LA PERDICIÓN DEL CEO

Sophia… 

Después de que el señor Davis se retira todos en la mesa hicimos lo mismo, Luis me acompañó a una de las cabañas y me dijo que estaría sola allí, pero que si quería me podía quedar en la casa grande _ no, sabes que no, prefiero estar aquí y me disculpas, pero tu familia es de armas tomar 

_ si, no sabes el gran conflicto que hay entre Stephen y su familia, al igual que todos los hijos del abuelo que no es como que se quieran mucho, bueno si tienes temor o algo así, aquí existe un botón de pánico al lado de la habitación, en el panel de seguridad saldrá el número de la cabaña y los guardias correrán a tu ayuda 

¿_ es que corro peligro?

_ no, pero el abuelo es muy precavido, con eso de que fue militar, el número de tu cabaña es el tres 

¿_ y cuántas cabañas hay en total? 

_ son siete, en esa última que ves con la luz encendida es donde se está quedando tu jefe 

_ yo no , no necesito saber eso, porque tienes que…

_ por nada, solo te estoy poniendo al tanto, pero si lo aprecias sería bueno que alguien ajeno a la familia hablara con él, no te imaginas todo lo que le ha tocado vivir por culpa de su padre y la ambición de su madrastra 

*

_ después de que Luis se fuera decidí ir a la ducha y así subir a la cama, tome mi teléfono y encontré un par de mensajes del señor Davis

¿_# duermes?

# gracias por hacerme ver el error que iba a cometer en la mesa 

_ #no, aún no duermo 

# me agrada saber que fue de ayuda mi intervención

_# podemos seguir hablando

_ # sí, dígame

_ # así no, frente a la cabaña seis hay una especie de parque podemos vernos allí, solo quiero contarle a alguien como me siento 

_ está bien, ya salgo para allá _ salí de la cama y tomé un abrigo, me dirigí al lugar acordado y el señor Davis ya estaba allí sentado en una de las sillas del lugar

_ señorita Smith, que bueno que haya venido, pero parece que fuera a llover

_ si eso veo, pero no tengo problema con la lluvia

_ lo dice porque nunca ha sentido la lluvia de este lugar, aquí la lluvia es muy helada, yo diría que cala en los huesos _ no he terminado de hablar cuando sentimos las primeras gotas de lluvia

_ bueno al parecer voy a tener que comprobar lo de la lluvia

_ esperé piensa quedarse ahí para comprobarlo, 

_ sí, quiero saber que tan cierto es 

_ estás loca, pero, ok yo haré lo mismo, pero debemos poner algo de interés a esta espera 

_ que propone señor Davis 

_ si usted resiste menos de media hora bajo está lluvia pasará la noche conmigo en mi cabaña y bajo mis sábanas

_ está bien acepto, pero si resisto más de media hora usted deberá darme los siguientes tres días de este fin de semana

_ está bien, la necesito mucho en mi empresa y sé muy bien que no voy a perder la apuesta _ 

*

han pasado solo 10 minutos y la veo temblar de frío, estamos todos empapados, pero ella no se rinde _ está bien señorita Smith vamos a mi cabaña, no pasará la noche bajo mis sábanas, pero admita que yo tenía razón, 

_ si señor Davis tenía razón el frío es abrumador, _ él se pone de pie y me guía hasta su cabaña los dos estamos completamente empapados, _no sé en que estaba pensando cuando propuse está apuesta tan infantil 

_ pienso igual señorita Smith, cuando no se tiene en que ocupar la mente, el ocio nos hace ser irracionales, debe quitarse esa ropa no se preocupe que no pienso mirar si eso es lo que le … _ ante mi asombro la veo quitar su ropa mientras no despega su mirada de mí, 

_ y bien señor Davis piensa quedarse con esa ropa mojada o …

_ si, si ya me desvisto y voy en …_ ella toma mi camiseta y la retira de mi cuerpo, posa sus manos sobre mi pecho y mi cuerpo que estaba temblando de frío ahora arde con su toque, 

_ desabrochó sus pantalones y él se deshace de ellos quedando completamente desnudo, no sé que estoy haciendo, pero no tengo miedo y quiero experimentar, quiero sentir

_ Sophia e, estás segura de esto yo no… _ ella cubre mis labios con sus temblorosas manos

_ no, no estoy segura pero por favor hágame estar segura 

_ me acercó muy lento y beso su cuello, mis besos van subiendo hasta llegar a su oído le susurro _ no se imagina cuánto la deseo Sophia

_ muerde el lóbulo de mi oído y un fuerte gemido se escapa de mí, él me toma de la mano y me guía escaleras arriba, abre la puerta de su habitación y empieza a besar mis labios muy lentos y suave, me guía hasta la cama, me va recostando poco a poco y yo me dejó llevar, 

_ me acomodo entre sus piernas y continuó besando su cuello, y boca, voy descendiendo hasta llegar a sus grandes senos con los que tanto he fantaseado, los tomo entre mis manos y la siento vibrar cuando mi miembro la rosa, _ si no estás segura estoy dispuesto a detenerme no quiero traerte malos recuerdos

_ está bien, yo si lo deseo, quiero dejar de temerle al sexo 

¿_ sin dejar de besarla roso mi miembro en su entrada, ella permanece con los ojos cerrados _ mírame Sophia, abre los ojos, quiero que disfrutes este momento tanto como yo lo estoy haciendo, _ ella abre sus ojos y me mira, empiezo a hundirme en su interior muy lentamente, su interior me aprieta con gran fuerza y yo siento que estoy por correrme con solo sentirla, empujó un poco fuerte y sus uñas se entierran en mis brazos, una lágrima rueda por su mejilla y me detengo por un momento al sentir que algo escurre entre nosotros llevo una de mis manos hasta allí para descubrir que es sangre, me quedo mirándola por un instante _ Sophia, eres virgen?

_ por favor no me pregunte nada, solo ayúdeme a sentir, quiero borrar mis traumas 

_ Sophia yo no…_ ella toma la iniciativa de besarme, y es suficiente para que me deje llevar por el deseo, tomo fuerte sus caderas y terminó por hundirme en su interior, ella estruja fuerte las sábanas y yo sigo con mi mirada cada uno de los movimientos de su cuerpo, solo quiero que lo disfrute tanto como yo lo estoy haciendo, mis caderas se mueven al encuentro con las suyas, los sonidos de nuestros cuerpos al unirse y nuestros gemidos hacen eco en toda la habitación mientras un torrencial aguacero arrasa con todo allá afuera

_ sus caderas no paran de moverse y lo que hace unos momentos dolía ahora me causa placer, él se acerca a mi cuello desliza sus labios hasta llegar a mi oído y me dice.

¡_ quiero que tengas un orgasmo,! Por favor córrete para mí!

_ sus palabras aumentan mis deseos, muevo mis caderas al encuentro con las suyas solo un par de sus estocadas para sentir mi vientre bajo temblar, mi respiración se acelera y un gran frío recorrer mi espina dorsal, 

_ se aferra muy fuerte a mi espalda, muerde mi cuello y toda la presión que ejerce su orgasmo en su interior me llevan a una placentera eyaculación