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El Rey Demonio

El Rey Demonio

Status: Terminada
Genre:Completas / Dominación / Amor-odio / Demonios / Brujas / Viaje a un mundo de fantasía / Fantasía épica
Popularitas:92.9k
Nilai: 5
nombre de autor: thailyng nazaret bernal rangel

Él es el pecado, la lujuria y la oscuridad, él es el Rey Demonio que conquistó el mundo y llenó la tierra de destrucción. Ella, una humana, cazadora, sobreviviente, con deseos de vengarse y liberarse de una maldición. Ambos lucharán contra el odio, el deseo e intensa atracción que los dominará poco a poco.

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UNA BESTIA CON ALAS DE CUERVO

...IVONNE:...

Abrí mis ojos ante unos extraños ruidos y me encontré en plena oscuridad.

Me quedé observando el cielo, desconcertada cuando visualicé varias estrellas entre la neblina. ¿Era un sueño o acaso yo había muerto? Tal vez era una larga pesadilla y al fin había despertado.

Me intenté levantar y gemí de dolor cuando un dolor agudo me atravesó una costilla.

Jadeé, respirando con rapidez cuando toqué el lugar y volví a sentir un dolor horrible.

Los recuerdos volvieron, el demonio en la cabaña y la pelea en el aire.

Los gruñidos volvieron y me levanté a tropezones del montón de paja que había minimizado el impacto de mi caída. Giré mis ojos hacia la forma gris del molino cuando recordé que se había estampado contra allí, las elices estaban en el suelo, rotas con trozos de ladrillos y me decidí a no ir a comprobar que estuviera muerto, mejor no tentar al riesgo.

Era tonto, ya estaba en riesgo, era de noche, estaba herida y no sabía donde rayos me encontraba.

Los gruñidos se escucharon detrás de mí, me giré tan abrupto que el dolor en mi costilla casi me hace encorbarme nuevamente.

Muchos pares de ojos rojos brillaban en la oscuridad, a solo cuatro pies del suelo.

Algo me saltó por la espalda, por instinto estiré mi brazo hacia atrás y lo aventé a un lado.

Una criatura pequeña se levantó torpemente, chillando y alejándose hacia sus compañeros quienes dieron fueron acercándose a mí.

Las pupilas brillantes daban suficiente luz para detectar los dientes largos, orejas puntiagudas y pieles grises sin pelaje.

Demonios pequeños y yo no los conocía.

Saqué una espada corta que guardaba en la correa de mi muslo.

Saltaron al mismo tiempo sobre mí y corté al primero de ellos.

Cayó al suelo decapitado, secándose por el agua pura.

Los demás dudaron en acercarse, retrocedieron asustados cuando los amenacé con mi espada.

Aproveché para correr de entre los árboles, con mucho temor, los troncos parecían moverse, aumentando mis nervios.

Corrí sin parar hasta una zona casi despejada.

Me faltaba el aire, el dolor en mi costilla aumentó más y más.

Tenía sed y hambre.

¿En qué estaba pensando? ¿En serio pensé poder llegar hasta el castillo sin sufrir ningún daño?

Llevaba un día afuera y estaba débil, casi a punto de morir en varias ocasiones.

Encontré un tronco hueco, con un agujero al pie de las raíces.

Me cercioré que no hubiera nada adentro y entré para refugiarme allí.

Me senté, jadeando por el dolor y rebusqué dentro de mi corset, apreté los dientes, el dolor fue más insoportable, pero no me permití hacer ruido cuando hallé una punta afilada y húmeda, saliendo del material y de mi piel.

El corset estaba roto y también mi costilla.

Bien hecho, Ivonne.

Olí mis dedos, era sangre.

Tenía una costilla rota y astillada, sobresaliendo.

Me quité la chaqueta y la rasgué con el cuchillo, formando bandas de tela, luego me desaté el corset.

Rodeé con cuidado mi torso, mordiendo mi mano para callar los gritos cuando apreté.

Até, asegurando que estuvieran inmóviles.

Me coloqué el corset con mucha dificultad y apoyé mi espalda del tronco, sosteniendo la espada contra mi pecho mientras cerraba los ojos para intentar dormir.

...****************...

Abrir los ojos fue casi imposible, se sentían pesados y me percaté de inmediato que estaba entrando en fiebre. Mi costilla latía en agonizante dolor y tenía escalofríos, ni hablar del dolor en mis huesos y mi mente en una espesa sensación de confusión.

Elevé mi mirada hacia el hueco del tronco.

El cielo gris me recibió.

Abrí mis labios resecos.

Tenía que volver al escondite para que Perla me sanara.

Haría un último esfuerzo para volver.

Salí gateando del árbol y usé la espada para encajarla en el suelo, me incorporé con enorme esfuerzo.

Observé mi alrededor y casi caigo arrodillada.

Colinas desiertas y pequeñas se hallaban frente a mí, no era lo que asustaba, se podía dividir un trozo de mar gris.

Estaba lejos del refugio.

El demonio debió arrastrarme muchos kilómetros de distancia.

¿Mis compañeros me estaban buscando o habían dado por sentado que ya estaba muerta?

Una fuerte ráfaga de viento me puso alerta, ignorando la fiebre y la debilidad observé hacia atrás.

El cielo gris se oscureció por lo que parecía ser una enorme colmena de demonios alados aproximándose rápidamente.

Volví al tronco a tropezones y observé por el hoyo.

Los demonios cubrieron el cielo y el tronco se tornó oscuro.

El sonido de sus alas sacudiéndose era arrollador.

Me quedé quieta cuando terminaron de alejarse, hacia el mar.

Casi grito cuando el tronco se sacudió de un lado a otro, con abrupto.

Las raíces protestaron y rodeé fuera.

Algo lo arrancó, aventando a un lado.

Me levanté, ignorando la debilidad en mis extremidades.

— Miren lo que tenemos aquí, sabía que ese olor no podía venir de la tierra seca.

Un lagarto escamoso se hallaba frente a mí, enseñando su larga lengua al detallarme.

No estaba solo, habían otros demonios de diferentes clases, con cuernos, de pieles ásperas y otros con aspectos de bueyes y cabras.

Eran como veinte, maldición.

Todos vestían con cueros negros, como si eso pudiera hacerlo más civilizados e incluso llevaban armas humanas.

Se estaban burlando, las llevaban como adornos para exhibir su triunfo sobre los humanos.

Retrocedí espantada.

— ¿Qué hace una cucaracha tan sola por aquí? — Rió el lagarto, con voz de serpiente siseando y me empezaron a rodear.

— Hermanos, estamos de suerte — Olfateó el cornudo, mostrando sus garras — Lástima que no podamos obtener aunque sea una cucharada.

— Solo es una, no alcanzará para todos, supongo que no sucederá nada si la absorbemos sin permiso del amo — Propuso lagartijo, lamiendo sus dientes con su larga lengua — El que la atrape primero se la queda.

— ¡Atrás, cara de rana! — Gruñí, elevando mi espada.

Todos se burlaron.

— Miren tiene un juguete — Señaló un cara de cabra — Nosotros también tenemos de esos ¿Qué harás? ¿Cortarnos en pedazo?

— Le atinaste — Volvieron a reír.

— No nos harás ni cosquillas, las armas humanas no nos dañan, si lo hicieran no las lleváramos como medallas — El lagarto sacudió los cuchillos en su pecho, los llevaba como un collar — Humanos débiles como siempre, lo único bueno que tienen son sus almas y sus mujeres — Me dió una mirada lujuriosa — ¡Qué empiece la cacería!

Me atacaron con tanta velocidad que a duras penas pude agachar y esquivar las garras.

Elevé mi espada, cortando un brazo y luego encajando la hoja en la garganta.

El demonio cayó al suelo y los demás se detuvieron cuando agonizó de dolor, quemándose por dentro.

Me agaché, apuntando mi espada cuando el lagarto me observó con sorpresa y furia.

— ¿Qué fue lo que dijiste sobre las armas? — Me burlé.

— ¿Agua pura? — Jadeó el de los cuernos — Eso es imposible.

— ¿Sorprendido, cornudo? — Me burlé, poniendo distancia.

— ¡Maldita bruja, ataquen!

Los demonios se lanzaron nuevamente.

Esquivé y salté, soportando las oleadas de dolor para sobrevivir a sus garras y golpes de cola.

Rasguños llenaron mis brazos y mis muslos, pero corté abdomen y gargantas.

Uno a uno iban cayendo quemándose y secándose.

El cornudo lanzó su cola hacia mí, salté y lancé una patada a otro que pretendía atacar.

Usé su cuerpo para impulsarme hacia un lado y blandí hacia el cuello del cornudo, la cabeza y su cuerpo se sacudió.

Aterricé sobre mis pies y esquivé un zarpazo.

Blandí sin parar, mis dientes y mis brazos dolían como el infierno.

Extrañamente retrocedieron.

Sentí un fuerte jalón de mi cabello y terminé rodando colina abajo, hacia una planicie.

Escupí sangre cuando aterricé boca abajo, mi espada terminó a unos dos metros.

El suelo se estremeció cuando algo cayó frente a mí, impidiendo que pudiera recuperar mi arma.

Elevé mi mirada.

Unas enormes piernas escamosas, un torso ancho y brazos gruesos.

Un lagarto de mayor tamaño estaba frente a mí, parecía medir tres metros.

Observé a mi alrededor, buscando una ruta de escape, pero varios demonios alados aterrizaron alrededor de la planicie.

Los otros demonios bajaron la colina y el lagarto que antes me parecía grande ahora lucía desnutrido frente al gigante frente a mí.

El infeliz rió, pero el grandote le lanzó una mirada que lo hizo callar.

— ¿Ésta cosa flaca pudo más que ustedes?

Lucieron apenados.

— La chica tiene...

Estaba por levantarme cuando me tomó de la pierna y me levantó del suelo.

— ¿Qué tiene esto? — Su voz gruesa retumbó mis sentidos adoloridos, me levantó del suelo — Podría romperla en dos trozos sin ningún esfuerzo ¿Tanta hambre tienen para no poder con esto?

— Tiene agua pura, su espada está manchada con ella — Se excusó otro, con las orejas agachadas.

Luché inútilmente, tratando de zafarme cuando me agarró de la cintura, un solo apretón y me haría pedazos.

Estaba por desmayarme, pero luché contra eso.

Se giró y observó hacia mi pequeña espada, la aplastó con su enorme pie, rompiéndola en trozos.

— ¡Ya no hay malditos pretextos, la raza demoníaca domina sobre los humanos y el que ustedes se dobleguen ante una niña con una hoja rociada de agua pura, deshonra nuestra existencia!— Gruñó alzando su brazo, mostrándome como su presa ante el ejército de demonios — ¡Ahora les mostraré como es que se aplastan éstos gusanos!

Elevó su otro puño y lo guió hacia mi cabeza, para aplastar mi miserable vida como a una uva.

Cerré mis ojos, esperando la muerte.

Todo se quedó en silencio y el dolor no llegó.

Abrí mis ojos, el lagarto observaba el cielo, con miedo en su expresión.

Observé a mi alrededor.

Todos estaban inmóviles y callados, con la misma expresión del gigante, observando al mismo sitio.

Elevé mi mirada y una enorme figura estaba suspendida a uno metros del suelo, sacudiendo sus alas de plumas negras de forma silenciosa.

Era un demonio diferente del resto, con el cuerpo musculoso lleno de pelaje negro y algunas plumas en sus brazos y sus hombros.

El rostro era de lobo, con los ojos más rojos y brillantes que el resto de los demonios.

Observaba altivo, con aura de poder.

Sus brazos estaban a ambos lados, firmes con largas garras en sus dedos.

El lobo cuervo me observó y hubo una extraña respuesta en sus ojos, pero los apartó de mí en unos segundos.

Solo bastó un gesto de su hocico para que el grandote me soltara.

Caí al suelo y esa fue la gota que derramó el vaso de mi debilidad.

La bestia alada aterrizó frente al lagarto, hablando en una lengua de demonio que me terminó de absorber hacia el mundo de la agonía.

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Magdalena Molina Rojas
Felicidades autora fantástica tu novela. Sigue adelante escribiendo otras novelas más.
Judy
Magnífica!!!
Judy
Magnífica historia!! Original, relativa, excelente narrativa!! Felicitaciones!!!
Cecily~★
jajajaja puso el "mute" (modo silencio) jajajajajaaj🤣🤣🤣
Cecily~★
touché 😎✨💅🤣❤️
Cecily~★
jajajaja La diosa del amor por ahora no se enojó, los otros sí 🤷🏻‍♀️🤣
Cecily~★
jajajajaja tremenda telenovela están viendo los pinch3s dioses cul3ros 😜😂
Tan entretenida que le piden volver como una vieja chismosa diría 😜❤️🤣🤣🤣🤣
Cecily~★
jajaja hasta Sirla voló 🤣
Cecily~★
Perla! disimula un poco che! 🤣🤣🤣🤣❤️
Cecily~★
JAJAJAJA ERIZ EN SERIO TE TOCÓ ESPERAR!!!! 🤣🤣🤣🤣🤣Justo al más ansioso de todos jajaja pobrecito 🤣🤣❤️
Cecily~★
JAJAJJAJA "Maní" JAJAJAJAJJAJAJA 🤣🤣🤣🤣
Cecily~★
jajajajaja Eriz no tiene pelos en la lengua 🤷🏻‍♀️🤣🤣🤣🤣🤣❤️
Cecily~★
jajajajaja Epa con esa diosa del amor! 😏🔥🤣🤣🤣🤣🤣🤣 jajajajaja
Yise
Q te puedo decir. No me gusta la narrativa tan ficticia pero............. Mujer me volaste la mente con esta escritura wao de verdad q talento el q te mandas, felicidades /Applaud//Applaud//Applaud//Applaud//Applaud//Applaud//Applaud//Applaud//Applaud/bendiciones dedes colombia
Thailyng: Gracias hermosa, me encanta que mi escritura pueda traspasar. Saludos desde Venezuela, te quiero
total 1 replies
Elizza Diaz
Como siempre, maravilloso!
Mary
Excelente
ismeira ferrebus
Felicitaciones por esa imaginación que te gastas está buenísima la Novela saludos desde 🇻🇪
Thailyng: saludos también desde 🇻🇪 gracias por tu apoyo
total 1 replies
ismeira ferrebus
Excelente novela sigue así todas tus novelas son buenisimas
ismeira ferrebus
Ezra si no estás preso te están buscando jajajajaja saludos desde 🇻🇪
ismeira ferrebus
Me está gustando y bastante saludos desde 🇻🇪🇻🇪
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