La Vida de Aria no ha Sido facil, desde que recuerda ha recibido maltrato.
pero en su cumpleaños 18, su vida cambiará totalmente y dará inicio al destino que tiene escrito desde hace más de tres generaciones.
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capítulo 20
Faltaban unas horas para qué llegará el atardecer, pero no muy lejos de ahí una figura cubierta por una túnica y capucha, llegaba a un modesto restaurante, dónde le muestra una tarjeta al mozo que la recibe, este la conduce hasta una habitación en el segundo nivel, una vez que cierra la puerta, dice.
X - (impaciente) Se que estás aquí, puedo sentir tu olor a muerte, así que déjate de juegos y dame la cara de una buena vez.
Y - (sonriendo) Vaya ese carácter tuyo nunca cambiará, por qué siempre estás de mal humor.
X - (impaciente) Déjate de juegos y dime de una vez para qué me llamaste, sabes que es muy peligroso que nos encontremos, sobre todo aquí, Alexander tiene puesta mucha vigilancia por la dichosa ceremonia.
Y - (molesto) Por Alexander no te preocupes de él me encargaré yo, te mandé a llamar, porque lo que más detesto es que me quieran traicionar.
De pronto de las sombras salieron unas garras que tomaron por el cuello a la encapuchada.
X - (asustada) Traicionar, Yo jamás lo haría, siempre he obedecido tus órdenes, no se a que te refieres.
Y - (enojado) Te ordene matar a la mocosa en cuanto cumpliera 18 años.
X - Y eso hice, le pagué a eso dos Rogues para que la busquen y acabarán con su vida.
Y - (Enojado) Pues te mintieron estúpida!! La mocosa sigue viva y lo peor de todo es que ya está a lado del perro de Albert.
X - (sorprendida)Qué??? Eso no puede ser, te juro que esos dos malditos me dijeron que la habían matado, por favor debes creerme.
Y - (fastidiado) Ya deja de lloriquear, te daré una segunda oportunidad, pero está vez no debes fallar, porque de lo contrario no solo acabaré contigo, sino también con esos cachorros que tantos cuidas.
Movió su mano y aquellas garras que sujetaban la soltaron y cayó al suelo, levantándose la capucha que cubría su rostro, dejando ver el rostro de Solange Bronw.
Solange- (suplicando) Por favor deja a mis hijos fuera de esto, haré lo que me pidas, solo dilo y así lo haré.
Y - El plan sigue en marcha, pensándolo bien la llegada de la bastarda de Albert, hará más satisfactoria mi venganza, cuando llegue el momento tú te encargas de matar a esa mocosa, está vez no quiero fallas o ya sabes cuáles serán las consecuencias.
Solange - Pero no será fácil acercarme a ella, ahora más que nunca estará custodiada.
X - Solange, Solange!! Deja eso en mis manos yo me encargo de que tú puedas acercarte a ella sin problemas.
¡Ahora vete!, ya me aburrí de ver tu estúpido rostro!! Y ya sabes ten todo listo, que dentro de muy poco tendremos la venganza que tanto hemos deseado durante estos años.
Solange, salió de aquel lugar muy nerviosa, sabía que está vez no podía fallar, porque si lo hacía no habría poder que la librara de las garras de ese hombre, sobre todo sabiendo que las sombras estaban de su lado.
Por otro lado, desde la ventana de aquel hombre veía como se alejaba Solange y una voz que provenía de las sombras le dijo.
Voz - Estás seguro de que está mujer podrá acabará con esa chica?
Y - Claro que no! Solange solo es un títere que utilicé todos estos años y está vez no será la excepción, solo será una distracción para que mis queridas sombras acaben no solo con Alexander y su séquito, también con la hija de Ariadne.
Después de decir aquello aquel hombre salió del restaurante y desapareció en medio de las sombras.