PROHIBIDO

Rachel deseaba poder contener sus lágrimas que estaban a punto de salir, pero si lo permitía, cabía la posibilidad de que se rompiera la barrera que había creado para que no la leyeran, los consejos de Crepúsculo había sido de gran ayuda para poder canalizar el poder.

HORAS ANTES

Rachel había estado esperando a su mago en la habitación, al tardarse fue a su oficina, pero lo que escuchó la dejo sin habla, no podía continuar con esta locura que acabaría con la vida de la persona que ella quería.

"Te voy a dejar algo claro, la dejaré si ella lo quiere, mientras no" Advirtió Crepúsculo.

Oscuridad, en menos de un segundo estuvo cerca de su hijo propinandole un golpe, sus ojos se oscurecieron mostrandose temible, Peter quiso huir por el estruendo, el golpe habia sido tan fuerte que habia resonado en toda la habitación.

"Está muy fácil, esa mocosa te dejará por cualquier humano, es indecisa, le diste de regalo amor imposible, nada en ella tiene futuro, tiene un problema serio para conseguir pareja estable ¿Crees que eres el indicado? ¡No lo eres! Dañarás el buen trato con la familia, Luisa se enojará con todos por meterte con su princesa y si esa mujercita te envía al consejo, terminarás sin nada" Resopló Oscuridad.

Crepúsculo limpió la sangre que corría la comisura de sus labios y repitió "Me alejaré, solo si ella quiere"

"¿Es un regalo de su parte que no pueda encontrar a alguien estable? ¡Maldito Christian!" Se preguntó así misma Rachel y empujó la puerta.

TIEMPO REAL

Los pensamientos de la mujer fueron interrumpidos por el hombre que ingresó a la habitación.

Por otro lado, Oscuridad soltó una carcajada por las ocurrencias de William "¿Entonces el hombre lo único que desea es golpear a tu hermano? Perfecto, concedido, el día que Lombardi se tope con Crepúsculo podrá golpearlo como un simple humano"

"Me doy cuenta de que a pesar de Isa envolver a su esposo quien tiene las riendas es él" Dijo Ocaso.

"Ellos pasaron muchas cosas juntos y ese hombre demostró ser el único merecedor de la belleza de mi nieta y ella lo sabe" Dijo Oscuridad.

En ese instante entró Crepúsculo en donde se encontraba su padre y su hermano "¿Qué debo hacer?"

Oscuridad observó a Ocaso, al parecer el hombre había tenido una conversación con la castaña y estaba convencido de que la niña no lo quería en su vida.

"¿Hablaste con Cheli?" Preguntó Ocaso a su hermano.

El pelirrojo lo miró como un mosquito insignificante, él lo había traicionado "Eso no te importa cabrón"

"No es culpa de tu hermano que la pequeña, mago no te quiera, ese es su instinto" Dijo Oscuridad riendo.

"¿Cuáles son las reglas padre?" Preguntó Crepúsculo.

"Permitiste que una chica lobo y un vampiro mantuvieran una relación, sabiendo perfectamente que está prohibido, ambos morirán por tu culpa" Dijo su padre.

"Bien, me encargaré de matarlos" Respondió Crepúsculo.

"Excelente, volvió mi hijo. No hay delito al traer a Rachel a este lugar, Pensándolo bien, ella no es 100% humana, lleva magia en su sangre, por lo tanto, es un mago, además le has ayudado con sus poderes, me impresionó mucho no poder leerla cuando la vi" Continuó diciendo Oscuridad.

Crepúsculo no quería que su padre se encaprichara con Rachel y dijo "Ella no es consciente de lo que hace"

"¡Oh que lastima! Creí que quizás quería unirse al clan. Mantuviste una relación con tu sobrina, eso si es un delito, que pudo acabar con el estatus y el poder de los Yale" Dijo molesto Oscuridad.

"Deberás renunciar a tu cargo en el mundo mágico, no serás más el jefe..."

"No estoy de acuerdo" Dijo Luz la madre de Crepúsculo irrumpiendo en el lugar.

"Madre" Dijeron al unísono ambos hijos.

"Hola mis niños" Saludó la mujer a sus hijos y oscureció la mirada a su esposo "¿Por qué no me enteré de esto antes?"

"¿Quién te lo dijo? No deseaba preocuparte" Respondió Oscuridad.

"¡Que te importa! La próxima vez que ocultes algo de mis hijos, no vivirás para contarlo cariño" Dijo la mujer y Oscuridad asintió.

Crepúsculo y Ocaso querían reír, su padre el temible Oscuridad reprendido por su esposa, ellos pensaron que definitivamente las mujeres eran un punto clave en una relación.

"Por ser el primer error que comete, te daré unas vacaciones, un año fuera de aquí, podrás ir a donde tú quieras menos a buscar a Cheli, tomate un tiempo para pensar y luego vuelve y toma el control de tu mundo" Dijo Luz.

"Gracias madre, pero no quiero ser el jefe, tomaré el castigo de mi padre..."

"Mira muchacho, piensa las cosas, tienes un año, si después de ese tiempo aún piensas igual, lo aceptaré" Dijo la madre acercándose y tocando el rostro del hombre.

Luz sabía que algo no iba bien con su Crep, la castaña había quitado la coraza que envolvía al temible Crepúsculo, ahora estaba expuesto ante todos, sin importarle cuál sería su destino.

"Cariño ten en cuenta que no es el primer error, primero se dejó lanzar un hechizo por Merlina, no puede amar a una humana porque muere, permitió una relación entre una loba y un vampiro..." Dijo Oscuridad.

"¡Cállate Oscuridad! Tú has cometido más y peores, no me hagas recordarlos" Dijo estas palabras la mujer mientras observaba el semblante decaído del pelirrojo.

"No morirá Crep" Dijo Luz en la mente de su hijo.

Crepúsculo la observó y respondió de igual manera en la mente de su madre "Es humana"

"Sabes que no, esa niña tiene mucha más magia en su cuerpo de lo que te puedes imaginar, el hechizo que lanzó esa bruja sobre ti queda desecho el día que la mates y tu padre la tiene encerrada, ya sabes que hacer" Confesó la mujer en la mente de su hijo.

"¡Dejen de hacer eso! Estamos aquí, pueden hablar con tranquilidad" Dijo Oscuridad refutando.

"Acepto tu castigo madre, pero antes de irme quiero a Merlina" Ordenó Crepúsculo.

HORAS ANTES

Crepúsculo necesitaba mirar a la mujer a sus ojos y que fuera capaz de decirle que se marchaba, habían pasado tantas cosas juntos, que le parecía imposible que Rachel lo abandonará.

El hombre abrió la puerta y Rachel se sobresaltó "¡Mierda! Me asustaste"

"A la final terminaste siendo una perra astuta, ¿Le temes a mi padre y huyes como una rata? Pensé que eras más valiente sobrina" Dijo Crepúsculo dolido.

"No puedes aceptar, que me aburrí, no le tengo miedo a nadie, deseo volver a casa, esto del mundo mágico, brujas y toda esa mierda me tiene harta" Dijo Rachel.

"Eres libre, fue un buen sexo, solo eso, quería ser yo el que te botara, pero te me adelantaste. Cuando naciste te di un mal regalo, hoy me retracto de él" Dijo Crepúsculo.

"Creí que no podías..."

"He roto tantas reglas por tu culpa que una más no marcará la diferencia. Hoy remplazo mi regalo por un amor posible, mereces ser feliz y dejar de comportarte como una pequeña zorra" Dijo Crepúsculo.

"¿Quieres que te dé las gracias? Si soy una perra es por tu culpa Chr... Tío" Gritó Rachel.

"Bien, a hora puedes ir a abrirle las piernas a quien te dé tu puta gana, a mí no me importa, adiós para siempre Rachel Lombardi" Dijo Crepúsculo.

"Eso mismo haré, adiós para siempre tío" Se mantuvo firme Rachel, viendo salir del lugar a Crepúsculo.

Rachel deseaba llorar, pero respiró profundo y se contuvo. Esperó un tiempo para tranquilizarse y se fue en busca de su bisabuelo.

La mujer abrió la puerta sin tocar, se topó a su tío Ocaso y a sus bisabuelos, aunque únicamente estaban ellos podía sentir la presencia de Crepúsculo, su aroma estaba en el lugar.

"Bisabuela..."

"Mi niña, pero que hermosa estás" Dijo Luz a la castaña, observándola detalladamente.

"Gracias, tú te ves hermosa también ¿Puedo hablar con ambos?" Preguntó Rachel mirando a su bisabuelo.

Ocaso se marchó y Crepúsculo que se mantenía en las sombras también abandonó el lugar dejando a Rachel únicamente con sus padres.

"¿No hay nadie más con nosotros?" Preguntó Rachel.

"No hay nadie más, solo los tres, pequeña hermosura" Dijo Luz.

"Ya hice lo que querías bisabuelo, dejé a Christian, ahora necesito que me ayudes con dos personas que sufren por mi culpa" Dijo Rachel.

"No te obligué a nada muchachita, tu dejaste a mi hijo porque quisiste, dijiste que estabas aburrida" Defendió Oscuridad mirando a su esposa, quien lo fulminaba con la mirada.

"Escuché lo que ocurriría, si continuaba a su lado, entonces si no quieres que me retracte y vaya a decirle que realmente si deseo estar con él, ayúdame con algo" Amenazó Rachel.

"Maldita..."

"Cariño, escucha a la niña" Dijo Luz marcando sus palabras "Continúa pequeña"

"James, el mejor amigo de mi hermano, no es feliz por mi culpa y Maximiliano mi profesor tampoco, deseo que sean felices" Dijo Rachel.

"No es posible, es un regalo y además es tu culpa por meterlos en tu cama jovencita" Respondió Oscuridad.

"Reconozco que es mi culpa por desconocer los regalos que me habían dado al nacer, pero quiero hacer las cosas bien y no podré si veo a esos buenos hombres anhelando algo que nunca podrán a tener" Confesó Rachel.

"Está bien princesa, te ayudaré con eso, no te preocupes, ve a casa" Dijo Luz.

"Pero Cariño..." Refutó Oscuridad.

"Estás escuchando lo que dice, si no la ayudamos le dirá a Crep que todo fue una actuación de su parte para no dañar su vida, si mi hijo escucha eso nunca la dejará" Dijo Luz en la mente de su esposo, pero la astuta Rachel había escuchado todo, sus poderes estaban aumentando.

Luz pareció sospechar de su intromisión, la observó y Rachel sonrió "No puedo leerte pequeña ¿Cómo lo haces?"

"No lo sé, solo ocurre" Mintió la castaña, realmente ya podía controlarlo, nadie podía leerla a menos que ella lo permitiera y si los demás se descuidaban, ella podía entrometerse en sus pensamientos.