Daniel Hao, un conductor que salvó al Gran Señor Jimmy Li durante un atentado con bomba en su fábrica. Como forma de agradecimiento, Daniel fue casado con Sandra Li, la hija más querida y orgullosa de la familia Li.
Daniel es despreciado y humillado por los demás miembros de la familia Li, siendo incluso llamado "yerno basura", ya que su presencia en la familia Li es vista como inútil y una vergüenza para ellos. Sin embargo, no pueden hacer lo que quieran con él, ya que este hombre está bajo la protección del Gran Señor Jimmy Li.
Un día, Daniel encuentra un billete de lotería en la basura, con el número de la suerte coincidiendo con la fecha del cumpleaños de su madre. Para su sorpresa, ese billete es el ganador de un premio de 300 millones. Con ello, Daniel compra acciones en varias empresas y, con parte del dinero, abre un negocio con su gran amigo, para demostrar que también puede ser alguien, igual que todas las personas que lo humillaron.
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Capítulo 23
Capítulo 23
La cooperación con algunas empresas era un dilema para Daniel. Se descubrió que muchos empresarios estaban involucrados con la mafia, tanto a nivel nacional como internacional.
"¿La Empresa Yue quiere proponer una cooperación con la Empresa Qing? ¿La aceptarás?", preguntó Nathan.
Daniel suspiró porque sabía que la empresa pertenecía a uno de los miembros de Cabello Rojo. Había escapado deliberadamente de ese grupo para poder vivir una vida tranquila y pacífica. Se sentía feliz de haber escapado del dominio de su padre. No quería volver solo para poder asumir los negocios de los subordinados de Ojos Negros.
"Estoy buscando empresas que no tengan ninguna relación con grupos mafiosos", respondió Daniel, que ahora estaba de pie ante la ventana de vidrio que daba al centro de la ciudad.
"Hay dos grandes empresas que no tienen ninguna relación con la mafia o la Yakuza, pero será difícil acercarse a ellas si se enteran de nuestro pasado", dijo Nathan vacilante.
Escuchar que había esperanza, aunque pequeña, de cooperar con esas empresas despertó la curiosidad de Daniel. Intentaría primero averiguar si esas empresas podrían ayudarle.
"¿Quiénes son?", preguntó Daniel.
"La Empresa Ying y la Empresa Yang", respondió Nathan, haciendo que Daniel abriera los ojos de par en par.
Las dos empresas eran rivales de la Empresa Li. Daniel también sabía sobre el desarrollo de las empresas que rivalizaban con Jimmy Li desde hacía cinco décadas.
"De acuerdo, lo pensaré. Necesito considerar los pros y los contras de cooperar con estas dos empresas", dijo Daniel después de girarse y quedar frente a su confidente.
La noticia de la muerte de Jimmy Li llegó a su familia. El cuerpo sería enviado esa misma noche y probablemente llegaría a la residencia Li al mediodía.
Sandra se sintió muy afectada al enterarse de la muerte de su querido abuelo. Incluso se desmayó cuando Leon le dio la noticia. Por supuesto, Sindy entró en pánico por miedo a lo que podría pasar con su hija y su futuro nieto.
"¿Dónde está la Señora Sandra, Señor?", preguntó Daniel sin aliento, pues había ido directamente allí en cuanto supo que su esposa se había desmayado.
Daniel todavía llamaba a Leon "Señor" y a Sindy "Señora". Los dos no permitían que Daniel los llamara "Padre" y "Madre".
"Sandra está descansando en su habitación. No la molestes", respondió Leon.
Ignorando las palabras de su suegro, Daniel corrió escaleras arriba hasta la habitación de Sandra. Ella estaba acostada, acompañada por una enfermera sentada a su lado.
"¿Cómo está mi esposa?", preguntó Daniel.
"Solo ha sufrido una conmoción. Es mejor que la Señora Sandra mantenga la calma, ya que está embarazada y susceptible a un aborto espontáneo", respondió la enfermera con cautela para que la paciente no se pusiera histérica al despertar.
Daniel vio que el rostro de Sandra estaba un poco pálido. Él mismo tenía miedo de que algo le sucediera a su esposa y a su futuro hijo.
La repentina y misteriosa muerte de Jimmy Li dejó a Daniel con la sospecha de que el grupo Ojos Negros estaba involucrado. El día anterior, él y Sandra habían llamado a Jimmy Li y le habían preguntado al médico sobre su estado. La salud de Jimmy Li había mejorado mucho y ya podía hablar bastante. Sin embargo, ese día, se enteraron de que el anciano había muerto.
"Necesito averiguar la causa de la muerte del Sr. Jimmy Li", pensó Daniel.
Sandra comenzó a recobrar la consciencia y, al ver a Daniel, lo abrazó inmediatamente y lloró, expresando su tristeza. Estaba muy afectada por la muerte de Jimmy Li, pues habían prometido que se irían de vacaciones juntos cuando se recuperara y volviera a casa.
"¿Crees que la muerte de mi abuelo no fue natural?", preguntó Sandra, consciente de que su familia había arriesgado su vida recientemente.
"Lo averiguaré. No pienses en nada, solo en ti y en nuestro bebé. No hagas caso a nadie que pueda hacernos daño", respondió Daniel.
Esa noche, Daniel acompañó a Sandra mientras dormía y revisó la información sobre los resultados de los exámenes de salud de Jimmy Li. Había pedido a Nathan que pirateara los datos del hospital donde Jimmy Li estaba siendo tratado.
"Ya me lo imaginaba. Esta fue una muerte no natural. Todos los resultados de los exámenes del Sr. Jimmy Li muestran una mejora en todos los órganos internos y en la apariencia física", murmuró Daniel.
"¿Quién? ¿Quién mató al Sr. Jimmy Li?", se preguntó Daniel.
Como se esperaba, el cuerpo llegó a la residencia de la familia Li alrededor del mediodía. Muchos conocidos, familiares y socios comerciales fueron a presentar sus últimas condolencias a Jimmy Li.
Sandra se desmayó de nuevo al ver el rostro de su abuelo, ahora fallecido. Como su única nieta y muy mimada y amada por Jimmy Li, era comprensiblemente difícil para ella.
Daniel examinó los rostros de cada persona que venía a presentar sus condolencias. Quería ver quién parecía satisfecho con la muerte de Jimmy Li. Esa persona sería añadida a su lista de sospechosos de matar al jefe de la familia Li.
"Arthur... Damian. Como sospechaba, ellos también están involucrados en la muerte de su padre. ¿Pero por qué? ¿Un hijo sería capaz de matar a su propio padre? Bueno, a menos que quisieran algo que le perteneciera", pensó Daniel.