Entre El Amor Y El Odio

Renata había reunido a su padre y a su hermano para contarles que espera un hijo, eso sí lo diría pero no diría quién era el padre, no quería arruinar la vida de Marcus

- Qué pasa hija?

- Papá tengo algo muy importante que decirles

- Qué es? Dime que la incertidumbre me está matando

- Estoy embarazada

- Qué!!!

Dijeron ambos al unísono, preguntaron Cómo era eso posible pues ella ni siquiera tenía un pretendiente, insistieron en que les diera el nombre del padre pero ella se negó rotundamente, su padre estaba furioso Pues él era un hombre de tradiciones y no pensaba permitir que su hija tuviera un niño sin padre

- O me dices ahora mismo quién es el padre de ese niño o te llevaré a una clínica para que no nazca

- Cómo puedes decirme eso? soy tu hija

- Y yo no te eduqué de esa manera, no eres más que una remera

Fernando estaba tan molesto que la golpeó, dándole dos bofetadas, Renata llevó sus manos a sus mejillas y lo veía desconcertado pues Fernando nunca la había golpeado, al contrario siempre fue muy padre para ella

- Papá tú nunca me habías pegado

- Pues falta que me hizo jamás espere esto de ti, déjame decirte algo y escucha bien Renata, yo no pienso manchar el nombre de mi familia con un bastardo, que te quede bien claro

La discusión fue muy fuerte aún así Renata no dijo nada sobre el padre del bebé que estaba en camino pero sí dejó bien claro que no pensaba matar a su bebé, pues no importaba el padre, el niño era suyo, Y si ellos no querían a su hijo significaba que no la querían a ella tampoco, Entonces dijo que se iría

- Pues te vas ahora mismo y con lo que llevas puesto, ni piensas que te llevarás algo de esta casa

- Bien

Renata tomó su bolso y se fue. Su madre al morir le había dejado una herencia que si bien no podría cobrar hasta que estuviera casada, si le ha dejado una buena mensualidad, así que no se preocupó por dinero, se fue a un hotel y de camino ahí pasó por un mall para comprar algo de ropa, en el mall vió a Marcus con Lía se veían cariñosos y estaban tomados de la mano, se rompió su corazón, pero no pensaría más en eso pues ahora tenía un ángel que amaría por siempre, se fue al hotel y no salió de ahí en días Pues estaba pensando en qué hacer con su vida ahora, cuando sonó su celular era Marcus, no quería contestar pues quería cortar toda relación con él, el celular siguió sonando hasta que contestó

- Hola, Marcus qué pasa?

- Es cierto que estás embarazada?

- Ya lo sabes

-Entonces es verdad, yo soy el padre cierto?

Renata no sabía qué decir, no quería que se enterara pero también sabía que tenía derecho saberlo

- Soy el padre, se puede saber cuándo pensabas decírmelo? Es mi hijo y yo también tenía derecho a saberlo

- Pues ya lo sabes

Marcus le exigió que le dijera dónde estaba pues sabía que su padre le había sacado de su casa y tenían que hablar en persona, ella le dijo en qué hotel se estaba quedando y él fue hacia allí. Cuando llegó subió a la habitación de ella y hablaron sobre él porque ella no había dicho nada, ella le explicó que esa noche había sido un error como el mismo le había dicho y además ella no quería arruinar su relación con Lía Marcus inmediatamente pensó en ella, ella estaría furiosa al enterarse, no le perdonaría que tuviera un hijo con otra, Además de que su madre los había abandonado a él, su hermano y su padre, a raíz de eso el juro que siempre tendría una familia unida, sabía lo que tenía que hacer, pero era difícil aceptarlo Pues eso conllevaría a perder a Lía para siempre. Renata le dijo que su padre había exigido saber de quién era el bebé, pero que ella no lo había dicho que ella estaba dispuesta a dejar que él se hiciera cargo del bebé incluso compartir la custodia, él pensó en la oferta que ella acababa de hacer pero no quería que su hijo fuese señalado por nadie así que con todo su pesar tomó una decisión

- Tenemos que casarnos

- Que? No puedes estar hablando en serio

- Claro que estoy hablando en serio, me voy tengo cosas que resolver Pero en cuanto me desocupe vendré a verte

Marcus se fue y Renata se quedó desconcertada por lo que había dicho, casarse aunque le dio ilusión ser su esposa sabía que solo sería por el bebé y no quería un matrimonio así. Marcus fue inmediatamente a dar la cara con la familia de Renata, Fernando y Antonio no podían estar más feliz de que el padre del niño que esperaba Renata fuera de Marcus ellos arreglaron que se casaran solo por el civil y no habría recepción, Fernando no estuvo de acuerdo pero no tuvo alternativa ante la tajante negativa de Marcus. Dos semanas después ya estaban casados. Lía por su parte ofendió Renata de todas las maneras que conocía, estaba furiosa con Marcus y Antonio aprovechó esto para volver a acercarse a ella, y esta recibió de buena gana el consuelo que Antonio le ofrecía. Marcos era originario de Palermo Italia Pero había sido criado en Estados Unidos, ya de adulto volvió a Palermo con su familia pues su padre tenía tres hermanos y siempre fueron muy unidos. Marcus le dijo a Renata que se mudarían a Palermo, ella estaba emocionada por conocer a la familia de Marcus. Días antes de que ella se marchara fue a visitar a su papá, este estaba feliz de que ella estuviera casada con Marcus como Pues Antonio ya se había comprometido con ella y los preparativos para la boda iban muy bien

- Quiero darte las gracias hija

- Por qué papá?

- Por lo que hiciste, fue una sorpresa para mí cuando llegó Marcus a decir que él era el padre del bebé que estabas esperando, pues como te habías negado a seducirlo y llevarlo a tu cama para separarlo de Lía, nunca imaginé que cambiarías de opinión

- Qué significa esto? Como que me sedujiste que para separarme de Lía?

- Marcus no es lo que estás pensándo te lo juro déjame explicarte

- No hay nada que explicar, No puedo creer que confíara en ti como un estúpido y caí en esa trampa

- De verdad que no es lo que piensas, escúchame

- No quiero volver a saber de ti, solo salen mentiras de tu boca, no eres más que una g**** Y usted, usted es un viejo miserable mira que armar todo este lío, me dan asco

Renata lo siguió e intentó explicar pero solo se encontró con palabras más hirientes, pues Marcus se encontraba furioso, Pues siempre se cuidó de las mujeres así, no entendía cómo había sido tan imbécil para confiar y creer en ella. Marcus volvió a Italia y le llamó a Renata para avisar que se quedara con su familia pues después de lo sucedido no quería tenerla cerca, Renata lloró amargamente pues intentó hablar por todos los medios posibles, mandó un mensaje explicando todo lo que había sucedido pero no tuvo ninguna respuesta. Durante todo su embarazo estuvo sola, marcus solo llamaba de vez en cuando para preguntar por su hijo y colgaba. El día del parto llegó ala familia de Renata le aviso a Marcus que el bebé ya hiba a nacer, este dijo que estaba muy ocupado, que iría después a ver al niño. El parto fue bien y tanto ella como el bebé estaban bien, había sido un niño ella quería llamarlo Marcus como su padre, Pues el niño era idéntico a el, de ella no había sacado nada, ella no podía creer que se podría amar tanto a alguien sin conocerlo

- Los Ángeles existen, lo supe en cuanto te ví

Decía mientras sostenía a su bebé en brazos