LA HEREDERA.

Federico no perdió tiempo, subió corriendo a su habitación, se alistó y salió a toda. Renata lo esperaba como todos los días.

...

RENATA.

Estos dos meses han Sido terrible, no saber nada de Federico me desespera, no pierdo la esperanza de volver a verlo, toda esta situación me ha afectado mucho, me he bajado de peso y la comida no me sienta bien. La abuela ha querido llevarme al médico, Pero es un gusto que no podemos darnos lo poco que ganan ella y mi madre alcanza estrictamente para los gastos de la casa. Así que decidí empezar a buscar trabajo, asiendo la limpieza en cualquier lugar, no me importa el trabajo que haga, lo importante es ayudar en casa, la abuela ya no tiene edad para trabajar.

...

Federico subió corriendo al apartamento con la esperanza de que Renata lo esperara como todos los días, ella se había quedado dormida en la habitación, Federico al entrar la busco con desespero, al no encontrarla en la cocina y en la sala se dejó caer.

_ no viniste.- Federico recostó su cabeza contra el sillón, cerro sus ojos.

Renata se despertó con una horrible sensación en su estómago, por lo que corrió al baño.

_ Renata, eres tú.- grito Federico al escuchar ruido en la habitación, al llegar pudo ver a Renata tirada en el piso del baño con las manos apoyadas en el sanitario._ pequeña estás bien.- Federico corrió y la reviso.

_ si solo fue algo que me cayó bien.- Federico la ayudo a ponerse de pie.

_ estás segura, ven recuéstate.

_ si únicamente es eso.- Renata se recostó sobre la cama._ te he estado esperando.- las lágrimas recorrieron el rostro de Renata.

_ siento haber tardado tanto.- Federico se acostó al lado de Renata y la rodeo con sus brazos.

...

FEDERICO.

Estoy hecho un ocho, no sé qué hacer, amo demasiado a Renata, y estoy dispuesto hacer cualquier cosa para estar con ella. Así que idee un plan para estar con ella. Por el momento es alejarme un poco hasta que mi padre baje la guardia, fingiré tener una relación con carolina, hasta tener la oportunidad de poder escapar con mi pequeña, ahora hablaré con ella.

...

Los dos estuvieron abrazados un largo rato, habían anhelado mucho estar así, sentir la respiración del otro.

_ te he causado muchos problemas.

_ claro que no, nada de esto es tu culpa.- Federico acariciaba, la cabeza de Renata.

_, Pero aun así, la has pasado mal y no he hecho nada para evitarlo.

_ Renata, mi pequeña sabíamos que no sería fácil, mi padre es una persona difícil, no me importa que se oponga a lo nuestro, estaremos juntos quiera o no.

_ no me gusta que pelees con tu padre y menos por mí.

_ ya no pienses en eso, ahora necesito hablar contigo de algo muy importante.

_ claro dime.- los dos se sentaron en la cama, sujetándose de sus manos.

_ no nos vamos a poder vernos por un tiempo, por lo menos hasta que mi padre baje la guardia.

_ por cuanto tiempo.

_ no lo sé, quizás un mes o menos, después de eso nos iremos.

_ a donde, es una locura.- renata se levantó de la cama, camino de un lado a otro se podía ver la preocupación en su rostro._ quieres que hayamos, has pensado en las consecuencias.

_ hey, hey cálmate.- Federico la tomo por los hombros para que lo mirara. _ vamos a hacerlo con calma, ahora solo descansemos y no te preocupes yo solucionaré todo.

renata asintió con la cabeza, quería creer que todo estaría bien, dejando el tema de lado Renata cocino como de costumbre con ayuda de Federico, todo era como antes.

_ puedes quedarte esta noche conmigo.- nunca habían pasado una noche juntos, siempre debían despedirse y volver a cada uno a su vida.

_ llamaré a mamá.- Federico le dió su teléfono para que llamara a su madre.

...

Emilio conocía perfectamente a su hijo, sabía claramente que no se rendiría fácil, le daría batalla así que el debía estar un pie por delante.

estando es sus despacho tomo su teléfono y marco.

_ señor Gonzáles, como ha estado.

_ señor bailléres, estaba esperando su llamada.

_ disculpe no haberlo hecho antes, estaba organizando todo para celebrar el compromiso cuanto antes, solo espero y su hija siga dispuesta.

_ por supuesto, ella encantada, solo dígame cuándo sería la fecha y sin fatal estaremos presentes.

Emilio hablo largo y tendido con Eduardo González padre de Carolina, con todo listo no había nada que Federico pudiera hacer.

...

Al día siguiente después de pasar todo el día juntos, Federico y Renata debían despedirse, no era una despedida cualquiera, esa podría ser la última, así lo sentía Renata.

_ No olvides que te amo, no importa cuánto tiempo pasa o donde esté siempre volveré a ti.

_ y yo siempre te esperaré.

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RENATA.

volver a ver a Federico me lleno de alegría, extrañaba cada parte de el, sus caricias y todo el amor que me demuestra, trato de aprovechar al máximo cada oportunidad que tengo para estar con el, no sé cuándo será la última vez que lo vea.

me gustaría ser igual de positiva que el, Pero tengo se ser realistas su padre nunca permitirá que estemos juntos, y quizás Federico algún día se canse de luchar por esta relación, si ello llegará a pasar no lo juzgaria ya ha hecho mucho con aguantar a su padre.

En fin aquí estamos una vez más, despidiéndonos como si fuera la última vez, diciendo cuanto nos amamos.

...

Después de la difícil despedida, Renata volvió a su casa.

_ hola madre, llegastes temprano.- Renata entro a la humilde casa, su madre estaba en la cocina.

_ hola hija, si hoy me dejaron salir unas horas antes.- Renata noto algo extraño en la expresión de su madre.

_ pasa algo mamá.- Renata se sentó en la mesa que adornaba la pequeña sala.

rosario se quedó en silencio, cosa que preocupo a su hija.

_ mamá que ocurre.- Renata se levantó y camino hasta donde su madre se encontraba picando unas verduras.

_ debemos hablar.- rosario la tomo por la mano y la llevo de nuevo a la mesa.

rosario se sentó al frente de su hija, estaba nerviosa, Pero debía tener esa conversación con su hija.