Maya Watson, una chica de 17 años de secundaria hija de una buena familia, es inteligente, dulce, ingenua y muy hermosa, pero su belleza es oculta tras mucha ropa que la hacen parecer gorda y su aspecto es de la típica, ratón de laboratorio, esto hace que la pobre chica sea víctima de bullying por parte de sus compañeros.
Los grupos en esa secundaria se dividen en nerds, populares niños lindos, que habitualmente andan de punta en blanco y son aparentes niños perfectos y los populares chicos malos que son los traviesos, los mala conducta por así decirlo, pero igual de atractivos y hasta más, también están los solitarios aquellos que no pertenecen a ningún tipo de grupo peor que nerds los inadaptados y aquí es donde entra Maya solitaria solo estudia y no tiene amigas.
Ella será víctima de Tommy Becker quien se acercara a ella solo para pasar sus exámenes e intentará tomar su virginidad mientras la graba esto hará que Maya con la ayuda de un chico malo popular pase de oruga a mariposa.
NovelToon tiene autorización de Marines bacadare para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
No permitiré que la dañen.
Evans Walker.
Haber perdido a Maya, había hecho que yo recapacitara sobre toda mi vida, ya tenía que empezar a centrarme, debía dejar las niñerías, los juegos de adolescentes rebeldes, era todo un hombre y esa pequeña chiquilla me había hecho recapacitar sobre todo lo que yo creía que estaba bien, dudé de ella y aunque nunca la engañé, dudé de ella y ella se había ido, era más que obvio que una distancia entre nosotros a tiempo, era mejor que perder al amor de mi vida por qué sí, esa pequeña Picasso se había convertido en mí todo. No hubo un solo día en el que no me sintiera mal, en el que no llorara recordándola, jamás en mi vida volvería a desconfiar de ella, mi amor por Maya era así de inmenso.
Traté de averiguar a dónde se había marchado, pero no lo logré, los meses pasaban y se acercaban unas competencias nacionales y luego las internacionales, no quería participar, pero debía comportarme como alguien maduro y demostrarle a mi princesa que por ella podría ser alguien mejor.
En los meses que pasaron Tamara nunca dejó de insistirme, hasta una vez se enteró de que estaba tomando con unos amigos y quiso que me acostara con ella, pero ni borracho confundiría a mi amor, con Tamara al principio casi la confundo con Maya, pues, Tamara decía que era ella, pero yo con todo y mi estado de embriaguez me di cuenta de que ella jamás sería mi pequeña Picasso, después de eso Maya siguió insistiendo con un absurdo matrimonio que estaba planeado hace mucho y que solo era una alianza entre empresas, cuando yo estaba con Tamara no me disgustaba, pero ahora de verdad amaba a Maya, nunca antes había deseado levantar mi propia empresa como ahora, quería que el tiempo pasara como en las novelas y yo ya fuera todo un empresario, capaz de enfrentarse a quien sea con tal de proteger a su amada solo tenía una cosa fija Maya Watson, sería Maya Walker, la esposa y la madre de mis hijos.
Así deba arrodillarme ante mi niña, solo había un detalle, debía encontrarla primero y no sabía a dónde buscar, la competencia llegó y ganamos las nacionales, entonces el director decidió unir el equipo, y mandar a Suiza lo mejor de cada grupo, lo mismo hizo con el de porrismo, El gran día había llegado y nos fuimos a Suiza. Al llegar a ese hermoso país nos llevaron a pasear y a conocer, luego de descansar y disfrutar un día la competencia llegó, el equipo contrincante estaba al lado de nosotros a unos metros de distancia, pero primero sería la competencia de porrismo, nuestra institución entro saltando e hizo la coreografía de mi princesa por un momento la imaginé allí, y pensé en lo maravilloso que eso sería.
Al finalizar nuestro equipo fue el turno de suiza y ellos entraron saludando y saltando y entonces ese deseo de hace minutos se materializó, mi niña, mi pequeña Picasso estaba allí delante de mí, bailando estaba más hermosa que nunca, yo sentía mi corazón salirse de mi pecho, luego la competencia comenzó y aunque los nuestros hicieron un buen trabajo, mi princesa era otro nivel, se movía excelente y las acrobacias eran complejas y peligrosas, me tenía muy nervioso, pero todo salió muy bien.
Llego el momento de anunciar a los ganadores y fueron ellos los del equipo de Rusia, estaba feliz por mi pequeña, fue entonces que vi como un chico, el capitán del equipo contrario, corrió y abrazo a mi niña, le daba vueltas y se reían felices, sentí tantos celos no podía ser verdad ella me ama lo sabía.
Durante el descanso Tamara intento hacerme dudar, pero no lo permitió, mi niña espero y cuando ella se fue me buscó a los vestidores la saqué de ese lugar lleno de hombres semidesnudos y hablamos, por fin habíamos arreglado todo la entendí y confíe en ella, después de que ganamos el partido decidimos irnos, pero Tamara provocó a Maya haciendo que está actuará de una manera que jamás había visto, pero no me molestó, Tamara fue lanzada a una fuente después de haber tenido su merecido.
Cuando logramos hablar bien me enteré el porqué de su viaje, su padre estaba enfermo, yo la apoyaría en todo. Al llegar a la clínica él habló con el señor y pedo permiso, el cual me dio, Después de toda esa locura fuimos a su casa y tuve que decirle que estaba comprometido, me quiso dejar ir, pero no lo iba a permitir, solo le conté para que empecemos a contarnos todo siempre, luego quedamos en luchar por lo nuestro, a pesar de que mi padre se oponía, pero jamás me casaría con otra que no fuera mi niña eso sí que no.
Llego momento de regresar y paso un mes en ese tiempo papá había hecho de todo para amenazarme, me había cortado las tarjetas, me quito el apoyo económico y eso incluía la universidad que estaba por comenzar, así que opte por mi abuelo y la herencia de mi madre nada me alejaría de maya yo haría lo que fuese por ella.
Un día llegué a la universidad con mi abuelo para lo de los pagos y estaba mi padre con Tamara tratando mal al amor de mi vida verla así de triste y humillada me mato, él era mi padre, sí, pero ella era mi niña y jamás permitiría una cosa así, después de poner en su sitio a Tamara y a papá saqué a mi pequeña de allí, estaba tan mal mi abuelo luego de pagar lo de la uni, nos invitó a comer y pasamos un día único decir lo que sentí al volver a verla y a besarla es imposible fueron tantas sensaciones, pero lo mejor fue volverla a besar.
Por fin mi niña estaba conmigo.