha gustado alguien de mi mismo género, pero ella... ella me hace sentir cosas que nunca había sentido ni pensé sentir. Serán estos sentimientos verdadero, mis verdaderos sentimientos.?
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Te encontré.
Saroth: Ya déjame, no quiero salir de aquí con nadie.
Oliver: Últimamente andas muy aburrida, solo vienes para ver si la vuelves a encontrar, que aburrida.
Saroth: Si sabes eso, para que me molestas.?
Oliver: Lo hago porque veo que en los últimos 15 días no has salido con ninguna chica de aquí, y solo has venido para ver si la vuelves a ver, ya déjalo, si es tu destino estar con ella la volverás a ver.
—Como Oliver dijo, ya han pasado 15 días y no he vuelto volver a ver a Mia, en los cuales solo había venido a este club y a muchos otros para ver si la volvía a ver, pero nada. No me la puedo sacar de la cabeza ni dejar de pensar en su belleza, lo inocente que se veía, en su linda sonrisa, en su aroma dulce, en su linda mirada que me dio cuando sus amigas se la iban llevando. Creo que ahora me estoy volviendo loca. Conocía este sentimiento, ya lo había sentido, aunque este sentimiento lo sentía un poco diferente, pero no muy lejano del sentimiento que conocía, y aunque me da un poco de miedo, quiero saber de ella y estar con ella. Sé muy bien que puede que ella no sienta lo mismo que yo, pero puede que sí, pero para saberlo debo conocerla mejor, pero me he difícil no saber de ella, ¡dios!—
Saroth: No quiero salir con nadie, ahora mismo tengo mi cabeza un lío.
—El se me quedo mirando luego dijo.—
Oliver: La cabeza o el corazón.?
—Con su pregunta resonó en mi cabeza como una bomba, lo volteé a mirar con ganas de asesinarlo.—
Oliver: No me mires así, te conozco demasiado bien.
Saroth: .....
Oliver: Ambos sabemos lo que eso se siente, sabemos por lo que pasaste hace unos años atrás, solo no quiero que pases por los mismo, pero no quiero impedir te o obligarte a salir con otras chicas por eso, te apoyaré como siempre lo he hecho.
—Se acerco y cruzó su brazo por mi hombro. Nadie más que él puede entenderme mejor que yo, él me conoce tanto que como lo escucharon...sabe cuando me gusta alguien y cuando me estoy enamorando, aunque no digo que me esté enamorando de Mia, solo... creo que me gusta y ya.—
Saroth: Sé que siempre tendré tu apoyo, gracias.
—Lo abracé, agradecida por todo.—
Saroth: Bien, ahora vamos por esas chicas, creo que estaría bien olvidarse del mundo por hoy, te parece.?
—Le sonreí, él me sonrió. No sé cómo lo haría para olvidarme de todo y poder amanecer con alguien en mi cama, pero haría el esfuerzo ya que él siempre quiere que lo acompañe en esas cosas, él dice que si yo no disfruto él tampoco lo hará, parece niño consentido en ese sentido.—
Oliver: ¡Genial.!
—Realmente parece un niño. Él me jaló del brazo para luego bajar las escaleras al primer piso.—
*
*
*
-Tu casa es muy bonita, vives sola.?
Saroth: Así es, no me gusta compartir mi espacio con nadie.
-Enserió.?, entonces que hago aquí.?
—Buena pregunta. Ella estaba recorriendo mi apartamento, mirando todo lo que la decoraba a esta.—
Saroth: Traer a alguien por unas horas no es lo mismo que vivir con esa persona, no creas que eres la única que traigo aquí, solo seras una distracción para el placer, así que no te creas importante, ambas sabemos lo que esto significa, después de ésta noche, no te conozco así nos volvamos a ver, no suelo estar con la misma persona dos veces, y no creo que eso cambie.
—Le dije muy cerca de ella para que entendiera y después no ande detrás de mí, porque de algo estoy segura... el sexo conmigo no cualquiera lo olvida tan fácilmente.—
-No te preocupes, se muy bien lo que esto significa, y no creas que no se quien eres, no es la primera vez que voy a ese bar. Una amiga me comentó de tí, por eso quiero saber si lo que ella me dijo es cierto.
—Levante una ceja, de que habla.?—
-Mírate, ahora tienes curiosidad.
—Quien no la tendría.?—
-No te preocupes, no es nada malo, ella...
—cruzó sus brazos alrededor de mi cuello.—
-Ella... me dijo... que eres muy buena en la cama, por eso quiero saber si es verdad.
—Sonreí media luna, ella al ver mi rostro no tardó y me besó feroz mente, le respondí igual, igual... amor aquí no había. No quería perder tiempo y le comencé a bajar el cierre de su vestido, aunque estaba en la sala, sabía que el lugar no era problema, podíamos hacerlo aquí. Ella al sentir mis dedos por su espalda gimió muy bajo, entonces supe que sería fácil para mí. Mientras la besaba, la fui llevando a los muebles, estando cerca de los muebles, dejó caer su vestido, después la empuje y ella calló sobre los muebles.—
-Vaya... eres agresiva, me gusta.
—He aprendido que cuando estas teniendo sexo con alguien y hablas con esa persona... se pueden crear lazos, por eso no me gusta hablar a la hora de tener sexo, no quiero caer en mi misma trampa, tampoco me gusta mirarlas a lo ojos, cuando se mezcla... Sexo, habla o pensamientos y miradas con esa persona... eso es más que obvio que pueden crear lazos emocionales con esa persona, por eso suelo estar callada durante el sexo y mucho menos mirar a los ojos a esa persona, no a personas que crea que solo son para una noche, no con personas que crea que solo serán para una noche, crear lazos con alguien que apenas conoces... puede ser fatal para alguien que solo quiere sexo con esa persona.—
-Sueles estar callada.?
—Dios.! si que habla.—
-Esta bien, mejor la acción...
—Me acerque a ella y la besé. Luego besé su cuello mientras recorría con mi mano su cuerpo. Llevé mi mano a su brazier y se lo solté, mire sus senos y la verdad... no estaba nada mal. Me llevé uno a mi boca y ella gimió ante mi contacto con su pezón.—
-Oh.!, wow, sabes lo que haces.
—No le respondí nada, solo me senté a su lado, tome su otro seno y me lo lleve a mi boca mientras mi mano se dirigía a su íntimidad, ella me agarro del pelo, pero... mal hecho, odio que maltraten mi pelo, entonces hable.—
Saroth: Sé que aveces el placer manda, pero podrías no tomar mi pelo.?, me duele la cabeza después.
—Le sonreí y volví a lo que estaba, ella tenía sus manos a mi cabeza pero sin tomar con fuerza mi pelo, entonces decidí entrar al centro de su íntimidad, realmente, realmente estaba mojada, no demoré y metí dos dedos dentro de ella, ella quiso agarrar con fuerza mi pelo pero luego lo soltó, comencé a embestirla fuerte y obviamente rápido. Sentía su respiración agitada, gemidos a lo bajo salir de su boca, sentía como su pecho bajaba y subía, sus piernas con ganas de cerrarse, pero ella estaba haciendo el esfuerzo por mantenerlas abiertas, entonces solté sus senos, saque mis dedos, baje su ropa interior, le dije que se acomodara mejor, tome un cojín, lo puse debajo de ella para que quedara un poco más alta, se abrió un poco y la seguí embistiendo, besé su cuello. No iba a tener sexo con ella, solo la había traído para que Oliver no se sintiera mal, pero como ella dijo que quería saber sí yo era tan buena como había dicho su amiga, entonces tenía comprobarle eso, aunque no era necesario, pero mi orgullo pudo más, quería que ella le dijera a su amiga que lo que yo le hice no era nada comparado con lo que ella le había dicho, y esto.? era solo el comienzo.—
*
*
*
Saroth: No estoy, me duele la cabeza.
—Dije cuando Oliver entró a mi oficina con una sonrisa en su rostro, sabía que venía a hablar de lo de anoche.—
Oliver: Pero que he dicho.?, solo vengo a ver como estas, si la pásaste bien anoche, solo eso.
Saroth: Lo sé, sabía que venias a eso, yo también te conozco, sabes.
—Hoy llegue más temprano de lo normal, esa chica rubia de ojos claro aún seguía dormida en mi cama y no quería estar allí cuando ella se despertara.—
Oliver: Entonces, como fue.?, como te sientes después de 15 días sin sexo.?
Saroth: Me siento como si fuese traicionado a alguien.
—Dije sinceramente. Ahora misma me sentía como si fuese engañado a mi novia o algo así, y lo cual era extraño porque por lo que recuerdo... novia no tengo.—
Oliver: Traicionando a alguien.?, de que hablas.?
—Preguntó sonriendo.—
Saroth: Así mismo, es un sentimiento complicado, pero así me siento.
—Apoye mi cabeza en el espaldar de mi silla. Oliver rió fuerte.—
Saroth: De que te ríes.?, estoy hablando enserió.
Oliver: Sabes.?, me gustaría saber como se sentiría esa chica al saber que su enamorada ya le he fiel sin siquiera ser novias, no... ni siquiera conocerte
Saroth: Te dije que se llama Mia, no la llames chica como si no conocieras su nombre
—Dije algo furiosa, él era mi amigo pero se estaba burlando de mí, además, Mia es la chica que me gusta, debe llamarla por su nombre.—
Oliver: Lo siento, señorita enamorada, la señorita "Mia" debe ser muy afortunada.
—Dijo haciendo énfasis en el nombre de Mia, sonreí internamente.—
Saroth: La afortunada sería yo, sabes como están las cosas en mi familia, nadie sería afortunada de meterse conmigo en una relación amorosa, y lo sabes.
—Le dije dando una vuelta en mi silla.—
Oliver: Eso es cierto, pobre de Mia si se mete contigo, sufrirá mucho.
Saroth: Eso es lo que le dices a tu mejor amiga.?, eres malvado.
—Tenía conocimiento de eso, sabía que si me metía con Mia y mi madre lo supiera... sería un caos para Mia, aunque sabía muy bien que no iba a permitir que nada malo le pase, eso era más que seguro.—
Oliver: Soy el único que puede ser malvado contigo, no creas que voy a desaprovechar eso.
—Dijo parándose, peinando su pelo con su mano hacia atrás, para luego poner sus pies en marcha para salir de mi oficina, lo odio aveces, pero él sabe que lo quiero un montón.—
—Ya había terminado el diseño final, (bueno, casi) de la señora Grace, y solo estaba esperando algunas cosas para terminar por completo todo, pero ya me estaba estresando en esa oficina, entonces decidí salir para almorzar fuera, eran las 2 de la tarde, hoy quise caminar para despejar mi mente de todos los pensamientos que tenía sobre Mia, debía encontrar una manera de encontrarla o olvidarme de ella, de su sonrisa, de sus ojos, de su belleza, de su rose de su mano con la mía, de su aroma dulce, de su pelo, de su voz, de su mirada, esto me estaba volviendo loca.
Iba caminando sin rumbo alguno, esa chica sin saberlo había echo un caos en mí, y necesitaba que ella misma lo arreglara, pero para eso necesito encontrarla y esta vez... si le pediré su número. Iba pasando por una cafetería que quedaba al lado de unos de los parques que suelo visitar para pensar, cuando escucho a alguien nombrar un apellido, y al esa persona responder... me doy cuenta y reconozco esa voz, me volteo y veo su espalda, entonces decido retroceder un poco y entrar a esa cafetería para saber si se trataba de la misma persona ya que el señor la llamo "Señorita Smith". Entro, y como un cliente más... me siento en una mesa con la esperanza en que ella se de vuelta pueda ser la persona que espero. Ella se dio la vuelta, y como si de una novela se tratara, yo la veía a cámara lenta mientras se daba la vuelta, una sonrisa en su rostro me dejó más embobada, se veía más linda de lo que recuerdo, ella pasó la vista rápida y volvía a mirar a la persona que le estaba hablando, yo en el fondo deseando que me haya visto y reconocido.
Estaba observando a Mia cuando una chica entra gritando el nombre de ella.—
-Mia!! Mia!!
—Volteo a ver a Mia, ella se da la vuelta, ahora estando algo triste, arrugue mis cejas, que sucede.?—
-Vamos, ellos no te merecen, te dije que no tenias que aguantar nada, ambas sabemos que no necesitas este trabajo.
—Que sucede.?, tenía mucha curiosidad por saber de que estaba hablando esa chica a mita de la cafetería llamando la atención de todos los cliente.—
Mia: Sshh...
—Sonreí ante eso, ella colocó su dedo en la boca de su amiga callando la en el proceso.—
Mia: Vamos afuera, no puedes gritar aquí.
-Por qué no.?, deja que todos se enteren de cómo tu jefe maltrata a todas sus empleadas.
Mia: Vamos Joyce, no hagas más escándalo aquí.
—Mia saca del café a su amiga, y por supuesto que la sigo, no quiero perderla de nuevo, sea como sea tendré su número hoy. Al salir del café, se pararon frente a un auto, su amiga parecía molesta, yo me quedé un poco más lejos, pero no tanto, no quería perderla de vista.—
Mia: Te dije que iba a renunciar hoy, por que no esperaste.?
-Lo sé, pero temía que él te hiciera algo, o no te permitiera renunciar.
—Al escuchar lo que su amiga estaba diciendo, pare mi oreja, puse más atención aquella acusación.—
Mia: Amo que te preocupes por mí, pero debes confiar en mí, no soy tan tonta.
—Ella le hablo de forma dulce y tierna. Por qué sentí mi pecho apretarse por la forma tan tierna que ella le habló.?—
-Lo sé, pero me preocupo por tí, no puedo solo ver cuando veo que están abusando de tí.
Mia: Vamos, no es para tanto, y gracias, te quiero.
-Siempre logras convencerme, no puedo negarme a tu linda carita.
—Ooh, por que le apreta sus mejillas así.?, acaso son parejas.?, ooh..., no puedo estar celosa o sí.?—
Mia: Vamos, debo regresar y traer mis cosas, y que me pague los días que trabajé, de acuerdo.?
-De acuerdo.
—¡Shit!. No puede tener pareja, bueno... sí, pero no, porque lo son cierto.?, rayos... no creo que sea apropiado pedirle su número sabiendo que tiene pareja, o tal vez solo sean amigas cercanas, no.?. Estaba tan metida en mis pensamientos que no me di cuenta que ellas ahora estaban paradas en frente de mí.—
Saroth: ¡Mi**da! ¡que susto!
—Ellas solo estaban cruzadas de brazos mientras me miraban como preguntándose "y ella quien es.?", acaso no me reconoce.?—
Saroth: Disculpen, estaba...
—Las quedé mirando, que les diría ¿disculpa por escuchar a escondidas su conversación.?, ¡jamás!—
Saroth: No es nada, solo iba pasando y me acordé de algo... no es nada, disculpen.
—dije, me iba retirando cuando Mia dijo..—
Mia: Saroth, verdad.?
—Quedé estática, ella me reconoció.?—
Mia: Querías decirme algo.?
—Que quiere decir.?, me di media vuelta para quedar frente a ella de nuevo.—
Mia: Es.. que... te vi en el café, supongo que me seguiste hasta aquí porque querías decirme algo, o me equivoco.?
—Vaya, pensé que no me había visto, y no, no se equivocaba, pero ahora ya no quiero, si ella es su pareja... no quiero meterme allí, jamás me metería con alguien que yo sepa que esta comprometid@.—
Saroth: Eeeh... Umm... la verdad, solo quería saludarte.
—Su amiga o quizás novia, no dejaba de mirarme, entonces la miré y le levante una ceja.—
Mia: Ella es Joyce, mi mejor amiga.
—Que.!?, su mejor amiga.?, la miré ahora a ella sorprendida.—
Saroth: Ooh!, tu mejor amiga, claro, mucho gusto, Saroth.
—Me presente estirando mi mano, ella antes de presentarse y estrechar nuestras manos, sonrió.—
Joyce: Lo sé, eres algo famosa y mi mejor amiga en los últimos 15 días no deja de hablar de...
—Mia le tapo la boca antes de que ella terminara su oración, sonreí internamente porque sé lo que ella quiso decir, mire ahora a Mia quien lucia un poco avergonzada.—
Mia: Creo que ya nos vamos, gusto volver a verte Saroth.
—Creo que hay esperanza para mí. Ella se iba alejando aún tapándole la boca a su amiga, no podía permitir que se fuera sin antes darme su número o que ella tenga el mío.—
Saroth: Espera, Mia.
—Di unos pasos hasta quedar más cerca de ellas. Le iba a pedir su número, pero me acordé que ahora rato le dije que solo quería saludar, entonces hice un plan.—
Saroth: Lo siento por escuchar tu conversación, pero...
—Saque una tarjeta de presentación y se la di.—
Saroth: Ando buscando una asistente personal, ya que te quedaste sin trabajo... puedes ir el día que puedas, hacemos la entrevista, si pasas... te quedas con el trabajo. Allí está mi número, ponte en contacto cuando gustes.
—No sé que acabo de hacer, pero no podía dejarla irse así no más. Ella observo por un rato la tarjeta, luego miró a su amiga para luego verme a mí.—
Mia: Gracias, lo pensaré.
—Y sin decir más nada se fue, mientras yo me quedé allí parada con una sonrisa de oreja a oreja como una adolescente que su crush acepto salir con ella, no sabía si era porque la volví a encontrar y ahora podré estar en contacto con ella, (eso espero), o porque se que ella no tiene novia (y espero que novio tampoco) y que estuvo pensando en mí como yo estuve pensando en ella.—
(Hola, tengo una duda, creen que los capítulos están bien de largos.?, a mí me parece que están un poco largos.)