La Omega más deseada

Ashley:

Mientras Hada estuviera en sus estudios debía evitar a toda costa ver a su padre. Con todo lo que pase, no deseo verlo por nada del mundo, aún me confunde su olor y me agradaba su lobo. Él estuvo en contra de su decisión, aunque al final tampoco escucho sus consejos.

Escuchaba como todos se divertían hoy, vinimos a mi casa después de que terminamos la visita a las termas. Prepare unos margaritas, para que disfrutaran al máximo este día, me gustaba tanto ver que Hada estaba tranquila y feliz por primera vez. Escuché sonar mi teléfono y el número no era conocido:

- ¿Alo?, ¿con quién habló?_ respondí mientras me alejaba un poco

- Ashley soy Laura. Hola ¿cómo estás?_ dijo al otro lado

- Laura, me llamas de un número desconocido, ¿porque no quieres que tú esposo sepa que me hablas?_ dije ofendida ya que la última conversación que tuvimos le pedí que ya no me llamara

Estaba molesta porque hacía lo que decía su esposo, hasta no decirle la verdad a su propio hijo, haciendo creer que mi hija era el problema.

- Entiende Ashley, cuando está el alfa estás obligada a obedecer, sería más sencillo si el alfa fuera Dante_ decía ella como excusa

- No me interesa eso. Si lo que buscas es que las cosas sean así en tú familia no busques mi opinión o amistad_ dije firme

- Espera, te llamaba porque me inquieta el hecho de que Dante no puede sentir a su lobo. Sospecho que tiene que ver con Hada_ mencionó

- ¿Con Hada?_ dije confundida

- ¿Recuerdas que Hada dejo de sentir la conexión con Dante? Creo que algo pasó y eso hizo que su lobo no se manifiéste_ agregó

- Si realmente quieres ayudar a tú hijo, deberías ser más sincera con él y no dejar que tú esposo lo envenene_ dije y le corte

Hadassa:

Había llegado el día que debía regresar a la Universidad, tenía todo listo. Él último día que estuvimos con Leandro y mis amigos, mi madre estuvo media extraña, recibió una llamada que la hizo enojar al parecer. Quizás fue mi padre, así que preferí no preguntar.

Cuando llegue al terminal para tomar mi bus y regresar a mis estudios, mi madre me dijo que me cuidara mucho y que pasará lo que pasará yo no he hecho nada malo.

- Mamá no entiendo a qué viene eso_ dije confundida

- Solo quiero que recuerdes eso y que no te cuestiones por cosas que sucedieron antes. Quiero que seas feliz_ me respondió y me acaricio el rostro con cariño

Sentía que la situación era extraña por alguna razón que desconocía, sin embargo, sus palabras me dieron un efecto tranquilizador.

Subí al bus con una sensación de paz en mi corazón, Nira había estado tranquila con respecto a mi compañero, había cosas muy importantes de por medio que aceptar ser la compañera del rey, y la aparición de esa supuesta amiga demostró lo peligroso que sería llegar a ser la reina. Quizás habría más personas que harían hasta lo imposible por interferir, eso y mi carga de culpa por lo de Dante.

Mi madre agitaba su mano y me susurraba desde abajo que me amaba. Yo igual lo hice y deseaba de todo corazón que ella también lo fuera.

Cuando baje del bus, me estaba esperando Sandra, nos fuimos a comer algo antes de acomodarme, ella me hablaba sobre el plan de estudios que tendríamos este año, más tarde vimos a Jason y un amigo nuevo que había hecho, el chico era simpático.

En la habitación nos acomodamos, iniciaría mi nuevo año y esperaba que fuera mejor que el anterior. Cerré los ojos un momento y me quedé profundamente dormida:

- ¿Hada? Hada_ escuché una voz familiar

- Mmmm ¿Leandro?_ susurré media confundida y adormilada

- Hola, por favor no digas a nadie más que estoy aquí_ mencionó y eso me confundió. Él Leandro que conocía no tenía el cabello negro

- Me vine disfrazado para que nadie me reconozca_ susurró

Aún no lograba despertar con claridad, el sujeto que hablo con voz de Leandro se marchó. Mis ojos se sentían muy pesados, lo que me llevó a dormir nuevamente.

Al día siguiente que desperté me sentía completamente renovada, tome nota sobre las materias que tomaría, tendría un año realmente atareado pensaba, mientras escribía. Una figura familiar paso por mi lado y me chocó bruscamente por el hombro. Su golpe fue tan fuerte que me tiró al suelo:

- Oye ten más cuidado_ le respondí enojada, al

levantar la vista para ver de quien se trataba quedé en shock

No puede ser_ susurré

< No puede ser compañera, esto no es bueno_ susurró inquieta Nira

- Vaya con que estás en esta universidad Omega_ decía con desprecio e indiferencia, un Dante recuperado. Se limpiaba el hombro por haberme topado con él

- ¡Oh vaya! Tú conoces a esa mujer también_ oí la voz de la supuesta amiga de Leandro

- ¿Cómo es que conoces a Dante?_ dije perpleja

- Bueno trabajamos en colaboración con los alfas de otras manadas, como soy hija de betas del rey tengo mis contactos_ dijo con malicia

Está mujer tramaba algo evidentemente, sus palabras cerraban un significado escondido, es como si me estuviera advirtiendo. Pero lo que me dejaba más sorprendida era que volvía a ver a Dante recuperado y sus ojos que una vez eran traviesos conmigo, ahora parecían verme con odio y desprecio.

- Vámonos de aquí, no quiero tener que escuchar a esta mujer hablarme como si fuera mi amiga y llamarme por mi nombre_ dijo Dante indiferente y molestó

¡Tu Omega!, no quiero oírte llamarme por mi nombre_ agregó

Se giró sin mirar atrás y se marchó junto a esa despreciable mujer. Me quedé ahí parada con la cabeza a punto de estallar, una mano cubrió mi hombro y me habló con gentileza:

- ¿Hada estás bien?_ la voz era familiar

- Si, gracias. Es solo un tema incómodo_ dije y el hombre que me hablaba tenia un rostro muy atractivo, cabello negro y ojos azules.

Era parecido a... Espera... Cuando anoche me dormí lo vi.

- Si soy yo. Te dije anoche, al parecer tenías un sueño muy pesado_ dijo con una sonrisa

Te ves pálida, ¿quiénes eran ellos?_pregunto

Por visto Leandro no se dió cuenta de que su antigua amiga, estaba con Dante.

- Tú amiga Natasha, conoció a Dante y me encontré con ellos_ dije

Los ojos de él se abrieron grandes y sentí que apretaba sus puños. Esto no será bueno...