Mi Frágil Guerrera

Cuando, Cristina leyó el periodo que estaba en el mesón. Que a pesar de que el diario tenías algunos días, Cristina se preocupo por su tía Maura, ella más que nadie sabía lo importante que era Clemente para ella, también pensó mucho en sus primos. Miro la fecha del periódico, era en los días que ella no estaba en el país.

Al salir de la cocina para dirigirse, a la oficina de Víctor para pedir permiso e ir a la casa de su tía, aunque ella la haya votado de su hogar de igual manera no le guarda rencor, y sintió en su corazón que podría necesitarla, Cristina miro a un costado y en unos de las mesas VIP, observa a Jorge que se deleitaba de un postre, se podía apreciar que estaba en la espera de alguien.

Cristina---: Jorge, ¿qué haces aquí?

Jorge al mirar a Cristina, se tensó como ella estaba con uniforme de cocina él sonrió con malicia, porque dedujo que Cristina trabajaba en aquel lugar.

Jorge---: Que bestia dónde vine a encontrar a esta pobretona.

Cristina---: Oye cálmate, deja de ser tan atrevido y dime cómo está mi tía con la muerte de Clemente.

Jorge-----: Yo no tengo por qué decirte nada y más claro ubícate que no soy igual que tí.

Cristina---: Que no soy igual que tú, (sonríe) deja de fingir que eres de alta sociedad, dime cómo está mi tía.

Jorge---: No me preguntes de esa vieja pobretona...

Cristina no dejo terminar de hablar a Jorge y lo abofeteó, golpe que Jorge regresaría porque a él nadie lo golpea mucho menos Cristina que él consideraba menos que él.

Jorge---: Atrevida, una pobretona como tú, no deberías ni siquiera mirarme.

Cristina---: Te mataré.

Cristina se lanza hacia Jorge, como si fuera una fiera, porque ella se molestó cuando él se refirió de vieja a su tía, Cristina aruño el rostro de Jorge, ella no iba a permitir que él hablara así de su tía, y tenía que darle una lección al arrogante de su primo. Renato que ingresaba, al ver la acción de Cristina y al ver a Jorge con el rostro arañado se molestó y descargo su furia en contra de Cristiana abofeteándola y ofendiéndola.

Renato---: Como te atreves a tratar mal a mi hijo, (mirando a Jorge) te encuentras bien hijo.

Víctor que salió por el escándalo, se molestó al ver que Renato golpeara a su hija, el cómo un padre protector ordenó que sacarán a Renato y a si hijo del restaurante.

Cristina---: Como que papá.

Jorge---: Si tonta sirvienta mal oliente, él es mi padre.

Guardia---: Tenga la bondad de salir

Renato---: Víctor disculpa no voy a permitir una empleada desfiguré el rostro de mi hijo.

¡Víctor---:! Largo de aquí! (señalando la entrada)

Cristina---: Como que su padre, contesta Jorge.

Jorge—-. No tengo porque contestarte (se va).

Víctor---: Que sea la última vez que golpeas a mi hija, largo de aquí.

Renato---: Ya veo, así que tú eres la oportunista, ahora entiendo por qué le hiciste eso a mi hijo por qué eres de la calle, recuerda que Brenda es mi familia y no permitiré que te aproveches de ella, porque grábate en la cabeza no eres más que una vulgar oportunista, que te aprovechas del buen corazón de ellos.

Víctor---: Lárgate nunca más regreses por aquí.

Cristina no salía de su shock, ella no entendía por qué razón, Jorge su primo le decía papá a un hombre distinto a Clemente que era su padre. Renato salió e ingreso a su vehículo, porque Jorge ya no estaba.

Cristina---: Alguien me puede decir por qué ese imbécil le dijo papá a ese señor.

Víctor---: Ese chico es el hijo perdido de Renato, ¿por qué lo agrediste?

Cristina---: Le dijo vieja a mi tía, como se atreve a insultar la si ella es su madre, papá puedo ir a ver a mi tía, no está muy lejos de aquí.

Víctor---: Está bien hija, pero no te vuelvas a acerca ellos.

Cristina---: Está bien papá, pero si ese imbécil vuelve a insultar a mi tía yo lo aruñare hasta que se quede sin sangre.

Víctor miró el rostro rojo de Cristina por la bofetada que dio Renato, eso él no perdonará a Renato, sin tan solo él pudiera caminar, estaba más que seguro que devolvería el golpe que le dio a su hija, necesitaba viajar lo más pronto posible para curarse, y así poder defender a su familia, porque se siente indignado e impotente en esa silla de ruedas para ayudarlas.

Por su parte Jorge, reviso su rostro, en el espejo retrovisor, y al ver la sangre que le salía en unos de sus aruñones él apretó su puño y golpeó el volante.

Jorge---: Eso no se quedará así primita, ya verás que me pagarás con intereses está humillación.

Mientras tanto, en España Romina y José estaban de regreso, José tenía que guardar mucho reposo, Romina era una esposa atenta, y cuidaba bien de su esposo, eso hizo que José recapacitara, no podía seguir aferrado a la ilusión que siente por Cristina al fin de acabo su madre le informo que ella tomó el camino más fácil para sobrevivir, él se imaginaba como Cristina atendía a aquellos hombres y esa imaginación hacía que le doliera el corazón, él se sentía culpable por la vida que aparentemente había escogido Cristina.

Romina----: Mi amor, ¿quién es Cristina?

José no sabía cómo responder, pero prefirió hablar con la verdad no quería ocultarle nada a su esposa.

José---: Cuando tú y yo nos separamos, regrese a Ecuador en la casa de mis padres trabajaba una muchacha, yo la ilusione necesitaba desahogarme... mi amor, fue pasajero.

Romina----: Pasajero, José tú la llamabas.

José---: Es que tengo cargo de conciencia, ella quedó embarazada y yo no le creí, la trate mal, claro ella me dijo después de que tú y yo nos reconciliamos.

Romina se levantó de golpe, no podía creer lo que su esposo le confesaba, se asomó a la ventana para calmar su ansiedad de llorar, ella se sintió traicionada en saber que su esposo tenía un hijo fuera del matrimonio.

José---: Ella abortó, se deshizo de mi hijo, y ahora ella trabaja en los burdeles como prostituta.

Romina----: Ella ya no tiene a tu hijo.

José---: Nunca le perdonaré por haber matado a mi hijo, talvez no me casaría con ella, porque te tenía a ti, pero me iba a hacer responsable de mi hijo.

Romina----: ¿La quieres? Ya que me estás diciendo la verdad, mi pregunta ¿la quieres?

José---: No, yo te escogí a tí, tú eres mi esposa y la futura madre de mis hijos.

Romina tocó su vientre, ella había dejado los anticonceptivos hace dos años y hasta la fecha no ha podido quedar embarazada.

Romina----: Seguro,.que quieres que sea madre tus hijos.

José---. Si, mi amor tu eres mi vida.

Romina sonrió, le gustó la sinceridad de José, pero ella no podía decirle que había tenido una noche de pasión con un desconocido unos días atrás.

Al día siguiente en la ciudad de Machala, Cristina se preparaba para visitar a su tía, aunque ella tenía más de tres años que no la veía, cuando salió para dirigirse al vehículo que Víctor su padre adoptivo le designó más su chófer de confianza, Francisca madre de Brenda llegó, Renato le había informado lo ocurrido con Jorge su supuesto hijo, eso había molestado a Francisca porque según ella, Cristina solo era una oportunista que se aprovechaba del buen corazón de su hija.

Francisca---: A ti te quería ver.

Cristina---: En que la puedo ayudar señora.

Francisca---: Cuando te dirijas a mí o a cualquier miembro de mi familia, tienes que agachar la cabeza, como pudiste agredir a mi sobrino.

Cristina---: No tengo por qué agacharle la cabeza a nadie señora, porque ahora aprendí que yo tengo los mismos derechos que usted y que todos.

Francisca---: Eres una maldita arrimada y oportunista, mírate a través del cristal de esta venta aunque vista bonito debajo de esa ropa no eres más que una mendiga.

Cristina---: (se ríe) No me avergüenzo de mis raíces ni tampoco de haber andado en la calle, porque a pesar de tener mucha necesidad jamás pedí dinero, pues me lo gane y si fui caramelera y a mucha honra y eso de que soy una oportunista, pues no es mi intención que ustedes lo vean de esa manera, solo que en mi camino encontré personas buenas como lo es Brenda y Víctor, y estaré a su lado hasta que ellos me necesiten le guste o no le gusten a usted señora, permiso.

Francisca---: Maldita arrimada no descansaré hasta sacarte de la vida de mi hija.

Cristina hizo caso omiso, a las palabras de Francisca madre de Brenda, ingreso al vehículo y salió en busca de su tía, pero también sintió un profundo dolor dentro de su corazón por las palabras de Francisca, también recordó la bofetada que le dio Renato y no entiendo por qué razón ese golpe le dolió más de lo que imaginaba.